LOS EFECTOS DE LA FALTA DE AGUA para el consumo humano y la agricultura
LOS EFECTOS DE LA FALTA DE AGUA para el consumo humano y la agricultura L I M A R Í Y E L Q U I S O N L A S P R OV I N C I A S M Á S C O M P L I C A D A S LOS EFECTOS DE LA FALTA DE AGUA para el consumo humano y la agricultura En el ámbito productivo, se están extremando los esfuerzos para extender las reservas y evitar pérdidas de cultivos. Desde la delegación provincial, en tanto, informan que se ha potenciado el trabajo de entrega del recurso a través de camiones aljibe y se trabaja en nuevas fuentes de captación.
L os efectos de la prolongada falta del recurso hídrico ya se comienzan a hacer notar en la agricultura y preocupa lo que pueda llegar a pasar en cuanto al consumo humano de no mediar precipitaciones en los próximos meses. Respecto del sector productivo, Christian Álvarez, seremi de Agricultura, señala que en la actualidad se produce un panorama dispar por provincia.
En el caso del Choapa, se encuentra en una situación más favorable, porque tanto los embalses Corrales como El Bato están en valores que están por sobre el promedio "y por lo tanto eso nos da la tranquilidad de que esta temporada de riego está asegurada para la agricultura y el consumo humano también". No obstante, indica que la situación más preocupante se da en Elqui y Limarí. Esta última provincia, presenta la realidad más crítica, debido a que representa alrededor del 65% de la agricultura de la región.
En este territorio, preocupa principalmente lo que podría ocurrir con el embalse La Paloma, que ya el año pasado enfrentó una crisis importante cuando la empresa sanitaria debió recurrir a la justicia para priorizar el consumo humano, lo que mermó la disponibilidad para gran cantidad de productores.
Respecto de Elqui, también genera inquietud, debido principalmente a la demanda de agua de la conurbación La Serena Coquimbo. "Se requiere alrededor de 30 hectómetros o 30 millones de metros cúbicos y estamos hoy día con un balance hídrico entregado por la misma junta de vigilancia que está en el límite", indica.
Álvarez reconoce que desde este organismo están haciendo un esfuerzo importante y con el apoyo de la Dirección de Obras Hidráulicas del MOP han logrado equilibrar la agricultura con el consumo humano. "Pero esta situación se complica si no se producen precipitaciones importantes durante el invierno, que lamentablemente desde punto de vista del pronóstico meteorológico es lo más probable que ocurra. A partir del mes de septiembre vamos a tener ese balance y esto eso puede radicar en un desmedro importante de la agricultura de la temporada 2025-2026 en el Elqui", reconoce.
En cuanto a cuáles serían los cultivos que se podrían ver más afectados en la región de no mediar precipitaciones, el seremi detalla que ya en el último periodo se registró una baja sustancial en los paltos, que disminuyeron un 40% en su superficie. "Hay pérdidas también en pradera que normalmente ocupan los crianceros y también hemos tenido disminución en la superficie de hortaliza", agrega.
En relación a si estamos ya en "una línea roja" respecto al riego, el seremi plantea que en Elqui y Limarí el agua estaría asegurada hasta agosto, pero con muchas limitaciones. "No va a haber ningún canal al 80% de prórroga. Con restricciones hasta agosto estamos asegurados en el agua con lo que hay hoy día. Obviamente eso cambia y en agosto o septiembre uno lo vuelve a calcular en función de lo que es la cantidad de precipitaciones que cayeron", dice. CONSUMO HUMANO Otra de las preocupaciones en la región es el consumo humano.
Desde la delegación presidencial regional se informó que el abastecimiento de agua potable en la región vía camiones aljibe es una situación que se ha ido transformando en una necesidad primordial por la condición de sequía permanente de la región y distintos factores que afectan a los pozos de los Servicios Sanitarios Rurales.
La cantidad de camiones aljibe que actualmente están distribuyendo el recurso son 84: 15 en Elqui, 47 en Limarí y 22 en Choapa, beneficiando a 30.426 personas, con una inversión anual de más de 5 mil millones de pesos y entregando en total 555.272 metros cúbicos de agua anuales. "La crisis hídrica nos golpea con fuerza y hemos estado al límite de llegar a la racionalización, sobre todo en Limarí el año pasado, pero la lluvia nos dio un respiro.
Sin embargo, hemos sido un gobierno que no se ha quedado tranquilo, y por primera vez tomamos medidas concretas en materia de abastecimiento con la desaladora multipropósito de El Panul que estará licitada a fines de este año, mientras continúa su proceso en el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), y que considera el abastecimiento de 1.200 litros de agua por segundo para la conurbación La Serena-Coquimbo", explicó el delegado presidencial, Galo Luna Penna.
Además, la autoridad aclaró que el año pasado finalizó el estudio de localización para una planta modular de emergencia para la provincia del Limarí con una inversión de $ 400 millones. "Estamos a la espera de su ejecución que será financiada gracias a un convenio entre el Ministerio del Interior y el Ministerio de Obras Públicas", aclaró Luna..