Encuentro de Obispos de la Patagonia Argentina y el Sur de Chile
Encuentro de Obispos de la Patagonia Argentina y el Sur de Chile colaboración entre diócesis hermanas. Este encuentro forma parte de una tradición que se remonta a 1976, cuando los obispos de la región se reunieron por primera vez para abordar la inmigración de chilenos a Argentina. Desde entonces, estos encuentros han sido una oportunidad para compartir experiencias, coordinar esfuerzos y reforzar la comunión entre las diócesis de la región.
La presencia de los obispos de Argentina, incluyendo a Monseñor Esteban Laxague de Viedma, Monseñor Alejandro Benna de Alto Valle, Monseñor José Slaby de Esquel, Monseñor Roberto Álvarez de Rawson, Monseñor Jorge Luis Wagner de Comodoro Rivadavia y Monseñor Juan Carlos Ares de Bariloche, junto a sus pares de Chile Monseñor Francisco Javier Stegmeier de Villarrica, Monseñor Santiago Silva de Valdivia, Monseñor Fernando Ramos de Puerto Montt, Monseñor Juan María Agurto de Ancud y Monseñor Luis Infanti de Aysén, ha sido un verdadero signo de unidad. Cada uno de ellos trajo consigo historias y sabiduría que enriquecieron nuestro encuentro, creando un espa cio de diálogo y colaboración entre las diferentes diócesis. Durante estos días, los obispos abordaron temas de vital importancia como la ecología, inspirados por los documentos del Papa Francisco, y la emergencia climática. Las acciones que cada diócesis está emprendiendo para enfrentar estos desafíos son un testimonio del compromiso compartido por cuidar de nuestra casa común. También se están compartiendo experiencias y realidades que reflejan la rica diversidad de la Iglesia en nuestra región. DECLARACIÓN DE LOS OBISPOS DE LA PATAGONIA Y SUR DE CHILE 1. Los Obispos de la Patagonia y sur de Chile nos hemos reunido en la ciudad de Castro (Chile) del 17 al 21 de marzo del año en curso. En estos días, hemos podido compartir la alegría de experimentar que tenemos en común muchos dones recibidos del Señor.
Nos une, en primer lugar, la misma fe en Jesucristo resucitado, quien nos convoca a vivir en un pueblo unido, que ha sido capaz de expresar su admirable vida comunitaria de fe en templos patrimoniales universalmente valorados.
También nos une habitar un vasto territorio al sur de nuestro continente, con paisajes hermosos, un clima muchas veces difícil y un pueblo lleno de entusiasmo por la vida, que sabe compartir lo que tiene para enfrentar juntos los desafíos de esta tierra. 2. Nos ha parecido importante reflexionar e intercambiar opiniones respecto al cambio climático que está experimentando el mundo y, en particular, nuestra región.
Nos interpela el hecho de que la actividad humana pueda producir cambios irreparables al medio ambiente, de manera que nuestra propia existencia, al menos como la conocemos y abrazamos hasta ahora, se pueda ver amenazada en el futuro. Nos interpela también la solidaridad intergeneracional que el Papa Francisco nos invita a tener presente para que las generaciones del mañana no se encuentren con una tierra herida y dañada por nosotros (cf. Laudato Si, 159-162).. Entre el 17 y el 21 de marzo se reunieron once obispos de la región, ocasión especial para fortalecer los lazos de comunión y