Mirar más allá
Mirar más allá ColumnaMERaúl Caamaño Matamala Profesor Universidad Católica de Temucoirar más allá es clave, esencial, necesario. GeneralmenM tenuestra mirada es cortoplacista, tiene como límites el hoy, quizásel mañana y, probablemente, en loespacial, es nuestro metro cuadrado y nuestro yo. Hoy, más que nunca es primordial fijar nuestra mirada lejos en el tiempo y en el espacio. ¿Qué hacer? Suspenderse, reflexionar; guardar silencio son acciones esenciales. No ha poco recordé un proverbio árabe, “Si Dios noscreó con dosorejas, dosojos y una sola boca, es porquetenemos que escuchar y ver dos veces antes que hablar.... Vaya quéacertado. Es detodaconve"enciasostener eljuicio, revisar antecedentes, escuchar no solo dos veces, sino escuchar a dos, cerciorarnos de todo de modo metódico, y luego, solo luego, mentar, decir, hacernos partícipes. Aunmás, tenemos que participar, tenemos derecho a ello, pero hagámoslo construyendo, edificando, utilizando herramientas adecuadas, finas quizás, o gruesas, habría que calibrar cuálo cuálesson las pertinentes. Aun más, no solo debemos tener en cuentalainmediatez; todo asutiempo, “pasito a pasito, despacito”, co-¿ Qué hacer? Suspen E derse, reflexionar, guardar silencio sonacciones Ñ esenciales. moreza el nuevo verso. No hay que dar la impresión de un elefante irrumpiendo en la vitrina de un negocio. Los movimientos, o nuestras intervenciones, han de ser apropiados al entorno y propicios al momento. Un poco de tino, de prudencia ha de haber. Hemos puesto atención al contexto, al entorno. Lo que hacemos, lo que decimos, ha de tener efecto en nuestro derredor ciertamente, pues no somos solos, hemos de tener en cuenta lo que nosrodea, quienes están cerca, próximos a nosotros. Lo que hagamos, lo que digamos también ha de considerara quien, a quienes forman parte de nuestra comunidad, lalocal, la regional, lanacional, la planetaria. ¿Será para tanto? No. Nadie es isla, aunque haya distorsiones al respecto. Naturalmente, todosnos requerimos de modo mutuo. Así, lareciprocidad es imperativa, la reciprocidad no es una opción. El yo es nada sin el tú, esel principio mayor, por excelenci: Esvital formar una comunidad. Somos poco más de ocho mil millones de habitantes del planeta, somos poco más de diecinueve milloneslos habitantes de Chile; todos nos necesitamos, nadiesobra, todos contamos, nadie está demás. Raya para la suma. Es imprescindible mirar más allá de nuestra nariz, es un ejercicio natural. Y lo que digamos o lo que hagamos debe considerar mínimo. equilibrio con los demás. Es de toda humanidad mirar másallá..