De incendios a megaincendios, una guerra anual potenciada por el cambio climático
De incendios a megaincendios, una guerra anual potenciada por el cambio climático ECO.
Rosa Zamora Cabrera rosa. zamoraGmercuriovalpo. cl I megaincendio de Viña E del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Limache, que dejó 137 víctimas fatales, destruyó más de 2000 viviendas y arrasó cerca de 11.000 hectáreas, es el segundo siniestro más letal del mundo en este siglo, solo superado por la catástrofe del estado de Victoria, Australia, en febrero de 2009, que dejó 173 fallecidos.
Esa tragedia, que es conocidacomo Sábado Negro, destruyó cerca de 2.000 casas, afectó a 340.000 hectáreas, y de acuerdo a estuyd puibloicascio nes posteriores, fue provocado por una suma de factores, comouna ola decalor, prolongada seqy fuuertesí vaient os.
Una combinación cuyo riesgo ha quedado internalizado a fuerzade doyl deostrurcci ón en la memoria delos habitantes de la zona centro surde Chile, donde ha operado con enervante frecuencia, provocando pérdida de vidas, hogares, fuentes laborales, animales, bosques y cultivos, infraestructura y serviEL MEGAINCENDIO DE 2024 ES EL SEGUNDO MÁS LETAL DEL SIGLO.
LOS QUE AFECTARON ALA ZONA CENTRO SUR EN 2023 TAMBIÉN ESTÁN EN LA LISTA. cios, así como del paisaje cotidiano de las personas. entre los factores que inciden dios figuran el aumento de las (ha), con un promedio de mayor escala, que también geen la rápida propagación e intemperaturas, las olas de calor 40.000 ha, peroen los periodos neró el viento del esteen la preINCENY MDEGAIINOCEDSIO S tenso poder calorífico que alextremo, la prolongada sequía, 2016y -20222-20023 1es7 as sucordillera conocido como PuelAsociados al cambio climático, canzan los gigantescos incenasíccomo las oscilaciones entre perficies fueron sobrepasadas che, el que, a su vez, reforzó el periodos de escasas y de intencon creces, llegandoa 500.000 descenso y calentamiento del sas precipitaciones.. y 400.000 ha, respectivamenaire.
Al mismo tiempo, esta conLos fenómenos meteorolóte, cifras inéditas en el registro figuración meteorológica acelegicos extremos continuarán mahistórico, expone un artículo ró el viento del sur sobre la corY C REMATORIO nifestándose en las próximas del divulgador científico del dillera de la costa, que fue pardécadas si no se logra frenar el CR2, José Barraza, a propósito ticularmente intenso y promoCDEO NCEPCIÓN alza en la temperatura global del estudio. vió el rápido avance del fuego del planeta, indica un estudio en los sectores afectados”, exsobre la importanciade lasconSOBRE 40*C Resuelve en vida y entrega pone la publicación. diciones meteorológicas de ese La investigación reveló “que duY recalca que si bien los metranquilidad a tus seres queridos tipo en los siniestros de la zona rante los megaincendios hubo gaincendios fueron iniciados centro sur de Chile, que fue putemperaturas extremadamente por acción humana y ocurrieron CREMACIÓN A FUTURO blicado en septiembre de 2024 altas y sin precedentes en gran en un terreno propenso a ser ($1.390.000 ) por el Centro de Ciencia del Clparte de la zona centro-sur de quemado por su alta carga de may la Resiliencia, CR2.
Chile, incluyendo el sector doncombustible, “su propagación El estudio, realizado por Todese desarrollaron estos evenen los veranos del 2017 y 2023 más Carrasco, René Garreud y tos”, como 41.5 ” Cen Chillán el parece muy determinada porla Denis Bozkurt, investigadores 26 de enero de 2016, y41.6 *Cel meteorología extrema y sin predel CR2; Martín Jacques, inves3 defebrero de 2023, lo que procedentes en ambos periodos”. tigador principal, y Aníbal Pauvocó baja humedad extrema chard, del Instituto de Ecología que contribuyó al secamiento EVENTOS EXTREMOS y Biodiversidad, señala que de la vegetación yel suelo. El director del Laboratoriode hasta 2016 el área quemada “En ambos casos, el intenso Geo-información y Percepción portemporadade riesgoforescalor y la baja humedad a nivel Remota del Instituto de GeoWWW. CREMATORIOCONCEPCION.
