Autor: ROSA MARTÍNEZ

La iniciativa que disminuye la pobreza energética de comunidades sin acceso a servicios básicos
La iniciativa que disminuye la pobreza energética de comunidades sin acceso a servicios básicos “LUZ EN CASA”:en base a paneles fotovoltaicos. Cifras positivas a nivel mundialdades, que reducen su gasto en energía porque dejan de comprar combustibles para los generadores. También es un aporte a la salud de las familias, que acceden a energía limpia y durante más horas. Esto, al mismo tiempo, mejora su calidad de vida”, apunta Soto.
Este año, acciona. org completó el relacionamiento comunitario con las 15 comunas que conforman la Región de Coquimbo, con lo cual está finalizando la instalación de equipos del programa en esta zona; no obstante, desde la fundación esperan poder comenzar a realizar intervenciones en lo que respecta al acceso a agua.
En paralelo, durante este segundo semestre, acciona. org inició acercamientos con comunidades y autoridades en la Región de Atacama, para dar continuidad allí a “Luz en Casa”. NO MÁS RUIDOA lgo tan básico como cargar un celular, mirar el noticiero en un televisor o incluso contar con una ampolleta para iluminar su hogar por las noches son servicios que, en pleno 2024, son un lujo para muchas familias chilenas.
Solo en la Región de Coquimbo, miles de hogares carecen de conexión a la red eléctrica y están limitados al uso de linternas a pilas y de motores a diésel o a parafina para iluminar sus casas. Para cargar sus teléfonos y tener acceso a la conectividad, algunas familias también emplean paneles pequeños sin la potencia suficiente para mantener encendido un refrigerador u otro electrodoméstico. Es el caso de Erica Rocco, habitante de la localidad de La Plaza, comunidad ubicada al interior de Ovalle. Hasta el año pasado, para acceder a electricidad, ella debía mantener un generador encendido la mayor parte del día. Su gasto semanal en bencina rondaba los $40.000. Eso, sin contar el constante ruido que ese equipo emitía mientras estaba encendido. La situación de Rocco cambió hace seis meses, cuando se unió al programa “Luz en Casa”, el cual facilita el acceso a energía eléctrica en hogares de zonas remotas, mediante un servicio de suministro renovable. “Ahora cuento con electricidad todo el día. Se terminó el ruido y puedo tener electrodomésticos conectados sin ningún problema”, comenta. Desde acciona. org aseguran que los municipios han sido claves para lograr la confianza con las comunidades. La fundación acciona. org inició su trabajo en Chile en la Región de Coquimbo.
Caleta Maitencillo fue la primera comunidad en la que desarrolló el programa “Luz en Casa”. En 2021, en plena pandemia, la entidad partió con un piloto que consistió en la instalación de cerca de 30 sistemas fotovoltaicos domiciliarios en hogares de ese asentamiento de pescadores, ubicado en la comuna de Canela.
“Decidimos partir ahí porque esas familias de ninguna forma convencionalLa iniciativa es sostenible: mes a mes, los hogares pagan una cuota que se calcula con respecto de sus gastos e ingresos para hacerla compatible con el presupuesto de las familias. Todo el dinero recaudado se destina a cubrir la mantención y reparación de los paneles solares por parte de acciona. org, la fundación corporativa de Acciona.
Rodrigo Soto, gerente de la Fundación acciona. org en Chile, asegura que se trata de un pago ínfimamente menor a lo que estas familias antes gastaban en combustible para el funcionamiento de sus generadores, los cuales operaban durante unas pocas horas al día. “Representa un ahorro para las comuni-habrían tenido acceso a la electricidad”, señala Soto. Juan Carlos Correa, dirigente de Caleta Sierra, comunidad que fue conectada en diciembre de 2023, en una de las últimas fases del programa en Coquimbo, es otro usuario de la iniciativa. “Un día fui a visitar a mi hija a Caleta Maitencillo y me llamó la atención que, al encender la luz, no se escuchaba el ruido del generador. Le pregunté qué pasaba y me contó que se había sumado a un programa de energía limpia. Me interesé en traer el programa a mi comunidad: Caleta Sierra.
Nos reunimos con representantes de acciona. org y ninguno de los vecinos podía creer que íbamos a tener electricidad. ¡Imagínate lo que era poderguardar el pescado y los mariscos! Hoy pagamos apenas $26.000 mensuales por el servicio, en comparación a los $200.000 mensuales que pagábamos antes por combustible para tener energía por unas horas del día. Esto nos cambió la vida”, explica Correa.
