CARTAS: Medicina nuclear
Medicina nuclear nuclear y el PET-CT con 18F-FDG se sostienen en la exactitud cuantitativa. Si el valor SUV nose calibra con estándares internacionales, la estadificación tumoral sealtera, induerróneas y arriesga al paciente. Protocolos como la acreditación EARL de la Asociación Europea de Medicina Nuclear homogeneizan la obtención y reconstrucción deimágenes entre equipos, centros y países. Pero en Latinoamérica pocos servicios han pasado la auditoría externa. Noes una brecha tecnológica, sino de decisión: invertir en control de calidad, calibraciones periódicas y formación continua es un deber ético y sanitario, no un lujo. Instamos a autoridades, sociedades médicas y aseguradoras a promover y exigir la acreditación internacional de todos los centros que usan PETCT. Incentivos arancelarios o exigir esa certificación como requisito de habilitación elevarían el estándar nacional, reducirian la variabilidad diagnóstica e integrarían a Chile en estudios multicéntricos de vanguardia. La lucha contra el cáncer necesitadatos irrefutables, no aproximaciones “suficientes”. Los pacientes merecen SUV comparables en cualquier servicio, de Arica a Punta Arenas. Acreditares, en última instancia, un acto de justicia y salud pública. Horacio Amaral