CL talen esta zona fluctuaba entre local fueron propiciados por una grafía de la Pontificia Universi10.000 y 100.000 hectáreas configuración meteorológica de dad Católica de Valparaíso, Ro-berto Chávez, recuerda que la causa principal de los incendios es el factor humano, pero “desde el punto de vista de las condiciones biofísicas, hay que pensar que es el aspecto climático, es decir, las condiciones que propician que ellos alcancen este nivel de gravedad, algo que va a ser cada vez más recurrente”. Entre esas condiciones menciona veranos más secos en la zonacentro sur, avance dela desertificación por efecto del calentamiento y extremos meteorológicos como las ya mencionadas oscilaciones entre años con lluvias casi inexistentes y otros con tormentas caracterizadas por copiosas lluvias.
Ejemplifica con lo ocurrido en 2019 y 2021, “que fueron los mássecos en100 años” y losintensos frentes de mal tiempo de 2023 y 2024, que provocaron graves inundaciones, daños en viviendas, puentes, carreteras y vías férreas, dejando a miles de personas aisladas, entre otras consecuencias. Así, el 13 junio del año pasado en Concepción cayeron 120 milímetros de lluvia en un solo día.
Yel 21 de agosto de 2023, la estación meteorológica del Aeródromo Curicó contabilizó 150,2 mm, “posicionándose en el primer lugaral listar los datos de precipitación máxima en 24 horas, considerando registros desde 1950”, de acuerdo al reporte meteorológico.
CALY OVIERNTO S Respecto de la relación entre elcambio climático y los incendios de quinta o sexta generación quese hanregistrado en Chile y en el mundo, la directora del Departamento de Meteorología dela Universidad de Valparaíso, Ana María Córdova, señala que no cabe duda que es uno de los de incidencia. factores “Estamos hablando de aumento en la temperatura principalmente y también de los efectos de los cambios en los patrones de precipitación, donde tenemos extensos periodos de sequía, pero también precipitaciones bastante intensas y muy cortas.
Estas hacen que crezca la vegetación y cuando ya nohay lluvias, secomiean cseeca r y sirvacomo combustible”. La doctora en Ciencias remarca que 2024 fue el año más cálido documentado a nivel global desde que existen registros y quetambién fue el primero en que la temperatura media superóen 1,55 C el nivel preindustrial, como lo comunicó en enero el servicio de Cambio Climático de Copernicus (C35), el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea.
Aloanterior añade lasolasde calor, que soncada vez más intensas, y las sequías prolongadas, así 'comoel hecho de que las tempoadas de alto riesgo coinciden en la mayoría de los casoscon el veano ennuestro clima mediterráneo, periodo dealtastemperaturas y muy poca precipitación.
“Pero también hay otros factores que provocan incendios forestales, como ocurrió en el hemisferio norte, donde las altas temperaturas han ido asociadas a fuertes vientos, que en nuestro caso tienen distintos nombres en diferentes zonas, como el Raco o el Terral; todos estos son elementos que influyen en la propagación del fuego”, detalla la académica.
Para que haya un incendio forestal, recuerda, es necesario que exista el combustible y el oxígeno que aporta el aire, pero una vez que empieza, por efecto dela elevación del aire caliente, genera vientos por sí mismo, los que aceleran la expansión del fuego, como se ha visto en los gigantescos siniestros que han devastado zonas de California, en Estados Unidos. ÚLTIMA GENERACIÓN No existe consenso en denominar los megaincendios como siniestros de quinta o sexta generación.
Un artículo de National Geographic España, 9 de enero, remite a una investigación publicada en Global Ecolology and Biogeography cuyos autores analizaron un centenar de estudios sobre esta materia y sugieren que, en términos de tamaño, un megaincendio es aquel que supera las 10.000 hectáreas de terreno afectado.
Para Roberto Chávez, doctor en Geo-información y Percepción Remota, más allá del tamaño, hay que considerar el poder calorífico del incendio, que se mide en megawatts, y con ese parámetro el del 2 y 3 defebrero de 2024 en el Gran Valparaíso y Marga Marga califica de sobra dentro de la máxima categoría, aunque su superficie hayasido menor que la deotrossiniestros, como el de Las Máquihas, registrado en enero de en que se quemaron 2017,187.000 ha en las regiones degine, un escáner láser que, operando en un avión, es capaz de registrar esos datos y entregar la información.