VINCULACIÓN PÚBLICO-PRIVADAEn la Región de Coquimbo, acciona. org ha instalado cerca de 700 sistemas fotovoltaicos, tanto en asentamientos de caletas de pescadores, como las caletas Maitencillo y Sierra; así como en zonas cordilleranas de la región en las comunas de Illapel o Monte Patria, donde la población está dispersa en núcleos de dos o tres familias en su mayoría crianceros de cabras separadas por grandes distancias. Olivia Saavedra es criancera de cabras y vecina de Cárcamo, una zona del secano costero en la comuna de Monte Patria. Para ella y su comunidad, sumarse al programa les “facilitó la vida”. “Cuando no teníamos energía los alimentos se echaban a perder. Ahora todo es distinto: tenemos electricidad, e incluso en Navidad pudimos, por primera vez, ponerle lucecitas al árbol. ¡Se miraba genial! ”, indica. Saavedra hace hincapié en que “para las personas en la ciudad es simple llegar y encender la luz en la noche. Hoy nosotros podemos hacer lo mismo, pero sabiendo el valor de aquello. Además, podemos cargar el teléfono, ver televisión y mantener los alimentos más tiempo”. “Como somos una comunidad de crianceros, hoy también podemos mantener fresca nuestra leche y quesos de cabra. La fundación nos ha dado acceso a un derecho que siempre debimos haber podido hacer efectivo: el derecho a la energía”, sostiene. Desde acciona. org aseguran que los municipios han sido claves para lograr la confianza con las comunidades. En la Región de Coquimbo, por ejemplo, la mayoría de alcaldes comprometieron su cercanía y la de sus equipos de relacionamiento para que el proceso fuera fluido. “Ellos son quienes mejor conocen la realidad de los territorios. En cooperación internacional esto se denomina actuar en la última milla, es decir, llegar donde los servicios del Estado no son capaces de hacerlo”, puntualiza Soto.
En el mundo, al cierre del 2023, acciona. org ha beneficiado a más de 118.600 personas (unos 25.500 hogares) con acceso a un servicio básico de electricidad asequible, sostenible y fiable principalmente, además de acceso a agua potable, saneamiento apropiado y cocinado seguro.
La población beneficiaria, en condición de vulnerabilidad y pobreza, ahorró más de $962.500.655 en energéticos alternativos y pudo utilizar, al menos, 10,85 millones de horas adicionales en realizar actividades diarias por disponer de luz eléctrica y no tener que desplazarse para conseguir energéticos y agua. La fundación ha facilitado unos 37,15 millones de horas de iluminación disponible en los hogares, minimizando enfermedades ocasionadas por humos y baja intensidad lumínica de velas, queroseno y leña, entre otros. Además, los sistemas fiables de agua y saneamiento provistos evitaron enfermedades diarreicas al mejorar la salubridad y la higiene en hogares y centros comunitarios. Unos 44.400 usuarios en edad escolar emplearon 1,32 millones de horas adicionales para hacer sus tareas, propiciando su permanencia en primaria e incrementando los matriculados en secundaria. Esto favorece alcanzar un mayor nivel educativo que, a largo plazo, aliviará su situación de pobreza.
Unas 1.317 mujeres participaron en la toma de decisiones en su comunidad y son parte de las 38.548 usuarias que ven facilitado su trabajo en casa (remunerado o no), junto con más de 22.400 niñas que hicieron sus tareas con iluminación adecuada. Además, 19 mujeres, a cargo de negocios en localidades de referencia en las áreas de operación, ofrecieron suministros y servicios a las comunidades de su entorno.
Los 45 negocios a cargo de pequeños emprendedores locales para ofrecer suministros y servicios relacionados con los sistemas provistos, así como la electricidad proporcionada a usuarios con pequeños negocios en sus viviendas, contribuyeron al empleo y crecimiento económico de las comunidades atendidas. Acciona. org también incrementó el número de población rural, indígena y refugiada a la que ha llevado acceso a servicios básicos, habiendo llegado a más de 1.317 comunidades.
El conjunto de sistemas fotovoltaicos domiciliarios en operación evitó la emisión de hasta 8.764 t de dioóxido de carbono y el uso y vertido incontrolado de 40,4 t de pilas por la utilización de lámparas y aparatos eléctricos eficientes conectados a esos sistemas. Los sistemas fiables de agua y saneamiento construidos mejoran las fuentes de abastecimiento y permiten la reutilización y el ahorro de agua. En contextos de sequía recurrente, estas herramientas aumentan la resiliencia y adaptación al cambio climático. Fuente: ACCIONAInfografía Estudio Pixel. El programa “Luz en Casa”, de la fundación acciona. org, ofrece a comunidades aisladas un modelo sostenible que contempla la instalación de sistemas de energía