Autor: Ricardo Salman Aburdene past president CChC Ñuble
COLUMNAS DE OPINIÓN: El Desafío
COLUMNAS DE OPINIÓN: El Desafío Oo Columna Trabajo Decente: El Desafío Ricardo Salman Aburdene past president CChC Ñuble de la Productividad y la Inclusión ración que una realidad; el desempleo y la informalidad mantienen a miles de personas sin acceso a los derechos y beneficios básicos de un empleo formal. Esta semana, fuiinvitado a un conversatorio sindical, y reflexionamos sobre el concepto de "trabajo decente" y los factoresclave para lograrlo. Eltrabajo decente va más allá de un ingreso adecuado: exige empleos formales que garanticen seguridad social, estabilidad y todas las prestaciones. Elempleo formal ye crecimiento económico dependen delainversión pública y privada. Por ello, nuestras nuevas autoridades deberían enfocar esfuerzos en facilitar proyectos, atraer inversión y fortalecer el crecimiento regional. Hoy:en día, el trabajo decente exige varios componentes, y uno de los más importantes esla productividad laboral, factor que impacta directamente en los salarios.
Chile ha experimentado una baja en productividad en los últimos años, en parte debido a la reducción de la inversión, obstaculizada tanto por regulaciones complejascomo por problemas de fi nanciamiento, Esta tendencia afecta la capacidad de ofrecer sueldos sostenibles y adecuados. Para revertirla, necesitamos un esfuerzo colectivo de capacitación y una mejora en las condiciones económicas. Sibien elineremento del salario mínimo pretende beneñciara algunos trabajadores, también puede excluira otros cuya productividad no alcanza para cubrirlo, empujándolos ala informalidad y afectando la oferta de empleos formales. A esFE: nuestra región, el trabajo decente es más una aspito sesumala reducción delajornadalaboral que, aunque mejoralas condiciones de trabajo, no necesariamente contribuye a aumentarla productividad, un componente esencial paralasostenibilidad empresarial yla generación de empleo. Para aumentar la productividad, necesitamos programas decapacitación continua, optimización de procesos y herramientas de gestión. La innovación y la tecnología también sonaliadasclave, además de promover ambientes laborales seguros y saludables. La inclusión de mujeres en el sector construcción ha mostrado beneficios, comolareducción del ausentismo y las licencias médicas, además de mejorarel cli malaboral. Esta diversidad promueve la colaboración yla innovación, contribuyendo no solo una economía más sólida, sino que a una sociedad mas justa. Lograr un trabajo decente depende de empleos formalescon contratos claros que aseguren salud, jubilación y estabilidad laboral.
Esto implica un entorno enel quetanto empleadores como trabajadores se comprometan de manera activa: las empresas deben ofrecer condiciones laborales justas, mientras que los trabajadores, por su parte, deben contribuir con el desarrollo de sus habilidades, compromiso y actitud proactiva. Un compromiso genuino de autoridades, empresas y trabajadores puede convertir el trabajo decente en unarealidad palpable. En nuestras manos está el desafio de transformar la región y el país, construyendo una economía fuerte y jusla región y el país, construyendo una economía fuerte y justa para todos..