“En Chile no existe esa tecpero sí cuentan con nología, ella Estados Unidos y Europa, que realizan vuelos Lidar justo de incenantes de latemporada dios con el propósito de registrar la altura de la vegetación para el mapa de combustible, que en mi opinión es lo que se necesita para poder modelar adecuadamente un incendil recalca Roberto Chávez. El experto también opina que debería establecerse algún tipo de alianza entre la academia y la Fuerza Aérea para que el país pueda contar con esta herramienta y prever el comportamiento de los incendios. HAY APRENDIZAJE Por otra parte, los académicos dela UV y dela PUCV coinciden en un aspecto: aunque a golpes y con dolor, hay un aprendizaje después de la tragedia del 2 y 3 de febrero. La rapidez del combate contra los incendios y una mayor conciencia de la población-que no tarda en reportar incipientes focosconstituyen para ellos señales alentadoras.
Como también el efecto disuasivo que han conseguido instalar el fiscal especializado en incendios, Osvaldo Ossandón, y el comisario de la Brigada Investigadora de Delitos contra el Medio Ambiente de la PD! Valparaíso, Iván Navarro, que tras minuciosas diligencias han logrado detener y formalizar a siete imputados como responsables del megaincendio.
ZONAS DE RIESGO En otra arista de este tema, la directora del Departamento de Meteorología de la UV plantea que “nosotros como región estamos muy expuestos”. “Cuatro universidades regionales hicimos un proyecto acerca de las zonas con mayores riesgos en el Área Metropolitana de Valparaíso, y su prospección a futuro. Se incluyeron marejadas, incendios forestales, deslizamientos de tierra, todo lo que hemos estado viendo en las costas, con las dunas, eso se sabía.
Pero se siguen autorizando construcciones donde no se debe, la población crece y muchas personas se instalan en lugares muy vulnerables, y es la población quese ve más afectada”. “Tenemos que trabajar en la educación, como siempre, y en la prevención. Pero esto se va a seguir viendo. Lo que se pensaba que podía pasar el año 2100 está pasando ahora, antes de 2030. Entonces es preocupante y tenemos que adaptarnos. No0 El incendio forestal conocido como Sábado Negro, que comenzó el 7 de febrero de 2009 en el estado de Victoria, Australia, es el más letal registrado en el Siglo XXI. Provocó la muerte de 173 personas, dejó centenares de heridos, alrededor de dos mil casas destruidas, 340.000 hectáreas de bosque quemadas y provocó el desplazamiento de 7.500 personas. La tragedia fue gatillada por la combinación de fuertes vientos, una ola de calor con temperaturas extremas y una sequía sin precedentes, que hicieron que el fuego se propagara a una velocidad récord. La situación se mantuvo por 36 días. Una comisión se abocó a la investigación de las causas del desastre y concluyó su labor en 2010, presentando un informe que incluyó 67 recomendaciones.
Después del megaincendio de febrero de 2024 en la Región de Valparaíso, le sigue en letalidad el de Lahaina, paraíso turístico ubicado en las islas Maui, Hawái, donde se registraron 97 víctimas fatales y 31 desaparecidos, y se reportó la destrucción de más de 2.200 inmuebles, asícomo daños generalizados en la ciudad.
El incendio se prolongó entre el 8 y el 11 de agosto de 2023 y se originó a partir de una emergencia forestal previa que los bomberos creían haber apagado, y que fue causada por lacaídade cables eléctricos sobre vegetación reseca.
Impulsado por fuertes y erráticos vientos generados por una zona de alta presión al norte de Hawái y el huracán Dora al sur, el fuego arrasó Lahaina y alcanzó a personas atrapadas en sus autos, obligando a muchas a huir hacia el mar. Con pérdida de vidas de similar magnitud figuran luego tres desastres: la ola de incendios que devastó el condado de Los Ángeles, en California, EE. UU; los de la temporada 2019-2020 en Australia, y los del verano de 2023 en seis regiones del centro sur de Chile.
El 7 de enero comenzaron los incendios en Los Ángeles y recién el 31 del mes pasado fueron reportados como “100 por ciento contenidos”. El dePalisades, el más violento, arrasó casi 9.500 hectáreas, mientras queel de Eaton, que afectó a la ciudad de Pasadena, redujo a cenizas casi 5.700 hectáreas. Los siniestros dejaron al menos 29 muertos -de acuerdo a medios locales otras 14 personas siguen desaparecidas-, más de 16 mil estructuras destruidas y obligaron a evacuar a más de 150 mil residentes. La empresa meteorológica AccuWeather estimó los daños y las pérdidas entre 250.000 y 275.000 millones de dólares.
