EDITORIAL: Prevención de accidentes cerebrovasculares
EDITORIAL: Prevención de accidentes cerebrovasculares Editorial Editorial Prevención de accidentes cerebrovasculares Los accidentes cerebrovasculares (ACV)son la segunda causa de muerte en Chile. Afectan a más de 40 mil personas al año y dejan con discapacidad a una parte importante de pacientes que han sobrevivido a la enfermedad, sobre todo en mayores de 65 años.
Uno decada seis chilenos, sobre todo adultos mayores, se venafectados alguna vez por un ACV, que consiste en la pérdida repentina deuna función neurológica, producida porla obstrucción o rotura de un vaso sanguíneo cerebral, y que se manifiesta en la pérdida de fuerza en un lado del cuerpo, la alteración del lenguaje, que se hace incomprensible o bien la persona no entiende lo que le dicen; una disminución de la sensibilidad y dolor de cabeza muy fuerte. No obstante, los especialistas afirman que siel paciente recibe atención oportuna en un servicio de urgencia, sele puederetirarel coágulo alojado en la arteria.
La campaña nacional "Saber Salva", de la iniciativa Actúa Con Velocidad, llegó a Concepción con unencuentro que convocó a representantes del sector salud, autoridades re ionales y a la comunidad para reforzar la importancia de identificar rápidamente lossignos de un ataque cerebrovascular (ACV) y actuar a tiempo. El evento se realizó en el Salón del Gobierno Regional del Biobío, convocado por los Servicios de Salud de Concepción, de Arauco y de Talcahuano. Solo en los hospitales dela Red Asistencial del Servicio de Concepción se realizaron 918 atenciones en urgencia poresta enfermedad, entre enero y mayo de 2025. Sibien cualquiera persona puedesufrirun accidente cerebrovascular, hay factores de riesgoo comportamientos quelo propician, como. la hipertensión arterial, laedad avanzada, el tabaquismo, el colesterol elevado, la diabetes mellitus y el sedentarismo, entre otras.
De ahíque los médicos recomiendan prevenirlos accidentes cerebrovasculares mediante un control adecuado delos riesgos, llevando una vida más saludable, conactividad física, una alimentación quesea equilibrada, Si bien cualquiera persona puede sufrir un ACY, hay factores que lo propician, como la hipertensión, la edad avanzada, diabetes mellitus, el tabaquismo, colesterol elevado, la obesidad y el sedentarismo. bajaensal y azúcar, y evitandoel alcohol y el cigarrillo.
La hipertensión, queesel principalfactor deriesgo para sufriry mo: rircomo consecuencia de un evento cardiovascular de manera pre'matura, afecta a unos 250 millones de personas en América y, en la mayoría delos países, las tasas del control de la presión arterial son muy bajas. Seestima que en América Latina y el Caribe, alrededor del 80% de las personas con hipertensión no tienen un control adecuadodesupresión arterial. La hipertensión ocasiona alrededordelamitad de todas las muertes por accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca a nivel mundial. Asimismo, la obesidad se ha más que duplicado en las últimas tres décadas y el 12% dela población esconsiderada obesa.
Los niveles de obesidad másaltos se dan en América (26% de los adultos) y los más bajos en sureste de Asia (3%). De allfel lla mado de la OMS a preocuparse de esta verdadera epidemia mundial.
Es fundamental quelas personasse informenrespecto ala prevención de los accidentes cerebrovasculares, con el objetivo de tomar medidas de resguardo, estaratentas para un diagnóstico oportuno y acceder así a una atención que puedesalvarvidas y evitar las secuelas que dejan estos acci dentes.
EL ACV'se puede prevenir, se puede trataren urgencias, es una patología que no sólo puede afectar a adultos o adultos mayores y queen lamedida que haya una adecuada y oportuna detección, pue de tener una buena recuperación. Es vital controlarla presión arterial, el colesterol, la glicemia, dejar de fumar, abandonarel sedentarismo y adoptar una alimentación sana. El Ministerio de Salud llevaa cabo planes y programas, queincluyen desde la prevención, hasta el trabajo de recuperación de personas que han sufrido estos accidentes. Sin embargo, los altos costos, no sólo financieros, sino que emocionales y sociales que están asociados aestos casos, son en sí un llamado a extremar las medidas de prevención y cuidado..