Más de 30 fallecidos se registran en la región por accidentes de tránsito
Más de 30 fallecidos se registran en la región por accidentes de tránsito DESDE INICIOS DEL PRESENTE AÑO Coquimbo ocupa el tercer lugar a nivel nacional en muertes por siniestros viales, con 31 víctimas mortales registradas hasta la fecha, siendo superada solo por la Región Metropolitana (46 fallecidos) y la de Valparaíso (35). Expertos en seguridad vial coinciden en que mejorar la formación de conductores y reforzar las fiscalizaciones serían claves para reducir las preocupantes estadísticas. Este año se ha registrado un aumento considerable de accidentes fatales en comparación con las estadísticas de años anteriores.
De hecho, la zona se ubica en tercer lugar a nivel nacional, con 31 víctimas mortales en siniestros viales, solo superada por la Región Metropolitana (46) y la Región de Valparaíso (35). Dicho incremento de muertes se debería principalmente a la falta de cultura y educación en materia de conducción y prevención.
Un ejemplo de ello son las imágenes que se viralizaron la semana pasada en La Serena, cuando un conductor de un Chevrolet Spark circulaba por la mañana en la intersección de calle Jorge Miranda con Islón, intentando evadir el taco avanzando en sentido contrario. Un caso similar involucró a un Hyundai Grand i10 en calle Seminario con Gabriel González Videla, donde se repitió la misma conducta imprudente.
Al respecto, desde el municipio de La Serena indicaron que se han cursado las infracciones empadronadas y que no permitirán este tipo de situaciones indebidas las que ponen en riesgo a las personas y también a los vehículos que transitan. Y que decir, por cierto, del grave accidente ocurrido en el sector de Morrillos que dejó como saldo 6 muertos y varios heridos.
Si bien se espera el informe de la SIAT para determinar las causas del siniestro, quizás la tragedia podría haberse evitado si se hubiesen aplicado los protocolos necesarios para alertar al resto de los automovilistas que se había generado un accidente.
VISIÓN DE EXPERTOS Para Wilfredo Yushimito, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Adolfo Ibáñez, y doctor en ingeniería de transporte, esta situación de aumento de accidentes de tránsito en el país tiene que ver más con falta de respeto a las normas y la seguridad de los demás. "Esto en muchos casos puede ser visto como un problema de formación, pero también es un problema relacionado con estrés e impaciencia y con falta de sanción.
En muchos casos, el manejo imprudente se gatilla por situaciones estresantes o simplemente por percepciones individuales erradas, como pensar que saltarse las normas o límites de velocidad los harán llegar más rápido, y que llevan a comportamientos agresivos e imprudentes de manejo. Más aun si no hay fiscalización o controles efectivos, ya que muchos conductores siguen cometiendo infracciones porque ven que otros que las cometen no sufren consecuencias. Por ejemplo, es muy sintomático notar cómo el número de vehículos que pasan en luz roja ha aumentado significativamente en los últimos años", señaló el académico de la UAI. Yushimito explica que esto se puede suplir de alguna forma mejorando la formación. Por ejemplo, en otros países se exige aprobar un curso de educación vial antes de dar el examen para obtener la licencia de conducir. En este tipo de cursos, se habla de las consecuencias del manejo imprudente y de las sanciones a las que uno se expone. Sin embargo, asegura, lo más efectivo sigue siendo la sanción, fiscalización y control.
Por su parte, Rodrigo Fernández, académico de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de los Andes, coincide con que la fiscalización es la única manera que ha dado resultado en todos los países desarrollados. "Es la fiscalización periódica en la ciudad, en carreteras y autopistas. Si se fiscalizaran todas las leyes del tránsito existentes, sería suficiente para crear una cultura vial. La educación es una alternativa muy necesaria, pero tiene resultados a largo plazo, cuando los educandos tienen edad para conducir", aseveró el académico de la Universidad de Los Andes.
LLAMADO DE AUTORIDADES Ante estas complejas cifras de decesos por accidentes viales, el delegado presidencial, Galo Luna, reconoce que existe preocupación en el gobierno por las víctimas fatales y junto con enviar condolencias a las familias asegura que es importante intensificar la fiscalización y los planes de prevención, lo que permitiría evitar este tipo de accidentes. "Queremos también hacer un llamado a la responsabilidad de los conductores, pues en muchos casos hemos visto que estos accidentes se producen por fallas humanas relacionadas con el exceso de velocidad y el consumo de alcohol o drogas. Los conductores deben entender que sus vehículos pueden ser verdaderas armas letales si son usadas con irresponsabilidad", manifestó Luna.
Por su parte, el diputado Juan Manuel Fuenzalida indica que si bien, las leyes son bastante duras en materia de accidentes, respecto de conductas irresponsables y lo que dice relación con el consumo de alcohol o droga, no es así. "Creo que aquí hay dos temas. Uno, lo que es la responsabilidad de los conductores, que muchas veces se olvidan de que son humanos al momento de conducir un vehículo y realizan maniobras que realmente son demasiado temerarias. Pero también creo que falta mucha más fiscalización, creo que se ha perdido un poquito la costumbre a fiscalizar. Hoy día vemos que los controles de tránsito son menores a los que existían antes", dice el parlamentario. En ese contexto, Fuenzalida reitera que ya las leyes son bastante drásticas. "Está la Ley Emilia. Hay otras leyes que se han aprobado que establecen sanciones muy altas para quienes son los que generan los accidentes con causales de muerte", asevera el diputado.
Mientras, su par, Víctor Pino, manifiesta que esta cifra de 31 fallecidos en accidentes no solo es alarmante, sino que también debe hacernos reflexionar sobre la efectividad de las medidas actuales. "No podemos seguir normalizando estas tragedias ni permitir que el número siga aumentando sin tomar acciones concretas", indicó el diputado. Pino explica que desde el Congreso, ya están trabajando en iniciativas para mejorar la seguridad vial.
Un ejemplo de ello es la propuesta para hacer obligatorio el uso de luces de emergencia en buses, una medida que surge a raíz del fatal accidente en Morrillos, indicando que este tipo de regulaciones pueden marcar la diferencia en la prevención de nuevos siniestros. "Además, es evidente que necesitamos evaluar un endurecimiento de las leyes de tránsito. Esto no solo implica sanciones más estrictas para quienes incumplen las normativas, sino también un mejor control y fiscalización en las carreteras, además de un reforzamiento en la educación vial. La seguridad en las calles y rutas debe ser una prioridad, porque cada víctima representa una familia que sufre una pérdida irreparable", concluyó el parlamentario. Si bien el accidente del pasado martes generó un aumento de la estadística de fallecidos, las cifras de muertos, antes de este terrible hecho, ya eran preocupantes. LAUTARO CARMONA LIONEL VARELA Á. Región de Coquimbo.