Entre junio de 2019 y mayo de 2020 seregistró en Australia una serie de siniestros potenciados por temperaturas récord y una sequía prolongada, que causaron la muerte de 26 personas -otras seis desaparecidas-, destruyeron más de 2.500 inmuebles, incluidas 1.300 viviendas y consumieron cerca de 30 millones de hectáreas.
Finalmente, en el verano de 2023 la zona centro sur de Chile se vio afectada también por una serie de incendios que golpearon a las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y Maule.
Araíz de la violenta propagación del fuego murieron 26 personas y cerca de 8.000 resultaron afectadas por la pérdida de viviendas o medios de vida, con especial impacto a más de 11.600 productores agrícolas, ya que los incendios destruyeron 5.900 hectáreas de cultivos y se perdieron casi 34 mil animales.
Lasuperficie arrasada por el fuego superó las 400 mil hectáreas. equejarnos, sino adaptarnos y buscar soluciones”, sostiene. desdeel 1 de octubre, se habían registrado 17 olas de calor en el país, mientras que en la temporada anterior a la misma fecha eran solodos.
Y la velocidad delGUERRA ANUAL “Después de la tragedia de Viña del Mar, hemos hecho muchas viento era compleja, lo que haadecuaciones, lecciones apren bía provocado mayor cantidad de incendios que en el periodo didas, hemos revisado. Nos hemos concentrado en conocer dealto riesgo 2023-2024, pero con menor superficie afectada. másel fuego, lo quenos permite “Los incendios cada vez son determinar dónde atacar y dónde hay áreas a sacrificar en térmás complejos. La preparación minos de vegetación. Creo que a nivel mundial va a cambiar.
Podemos decir que todos los ahí hemos dado un paso mayor, con programas desarrollados años vaa venir una guerra, que vamos atener y debemos estar porespecialistasenincendios de preparados para eso”. Es una la Corporación, con lo que podemos dar una mejor respuesta”, guerra “que tenemos que endeclaró a fines de enero aeste frentar con recursos terrestres, aéreos y con mucha tecnología, diario la directora nacional de con conocimiento del fuego, es Conaf, Aida Baldini. = Para esa fecha, contadas laúnicaforma”, resumió.
En Chile está el modelo matemático para simular dirección y avance de incendios, pero no están todas las variables que necesita para funcionar”. Roberto Chávez Director Laboratorio Geo-información PUCVLo que se pensaba que podía pasar el año 2100 está pasando ahora. Entonces, es preocupanteTenemos que adaptarnos y buscar soluciones” Ana María Córdova Directora Departamento de Meteorología de la UVO'Higggins, Maule y Biobío.
Ellaboratorio que dirigetrabajóenla estimación de temperatura y poder calorífico del 2F utilizando imágenes satelitales y pudo determinar de ese modo queen algunos puntos de las z0nas más golpeadas por la tragedia el incendio superó los 800? Cy los 1.500 MW. Otros expertos, como Inazio Martínez de Arano, director de la Oficina Regional del Mediterráneo del Instituto Forestal Europeo, se refieren a incendios de sexta generación.
Aluden con ello a siniestros “de tal intensidad que alteran la dinámi ca de las capas altas de la atmósfera y generan vientos que pueden ser muy difíciles de modelar, por lo que no noses posible predecir el comportamiento del fuego”. MODELACIÓN INCOMPLETA El investigador y académico de la PUCV dice que en el país sehan desarrollado modelos para simular en pocos minutos la dirección y características del avance de un incendio, con el objeto de que se pueda organizar mejor el ataque, y en ese contexto destaca la labor del Premio Nacional de Ciencias Aplicadas 2000, doctor Andrés Weintraub, del Instituto de Sistemas Complejos de Ingeniería de la Universidad de Chile. “El modelo matemático existe.
El problema es que no existen todas las variables que necesita para funcionar, y uno delos principales es la inexistencia del mapa de combustible”, expone, el cual requiere tres insumos: el tipo de vegetación, su humedad y la altura de la misma. Para los dos primeros se puede recurrira los satélites, no así para el tercero. La altura de la vegetación se determina con la tecnología de teledetección Lidar, Light Detection and Ran-LOS SINIESTROS MÁS LETALES DEL SIGLO XXI OCURRIERON EN AUSTRALIA, CHILE Y HAWAI. Aunque el factor humano es el primer eslabón de la cadena del fuego, la alteración de los patrones meteorológicos incide en su velocidad de propagación y poder destructivo. De incendios a megaincendios, una guerra anual potenciada por el cambio climático ECO.
