La responsabilidad de los gobiernos en el desarrollo regional
La responsabilidad de los gobiernos en el desarrollo regional EditorialPara el próximo viernes 18 de octubre se ha programado un encuentro público-privado cuyo único tema de análisis será el desarrollo regionaly las dificultades que hoy muestra el territoriopara avanzar y generar mejores condiciones de vida para sus habitantes.
Se trata sin duda de un tema de la máximaprioridad y que hemos venido abordando desdeel inicio de la actual gestión gubernamental tanto en nuestras editoriales como en numerosas crónicas y reportajes donde los testimonios de distintos entrevistados, dan cuenta de una realidad complicada, de una percepción bastanteadversa sobre el momento que enfrentamoscomo región en el ámbito económico y productivo.
Y es que hablar de desarrollo regional no debe tener sesgo político, por cierto, porqueen esta zona del país existen aún muchísimasnecesidades insatisfechas, que siguen siendo reivindicaciones o demandas que ninguna de lasúltimas seis administraciones ha podido atenderen la medida que la ciudadanía anhela.
Y pasa esto porque las autoridades de turno no han sido capaces de enfrentar esta situacióny al parecer viven en un mundo paralelo, donde, o no aprecian lo que verdaderamente ocurre, o simplemente prefieren poner la mirada en otra parte. Pero Aysén enfrenta problemasserios en el ámbito económico y laboral. Faltamano de obra calificada, las grandes empresasconstructoras y salmoneras siguen trayendogente desde otras regiones y la realidad no ha cambiado mucho en la última década.
Y no podemos olvidar que los grandesanhelos del país y sus regiones se van cumpliendoen la medida que los ciudadanos y el gobiernode turno, asumen una convicción en torno aesas metas, las que por cierto se sustentan en demandas de larga data y que se relacionan con la legítima aspiración que tienen las personaspor progresar y mejorar sus condiciones de vida.
En Aysén esa máxima parece ser aún másintensa, ya que somos una zona extrema que ha debido sortear muchísimas dificultades parapoder lograr desarrollarse, una realidad en la cual todos los últimos gobiernos, de 1990 en adelante, tienen una importante cuota de responsabilidad. La ciudadanía plantea a diario que quierecrecer, desarrollarse y proyectarse, y ese mismoanhelo se transforma en un objetivo región, se requiere medidas y políticas acertadas paralograrlo, no solamente excusas ni permanentesjustificaciones.
En este año electoral, de muchas promesas, cortes de cinta, entrega de recursos, entrega de terrenos, colocación de primeras piedras y cuanto show sea posible hacer, la sensibilidad ciudadana se exacerba, pero si no hay sintonía, difícilmente habrá un reconocimiento de lagente a las acciones gubernamentales, porpositivas o relevantes que estas sean..