Educar es tarea de todos
Educar es tarea de todos OPINIÓNLa educación es un proceso complejo que trasciende el aula, requiriendo la colaboración de docentes y profesionales no docentes para el desarrollo integral de los estudiantes. Este trabajo conjunto resulta fundamental para crear un entorno de aprendizaje inclusivo, efectivo y cohesionado, en el que cada alumno recibe apoyo en diversas áreas. Los profesores son la base del proceso de enseñanza-aprendizaje, sin embargo, su labor se potencia cuando cuentan con el apoyo de orientadores, psicólogos, personal administrativo y de convivencia escolar. Estos profesionales facilitan un ambiente de bienestar y seguridad, elementos clave para el desarrollo educativo.
De hecho, estudios como el de DocenteMás destacan que “el trabajo colaborativo permite a los docentes reflexionar y detectar necesidades junto a otros miembros de la comunidad escolar, optimizando los resultados académicos y contribuyendo a una educación más inclusiva”. Una ventaja crucial de esta colaboración es el abordaje integral de las necesidades de los alumnos. Mientras los profesores se concentran en los contenidos académicos, el personal no docente se ocupa del bienestar emocional, la convivencia y el apoyo a las familias, fomentando la formación de ciudadanos empáticos y resilientes. Este trabajo en equipo también facilita el gestionar situaciones complejas, como problemas de conducta o conflictos interpersonales, logrando soluciones más efectivas que permiten a los docentes centrarse en su rol principal: educar. Este trabajo articulado es, sin duda, esencial para que las escuelas funcionen de manera integradora y para que cada estudiante se desarrolle en su máxima capacidad. Educar es una tarea colectiva y que asegura una educación de calidad que está preparada para enfrentar los desafíos del futuro.. Francisco Pérez Académico Escuela de Pedagogía en Educación Diferencial Universidad de Las Américas OPINIÓN