Rosa Zamora Cabrera rosa. zamoraGmercuriovalpo. cl I megaincendio de Viña E del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Limache, que dejó 137 víctimas fatales, destruyó más de 2000 viviendas y arrasó cerca de 11.000 hectáreas, es el segundo siniestro más letal del mundo en este siglo, solo superado por la catástrofe del estado de Victoria, Australia, en febrero de 2009, que dejó 173 fallecidos.
Esa tragedia, que es conocidacomo Sábado Negro, destruyó cerca de 2.000 casas, afectó a 340.000 hectáreas, y de acuerdo a estuyd puibloicascio nes posteriores, fue provocado por una suma de factores, comouna ola decalor, prolongada seqy fuuertesí vaient os.
Una combinación cuyo riesgo ha quedado internalizado a fuerzade doyl deostrurcci ón en la memoria delos habitantes de la zona centro surde Chile, donde ha operado con enervante frecuencia, provocando pérdida de vidas, hogares, fuentes laborales, animales, bosques y cultivos, infraestructura y serviEL MEGAINCENDIO DE 2024 ES EL SEGUNDO MÁS LETAL DEL SIGLO.
LOS QUE AFECTARON ALA ZONA CENTRO SUR EN 2023 TAMBIÉN ESTÁN EN LA LISTA. cios, así como del paisaje cotidiano de las personas. entre los factores que inciden dios figuran el aumento de las (ha), con un promedio de mayor escala, que también geen la rápida propagación e intemperaturas, las olas de calor 40.000 ha, peroen los periodos neró el viento del esteen la preINCENY MDEGAIINOCEDSIO S tenso poder calorífico que alextremo, la prolongada sequía, 2016y -20222-20023 1es7 as sucordillera conocido como PuelAsociados al cambio climático, canzan los gigantescos incenasíccomo las oscilaciones entre perficies fueron sobrepasadas che, el que, a su vez, reforzó el periodos de escasas y de intencon creces, llegandoa 500.000 descenso y calentamiento del sas precipitaciones.. y 400.000 ha, respectivamenaire.
Al mismo tiempo, esta conLos fenómenos meteorolóte, cifras inéditas en el registro figuración meteorológica acelegicos extremos continuarán mahistórico, expone un artículo ró el viento del sur sobre la corY C REMATORIO nifestándose en las próximas del divulgador científico del dillera de la costa, que fue pardécadas si no se logra frenar el CR2, José Barraza, a propósito ticularmente intenso y promoCDEO NCEPCIÓN alza en la temperatura global del estudio. vió el rápido avance del fuego del planeta, indica un estudio en los sectores afectados”, exsobre la importanciade lasconSOBRE 40*C Resuelve en vida y entrega pone la publicación. diciones meteorológicas de ese La investigación reveló “que duY recalca que si bien los metranquilidad a tus seres queridos tipo en los siniestros de la zona rante los megaincendios hubo gaincendios fueron iniciados centro sur de Chile, que fue putemperaturas extremadamente por acción humana y ocurrieron CREMACIÓN A FUTURO blicado en septiembre de 2024 altas y sin precedentes en gran en un terreno propenso a ser ($1.390.000 ) por el Centro de Ciencia del Clparte de la zona centro-sur de quemado por su alta carga de may la Resiliencia, CR2.
Chile, incluyendo el sector doncombustible, “su propagación El estudio, realizado por Todese desarrollaron estos evenen los veranos del 2017 y 2023 más Carrasco, René Garreud y tos”, como 41.5 ” Cen Chillán el parece muy determinada porla Denis Bozkurt, investigadores 26 de enero de 2016, y41.6 *Cel meteorología extrema y sin predel CR2; Martín Jacques, inves3 defebrero de 2023, lo que procedentes en ambos periodos”. tigador principal, y Aníbal Pauvocó baja humedad extrema chard, del Instituto de Ecología que contribuyó al secamiento EVENTOS EXTREMOS y Biodiversidad, señala que de la vegetación yel suelo. El director del Laboratoriode hasta 2016 el área quemada “En ambos casos, el intenso Geo-información y Percepción portemporadade riesgoforescalor y la baja humedad a nivel Remota del Instituto de GeoWWW. CREMATORIOCONCEPCION.
