"Las cosas en mi vida me han llegado en el momento preciso"
"Las cosas en mi vida me han llegado en el momento preciso" "Varios, como por ejemplo, que en nuestra región hay mucho adulto postrado y personas discapacitadas y nosotros creamos el primer servicio de atención domiciliaria de pacientes postrados y discapacitados. Se contrató un equipo y dividimos las atenciones en forma equitativa entre los centros de salud, partiendo por Tierras Blancas que es el más grande que había.
Hicimos el proceso de capacitación para que todos los que fueran a trabajar con pacientes postrados lograran tener una atención personalizada en el domicilio o que los fueran a buscar y se atendieran en el mismo centro de salud". -Ahí comienza un cambio en la salud primaria, ¿cómo fue dar ese paso? "Nosotros nos hicimos cargo de las 100 medidas que tuvo la presidenta Bachelet (Michelle), pero en el gobierno de Ricardo Lagos donde ella era ministra de Salud y dentro de los desafíos de los primeros cien días estaba terminar con las filas que había en todos los consultorios, agendar las atenciones por hora, dar prioridades, transformar los consultorios de atención primaria en Centros de Salud Familiar (CESFAM): Empezamos a agendar las atenciones de los médicos, lo que nos llevó trabajo, porque históricamente los médicos tenían otras actividades fuera del sistema y no tenían la permanencia.
Yo decía, si yo soy médico, formado en la Universidad de Chile, llego a las ocho de la mañana, atiendo hasta las 5 de la tarde en la consulta que tengo y hago turnos en la noche.
Entonces, por qué no lograr que el resto de los médicos aceptara esta nueva visión y es así como llenamos los espacios, se crearon las extensiones horarias en nuestros consultorios para atender hasta las 8 en consultas de morbilidad, no de urgencia, además que seguían las urgencias, y ahí comenzamos a transformar los consultorios en Centros de Salud Familiar". -¿Y cómo da el paso para transformarse en seremi de Salud? "Como digo yo, a mí me llegan las cosas no las ando buscando y las Anita Bonell Bravo, directora regional del Servicio de Protección Especializada de Niños Niñas y Adolescentes, cargo que asumió por alta dirección pública, en entrevista con diario El Día recorrió su larga trayectoria profesional en el área de la salud en la zona, donde llegó a ocupar el cargo de seremi.
En ese sentido, recordó el trabajo que inició en la salud primaria en Coquimbo en la década del 90 y cómo enfrentó junto a otros profesionales los cambios que involucraron de pasar a ser de consultorios a Centros de Salud Familiar, CESFAM.
Asimismo, se refirió a cómo enfrentaron la pandemia de la influenza o virus H1N1, previa a la pandemia por el Covid. -¿Cómo inicia su trabajo en la salud de la región? "En esa época mi marido se había ido a trabajar a Illapel en minas y teníamos tres hijos por lo que me trasladé con él (es oriunda de Santiago), ejercí como pediatra y como médico único de las rondas rurales.
Posteriormente, también siguiendo a mi marido llegué acá, donde tenía armado un restaurante y una pizzería y ahí llegué a trabajar en Coquimbo". -Cómo fue esa experiencia de hacerse cargo del consultorio en la Parte Alta y después de la salud municipal? "Fue una experiencia muy bonita, mientras trabajé en el Ministerio de Salud le di mucha importancia a la atención primaria de salud, porque muchos dicen la atención primaria es como la puerta de entrada de la salud pública de nuestro país, pero para mí no es la puerta de entrada, no es un pasadizo, es la base de sustentación del sistema público de Chile. Afortunadamente el Ministerio de Salud está conformado de Arica a Magallanes de la misma forma, se trabaja en distintos sectores, pero en el fondo hay un eje articulador que desarrolla el ministerio.
Cuando me hice cargo del consultorio de la Parte Alta, tenía varias particularidades, porque la salud se expresa en particularidades, según el lugar en donde habitan las personas, según las labores que realizan y empezamos a desarrollar el trabajo con las comunidades, desarrollar el primer consejo consultivo.
Ahí estuve del 94 al 2000 como directora y después pasé a ser la directora de salud de la municipalidad de Coquimbo". -¿Qué desafíos enfrentó ahí? cosas en mi vida me han llegado en el momento preciso. Ya tenía armado el funcionamiento del Departamento de Salud de la municipalidad de Coquimbo cuando me ofrecieron incluirme en la terna como seremi de Salud y ahí visualicé que había muchos desafíos más.
Que había problemas de la salud pública, que es de la que se hace cargo la seremi de Salud y que estaba en un comienzo, porque la reforma a la salud que separa a los servicios de salud, que son las redes asistenciales con el sistema de salud pública, que es el trabajo de la autoridad sanitaria, también tenía desafíos nuevos, como las autorizaciones, las acreditaciones de los establecimientos de salud y hacerse cargo de la salud ambiental y ese fue un desafío que asumí e hice un magíster en gestión ambiental en la UCN y sentí que con eso ya tenía una solidez en el área que yo no conocía tanto, como la ambiental". -¿Cómo evalúa ese paso? "Toda mi vida yo la he visto como oportunidades y que esas oportunidades me hacen enfrentar desafíos con mucho optimismo, con entusiasmo, porque amo a mi país y quiero que seamos un Estado que se caracterice por tener ejemplos". -Cómo enfrentó la primera pandemia? "Yo estaba de seremi de Salud cuando llegó la pandemia H1 N1 y la tuvimos que enfrentar con los diferentes sectores de la seremía, en este caso con acción sanitaria que trabajaba en la parte de los ingresos a la ciudad, el control de buses, de aviones y barcos que llegaban a la región, capacitar a los médicos en las urgencias de cómo enfrentar y cuándo pensar que podía ser un caso de influenza humana.
En nuestra región estuvimos bastante protegidos, hubo tres personas fallecidas, que fue bastante bajo a nivel nacional". -¿Cree que Chile estuvo a la altura de la pandemia por Covid? "Yo ya no estaba como seremi de Salud, pero fue una tremenda pandemia a nivel mundial y aquí no había forma de implementar medidas que significaran que no iban a llegar casos a Chile, por lo tanto, fue un trabajo muy difícil y también creo que hubo una buena coordinación.
En ese sentido, no miro las acciones que hacen los gobiernos desde una perspectiva política sino que desde una perspectiva técnica y hubo un trabajo extremadamente arduo e involucrar al intersector en esto, hospitales sumadas las clínicas privadas que aportaron para este problema". "Las cosas en mi vida me han llegado en el momento preciso" ANITA BONELL BRAVO, DOCTORA La nueva directora regional del Servicio de Protección Especializada de niños, Niñas y Adolescentes, hizo un recorrido por su carrera profesional desde que llegó a la región a comienzo de los 90, señalando que nunca anduvo buscando cosas, que éstas han llegado solas a su vida. Recordó cómo fue esa transición de pasar de consultorios a CESFAM en Coquimbo y la pandemia. ÓSCAR ROSALES ÓSCAR ROSALES CID La Serena.