Autor: CARLOS WILLIAMSON Profesor titular UC Clapes UC
“Calidad comprometida”
Señor Director: En carta a este medio, distinguidos colegas ponen reparos al proyecto de ley que traslada a rectores de universidades las decisiones sobre acceso a las pedagogías. Comparto la crítica por los evidentes conflictos de interés, Me refiero, además, a dos de sus comentarios. Desde luego, que el déficit docente ha disminuido. No parece ser así. La citada edición de "El Mercurio” da cuenta de una caída de 43,3 % en la matrícula de primer año y de 17,9 % en la oferta de programas entre 2018 y 2022. Si bien está cayendo la tasa de natalidad, persistirá por un tiempo un déficit de docentes en ciertas disciplinas y regiones del país. Lo segundo, la calidad docente. Es una premisa aceptada que la calidad de la educación en un país no puede superar la calidad de sus profesores, y las evaluaciones periódicas revelan una alta heterogeneidad en los desempeños. Pero las medidas adoptadas al alero de la ley 20.903 del 2016, no han cumplido las expectativas. Estudios recientes en Clapes UC dejan de manifiesto que subir las exigencias en la admisión regular no es la "bala de plata” que garantice una selección fina de estudiantes con potencial de idoneidad docente. Asimismo, que las pruebas de diagnóstico en las carreras de Pedagogía no predicen cómo será el desempeño futuro del docente. Y que las acreditaciones de las carreras tampoco están contribuyendo a diferenciar las calidades académicas de los procesos formativos. La política pública debe avanzar hacia un enfoque más integral.
Que reconozca que vías de acceso no tradicionales, como la prosecución de estudios desde otras disciplinas, pueden ser estrategias virtuosas, que es clave identificar a tiempo la vocación pedagógica; que en las pedagogías conviene revisar el contenido de las pruebas de diagnóstico y los criterios y estándares de la acreditación; que las mentorías son valiosas; que es necesario agilizar el avance en la carrera docente para premiar oportunamente al profesor o profesora talentosa y, por último, que abatir la violencia y procurar un sano clima escolar son exigencias fundamentales para atraer estudiantes a esta noble profesión.