CL talen esta zona fluctuaba entre local fueron propiciados por una grafía de la Pontificia Universi10.000 y 100.000 hectáreas configuración meteorológica de dad Católica de Valparaíso, Ro-berto Chávez, recuerda que la causa principal de los incendios es el factor humano, pero “desde el punto de vista de las condiciones biofísicas, hay que pensar que es el aspecto climático, es decir, las condiciones que propician que ellos alcancen este nivel de gravedad, algo que va a ser cada vez más recurrente”. Entre esas condiciones menciona veranos más secos en la zonacentro sur, avance dela desertificación por efecto del calentamiento y extremos meteorológicos como las ya mencionadas oscilaciones entre años con lluvias casi inexistentes y otros con tormentas caracterizadas por copiosas lluvias.
Ejemplifica con lo ocurrido en 2019 y 2021, “que fueron los mássecos en100 años” y losintensos frentes de mal tiempo de 2023 y 2024, que provocaron graves inundaciones, daños en viviendas, puentes, carreteras y vías férreas, dejando a miles de personas aisladas, entre otras consecuencias. Así, el 13 junio del año pasado en Concepción cayeron 120 milímetros de lluvia en un solo día.
Yel 21 de agosto de 2023, la estación meteorológica del Aeródromo Curicó contabilizó 150,2 mm, “posicionándose en el primer lugaral listar los datos de precipitación máxima en 24 horas, considerando registros desde 1950”, de acuerdo al reporte meteorológico.
CALY OVIERNTO S Respecto de la relación entre elcambio climático y los incendios de quinta o sexta generación quese hanregistrado en Chile y en el mundo, la directora del Departamento de Meteorología dela Universidad de Valparaíso, Ana María Córdova, señala que no cabe duda que es uno de los de incidencia. factores “Estamos hablando de aumento en la temperatura principalmente y también de los efectos de los cambios en los patrones de precipitación, donde tenemos extensos periodos de sequía, pero también precipitaciones bastante intensas y muy cortas.
Estas hacen que crezca la vegetación y cuando ya nohay lluvias, secomiean cseeca r y sirvacomo combustible”. La doctora en Ciencias remarca que 2024 fue el año más cálido documentado a nivel global desde que existen registros y quetambién fue el primero en que la temperatura media superóen 1,55 C el nivel preindustrial, como lo comunicó en enero el servicio de Cambio Climático de Copernicus (C35), el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea.
Aloanterior añade lasolasde calor, que soncada vez más intensas, y las sequías prolongadas, así 'comoel hecho de que las tempoadas de alto riesgo coinciden en la mayoría de los casoscon el veano ennuestro clima mediterráneo, periodo dealtastemperaturas y muy poca precipitación.
“Pero también hay otros factores que provocan incendios forestales, como ocurrió en el hemisferio norte, donde las altas temperaturas han ido asociadas a fuertes vientos, que en nuestro caso tienen distintos nombres en diferentes zonas, como el Raco o el Terral; todos estos son elementos que influyen en la propagación del fuego”, detalla la académica.
Para que haya un incendio forestal, recuerda, es necesario que exista el combustible y el oxígeno que aporta el aire, pero una vez que empieza, por efecto dela elevación del aire caliente, genera vientos por sí mismo, los que aceleran la expansión del fuego, como se ha visto en los gigantescos siniestros que han devastado zonas de California, en Estados Unidos. ÚLTIMA GENERACIÓN No existe consenso en denominar los megaincendios como siniestros de quinta o sexta generación.
Un artículo de National Geographic España, 9 de enero, remite a una investigación publicada en Global Ecolology and Biogeography cuyos autores analizaron un centenar de estudios sobre esta materia y sugieren que, en términos de tamaño, un megaincendio es aquel que supera las 10.000 hectáreas de terreno afectado.
Para Roberto Chávez, doctor en Geo-información y Percepción Remota, más allá del tamaño, hay que considerar el poder calorífico del incendio, que se mide en megawatts, y con ese parámetro el del 2 y 3 defebrero de 2024 en el Gran Valparaíso y Marga Marga califica de sobra dentro de la máxima categoría, aunque su superficie hayasido menor que la deotrossiniestros, como el de Las Máquihas, registrado en enero de en que se quemaron 2017,187.000 ha en las regiones degine, un escáner láser que, operando en un avión, es capaz de registrar esos datos y entregar la información.
