La conciencia del momento
La conciencia del momento a puede consolidarse como una región que crece, se transforma y avanzacon visión, responsabilidad y equidad.
Para que esto deje ser un sueño, más bien sea una realidad, debemos generar las condiciones hoy”. ondida. ¡empre es necesario ha-S cena presa yetnar sobre lo que hemos vivido, mirar hacia atrás y valorar los desafios superados, los aprendizajes adquiridos y las oportunidades que nos depara el futuro. Y cuando hablamos del “futuro” indudablemente debemos pensar en el rol de la región de Antofagasta como eje fundamental para el crecimiento y desarrollo del país como lo hasido históricamente. Hoy, sabemosqueestonoes suficiente, existen disconformidades que han dado paso a una reflexión más profundasobrelo que queremos ser, la conciencia hamutado, y conello, las expectativas delaciudadanía. Ahorasetrata de construir una sociedad moderna, en la que todos sus miembros puedan desarrollarse de manera plena en base de un modelo sostenible y respon-sable. Este proceso de transformación exige elementos nuevos. En primer lugar, es fundamental levantar la mirada, reconocernos como una comuni dad diversa, con diferencias, pero. con un propósito común avanzar hacia un mejor futuro. Al mismo tiempo, reconocer las características que nos constituyen como sociedad: nuestra historia, patrimonio, tradiciones, el respetoa los dela dignidad de todas rechos y las personas.
Latransformación de Antofagasta, y del país en general, requiere una base ética que nos permita actuar con justicia, equidad y respeto por el bienestar de todos los ciudadanos, solo así podremos construir unasociedad sólida, consciente de sí misma y de susresponsabilidades. Antofagasta se encuentra en un momento histórico de cambio y no podemos bajar la mirada. Laregión hasido dotada de recursos naturales que le otorgan una posición estratégica no sólo en Chile, sino en el mundo. Estariqueza es, sin duda, una ventaja, pero también unaresponsabilidad, la oportu-nidad de convertirnos en unasociedad moderna y sostenible estáal alcance de nuestras manos. Algunos de los elementos quedeben guiar esta construcla educación comoción son:pilar esencial en esteproceso y un vehículo para el desarrolloconciencia crítica, la crea-delatividad y el compromiso social.
La región debe avanzar hacia una educación que fomente la igualdad de oportunidades y que prepare alas nuevas generaciones para los desafíos decaraal futuro, poniendo en el centro la innovación, impulsar lainvestigación, el desarrollo y laadopción de nuevas tecnologíasen todos los sectores.
La participación ciudadana también es fundamental, una sociedad moderna no puede construirse sin la colaboración activa desus miembros, Sinembargo, este camino noserásencillo, requiere de acuerdos transversales y compromisos sólidos de todas las instituciones, públicas y privadas. En estesentido, Fundación Minera Escondida ha sido unactor laveen el desarrollo dela región, a través de iniciativas que impulsan habilidades en las personas para abordar los desafíos del presente y futuro.
Fundación, consciente de una nueva realidad, ha transitado para desarrollar programas con sentido, acorde alasnecesidadesac-tualesenun trabajo colaborativo y coordinado con las comunidades, contribuyendo a la formación de una ciudadanía más preparada, empoderada y partícipeactiva delos cambios que estamos viviendo, alineándose conlos principiosde unasociedad queaspira a la modernidad yal bienestar colectivo.
Por otro lado, el Centro de Entrenamiento Industrial y Minero (CEIM) que cumplió 25 años de trayectoria impulsando el desarrollo de capital humano en la región, continuará siendo un actor relevante en esta tarea, a través delaformación de una fuerza laboral capacitada y especializada para, de esta manera, avanzar hacia una región más competitiva, preparada para los cambios tecnológicos y la innovación que están marcando la industria del futuro, promoviendouna visión más moderna y sostenible de la industria minera. Ambas instituciones, con su trabajo conjunto, están contribuyendo a un futuro donde el desarrollo económico de la región de Antofagasta va de la mano con el desarrollo humanoy social. Antofagasta puede consolidarse como una región que crece, se transforma y avanza con visión, responsabilidad y equidad. Para que esto dejeser un sueño, másbien seaunarealidad, debemos generar las condiciones hoy, una región resiliente capaz de adaptarse rápidamente a los cambios, con una comunidad comprometida y participativa, que prioriza el bienestar común. Unasociedad futurista orientadaal progreso y la innovación, abierta al cambio y, sobre toos do, sostenible. José Antonio Díaz Fundación Minera Escondida. LA REGIÓN QUE SOÑAMOS. José Antonio Díaz, director ejecutivo Fundación Minera Es. ondida. “ALGUNOS DELOS ELEMENTOS QUE DEBEN GUIAR ESTA CONSTRUCCIÓN SON: LA EDUCACIÓN COMO PILAR ESENCIAL EN ESTE PROCESO Y UN VEHÍCULO PARA EL DESARROLLO DE LA CONCIENCIA CRÍTICA".