El parte de Lynch y una reflexión
El parte de Lynch y una reflexión El sábado 7 recién pasado, recordamos el nuevo aniversario del asalto y toma del Morro de Arica, efectuado por el ejército chileno. Al final del mismo y con la información oficial, el vicealmirante Patricio Lynch comunica al gobierno lo siguiente: "Arica asaltada y tomada a la bayoneta, todos los fuertes en nuestro poder. Manco a pique. Los hombres de la jornada pertenecen al 3 y 4 de línea.
Felicitaciones al Gobierno y al Ejército de Chile". Este mensaje me recuerda una entrevista por TV al vicealmirante Pablo Wunderlich, jefe de la brigada de Infantería de Marina en la crisis del Beagle, al mando de 4.000 hombres que ocupaban las tres islas. Le preguntaron "¿ qué pasa si durante el combate se acaba la munición? ¿ La orden es resistir hasta el último tiro? NO", contesto de inmediato. La orden era hasta el último hombre. Es decir a la bayoneta. Estos hechos nos hacen reflexionar. Los hombres que murieron en el Morro y los que afortunadamente no cayeron en la zona austral, eran seres humanos, padres, hijos, esposos que marcharon al frente de batalla. Podemos imaginarnos la angustia de sus seres queridos ante tamaña incertidumbre. Dicen que las guerras las provocan los gobernantes y las sufren los habitantes. Por eso que la mejor defensa para evitar una guerra es la disuasión y para eso hay que estar preparado. "Si quieres la paz, prepárate para la guerra", narra el dicho. La tecnología produce armas, pero estas amas se destruyen unas a otras. La guerra las ganan los soldados, que son seres humanos que ocupan el territorio. Es muy importante que nuestros niños conozcan los valores patrios y los respeten durante toda su vida. Al final será el mejor seguro para vivir en paz con nuestros potenciales enemigos. Con estos recuerdos la historia nos narra el temple, espíritu de sacrificio y arrojo de nuestra gente y eso hay que mantenerlo. El parte de Lynch y una reflexión OPINIÓN Marcial Robledano Perucich.