“En Chile no existe esa tecpero sí cuentan con nología, ella Estados Unidos y Europa, que realizan vuelos Lidar justo de incenantes de latemporada dios con el propósito de registrar la altura de la vegetación para el mapa de combustible, que en mi opinión es lo que se necesita para poder modelar adecuadamente un incendil recalca Roberto Chávez. El experto también opina que debería establecerse algún tipo de alianza entre la academia y la Fuerza Aérea para que el país pueda contar con esta herramienta y prever el comportamiento de los incendios. HAY APRENDIZAJE Por otra parte, los académicos dela UV y dela PUCV coinciden en un aspecto: aunque a golpes y con dolor, hay un aprendizaje después de la tragedia del 2 y 3 de febrero. La rapidez del combate contra los incendios y una mayor conciencia de la población-que no tarda en reportar incipientes focosconstituyen para ellos señales alentadoras.
Como también el efecto disuasivo que han conseguido instalar el fiscal especializado en incendios, Osvaldo Ossandón, y el comisario de la Brigada Investigadora de Delitos contra el Medio Ambiente de la PD! Valparaíso, Iván Navarro, que tras minuciosas diligencias han logrado detener y formalizar a siete imputados como responsables del megaincendio.
ZONAS DE RIESGO En otra arista de este tema, la directora del Departamento de Meteorología de la UV plantea que “nosotros como región estamos muy expuestos”. “Cuatro universidades regionales hicimos un proyecto acerca de las zonas con mayores riesgos en el Área Metropolitana de Valparaíso, y su prospección a futuro. Se incluyeron marejadas, incendios forestales, deslizamientos de tierra, todo lo que hemos estado viendo en las costas, con las dunas, eso se sabía.
Pero se siguen autorizando construcciones donde no se debe, la población crece y muchas personas se instalan en lugares muy vulnerables, y es la población quese ve más afectada”. “Tenemos que trabajar en la educación, como siempre, y en la prevención. Pero esto se va a seguir viendo. Lo que se pensaba que podía pasar el año 2100 está pasando ahora, antes de 2030. Entonces es preocupante y tenemos que adaptarnos. No0 El incendio forestal conocido como Sábado Negro, que comenzó el 7 de febrero de 2009 en el estado de Victoria, Australia, es el más letal registrado en el Siglo XXI. Provocó la muerte de 173 personas, dejó centenares de heridos, alrededor de dos mil casas destruidas, 340.000 hectáreas de bosque quemadas y provocó el desplazamiento de 7.500 personas. La tragedia fue gatillada por la combinación de fuertes vientos, una ola de calor con temperaturas extremas y una sequía sin precedentes, que hicieron que el fuego se propagara a una velocidad récord. La situación se mantuvo por 36 días. Una comisión se abocó a la investigación de las causas del desastre y concluyó su labor en 2010, presentando un informe que incluyó 67 recomendaciones.
Después del megaincendio de febrero de 2024 en la Región de Valparaíso, le sigue en letalidad el de Lahaina, paraíso turístico ubicado en las islas Maui, Hawái, donde se registraron 97 víctimas fatales y 31 desaparecidos, y se reportó la destrucción de más de 2.200 inmuebles, asícomo daños generalizados en la ciudad.
El incendio se prolongó entre el 8 y el 11 de agosto de 2023 y se originó a partir de una emergencia forestal previa que los bomberos creían haber apagado, y que fue causada por lacaídade cables eléctricos sobre vegetación reseca.
Impulsado por fuertes y erráticos vientos generados por una zona de alta presión al norte de Hawái y el huracán Dora al sur, el fuego arrasó Lahaina y alcanzó a personas atrapadas en sus autos, obligando a muchas a huir hacia el mar. Con pérdida de vidas de similar magnitud figuran luego tres desastres: la ola de incendios que devastó el condado de Los Ángeles, en California, EE. UU; los de la temporada 2019-2020 en Australia, y los del verano de 2023 en seis regiones del centro sur de Chile.
El 7 de enero comenzaron los incendios en Los Ángeles y recién el 31 del mes pasado fueron reportados como “100 por ciento contenidos”. El dePalisades, el más violento, arrasó casi 9.500 hectáreas, mientras queel de Eaton, que afectó a la ciudad de Pasadena, redujo a cenizas casi 5.700 hectáreas. Los siniestros dejaron al menos 29 muertos -de acuerdo a medios locales otras 14 personas siguen desaparecidas-, más de 16 mil estructuras destruidas y obligaron a evacuar a más de 150 mil residentes. La empresa meteorológica AccuWeather estimó los daños y las pérdidas entre 250.000 y 275.000 millones de dólares.
Entre junio de 2019 y mayo de 2020 seregistró en Australia una serie de siniestros potenciados por temperaturas récord y una sequía prolongada, que causaron la muerte de 26 personas -otras seis desaparecidas-, destruyeron más de 2.500 inmuebles, incluidas 1.300 viviendas y consumieron cerca de 30 millones de hectáreas.
Finalmente, en el verano de 2023 la zona centro sur de Chile se vio afectada también por una serie de incendios que golpearon a las regiones de Ñuble, Biobío, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y Maule.
Araíz de la violenta propagación del fuego murieron 26 personas y cerca de 8.000 resultaron afectadas por la pérdida de viviendas o medios de vida, con especial impacto a más de 11.600 productores agrícolas, ya que los incendios destruyeron 5.900 hectáreas de cultivos y se perdieron casi 34 mil animales.
Lasuperficie arrasada por el fuego superó las 400 mil hectáreas. equejarnos, sino adaptarnos y buscar soluciones”, sostiene. desdeel 1 de octubre, se habían registrado 17 olas de calor en el país, mientras que en la temporada anterior a la misma fecha eran solodos.
Y la velocidad delGUERRA ANUAL “Después de la tragedia de Viña del Mar, hemos hecho muchas viento era compleja, lo que haadecuaciones, lecciones apren bía provocado mayor cantidad de incendios que en el periodo didas, hemos revisado. Nos hemos concentrado en conocer dealto riesgo 2023-2024, pero con menor superficie afectada. másel fuego, lo quenos permite “Los incendios cada vez son determinar dónde atacar y dónde hay áreas a sacrificar en térmás complejos. La preparación minos de vegetación. Creo que a nivel mundial va a cambiar.
Podemos decir que todos los ahí hemos dado un paso mayor, con programas desarrollados años vaa venir una guerra, que vamos atener y debemos estar porespecialistasenincendios de preparados para eso”. Es una la Corporación, con lo que podemos dar una mejor respuesta”, guerra “que tenemos que endeclaró a fines de enero aeste frentar con recursos terrestres, aéreos y con mucha tecnología, diario la directora nacional de con conocimiento del fuego, es Conaf, Aida Baldini. = Para esa fecha, contadas laúnicaforma”, resumió.
En Chile está el modelo matemático para simular dirección y avance de incendios, pero no están todas las variables que necesita para funcionar”. Roberto Chávez Director Laboratorio Geo-información PUCVLo que se pensaba que podía pasar el año 2100 está pasando ahora. Entonces, es preocupanteTenemos que adaptarnos y buscar soluciones” Ana María Córdova Directora Departamento de Meteorología de la UVO'Higggins, Maule y Biobío.
Ellaboratorio que dirigetrabajóenla estimación de temperatura y poder calorífico del 2F utilizando imágenes satelitales y pudo determinar de ese modo queen algunos puntos de las z0nas más golpeadas por la tragedia el incendio superó los 800? Cy los 1.500 MW. Otros expertos, como Inazio Martínez de Arano, director de la Oficina Regional del Mediterráneo del Instituto Forestal Europeo, se refieren a incendios de sexta generación.
Aluden con ello a siniestros “de tal intensidad que alteran la dinámi ca de las capas altas de la atmósfera y generan vientos que pueden ser muy difíciles de modelar, por lo que no noses posible predecir el comportamiento del fuego”. MODELACIÓN INCOMPLETA El investigador y académico de la PUCV dice que en el país sehan desarrollado modelos para simular en pocos minutos la dirección y características del avance de un incendio, con el objeto de que se pueda organizar mejor el ataque, y en ese contexto destaca la labor del Premio Nacional de Ciencias Aplicadas 2000, doctor Andrés Weintraub, del Instituto de Sistemas Complejos de Ingeniería de la Universidad de Chile. “El modelo matemático existe.
El problema es que no existen todas las variables que necesita para funcionar, y uno delos principales es la inexistencia del mapa de combustible”, expone, el cual requiere tres insumos: el tipo de vegetación, su humedad y la altura de la misma. Para los dos primeros se puede recurrira los satélites, no así para el tercero. La altura de la vegetación se determina con la tecnología de teledetección Lidar, Light Detection and Ran-LOS SINIESTROS MÁS LETALES DEL SIGLO XXI OCURRIERON EN AUSTRALIA, CHILE Y HAWAI. Aunque el factor humano es el primer eslabón de la cadena del fuego, la alteración de los patrones meteorológicos incide en su velocidad de propagación y poder destructivo.