Chilena ahorró US$8.000 en equipar su casa de Atlanta con muebles de segunda mano
Chilena ahorró US$8.000 en equipar su casa de Atlanta con muebles de segunda mano Daniela Hriscan vive junto a su marido en una casa de 232 metros cuadrados Chilena ahorró US$8.000 en equipar su casa de Atlanta con muebles de segunda mano BanyeLiz MUÑoz na idílica historia de amor vive U por estos días Daniela Hriscan (40). En marzo del año pasado conoció a su actual esposo -un norteamericano que andaba de vacaciones y que justo a los dos días regresaba a su país en un bar de Vitacura, se flecharon y apostaron por una relación pese a la distancia. Hubo varios viajes de idas y vueltas entre Chile y Estados Unidos. En uno de ellos, Daniela se enamora de una propiedad situada en un barrio residencial, de los típicos que aparecen en las películas hollywoodenses, a unos 20 minutos de Atlanta. Lo conversaron bien y en noviembre la adquirieron. Al mes siguiente, decide mudarse definitivamente. La casa donde habitan tiene cuatro habitaciones, dos pisos y cuenta con una superficie de 232 metros cuadrados. Como es muy grande, se las ingenió de diferentes formas para lograr equiparla con lo necesario. Al comienzo recibió algunos muebles de los familiares y cercanos de su marido, como una cama de dos plazas y un comedor. "Los muebles acá son carísimos. Calculamos más o menos cuánto íbamos a desembolsar en equiparla y estimamos unos US$25.000 ($24.271.844). Era mucho", revela Daniela.
Dice que lo que se ve mucho es que la gente suele cambiar sus muebles cada cierto tiempo, dejando lo que no usan fuera de su casa. "No es que deJen lo que no usan en la basura. Afuera de sus casas separan lo que botan a la basura y lo que reciclan. Pero cuando no quieren sus muebles lo que hacen es ponerlo al lado de la basura, por ejemplo, el colchón, sofá o lo que sea. Lo dejan gratis para regalar, pero no para que vaya a la basura, ya que el camión no se los lleva", aclara. De hecho, un día caminando por su barrio vio un piano con un cartel "Free" (gratis) que habían dejado unos vecinos fuera de su morada. "Estaba impecable. Lo único que tenía malo eran dos teclas. Me da la impresión que lo tenían de adorno. Un piano así cuesta desde los $100.000 a $700.000, dependiendo del estado, antiguedad, etcétera". Aplicaciones Como le gustó el ejercicio de recuperar cosas en desuso, comenzó a indagar en diferentes plataformas que ofrecen muebles gratis. Una de ellas es Nextdoor, una red social para barrios, donde encontró un mueble gabinete (que sirve para guardar platos finos y loza) con muy poco uso. Detalla que esta aplicación funciona como un Facebook, donde se publican ventas de garaje y también está la categoría "Gratis". "En esta sección veo lo que es digno de mi casa. Generalmente busco cosas que no estén tan viejas ni feas. El gabinete que recogí lo estaban regalando prácticamente nuevo. Lo único malo que le veía era que vo. Lo único malo que le veía era que Ha encontrado desde gabinetes a un piano. En Chile también existen aplicaciones y grupos de Facebook que permiten recolectar gratis artículos en desuso. "Es mucho el trabajo (de restaurarlos), pero me encanta" admite Daniela Hriscan. Daniela Hriscan. Daniela Hriscan. Daniela Hriscan. Daniela Hriscan. Daniela Hriscan. A A A A A Este mueble gabinete lo encontró en la app Nextdoor. tenía un color café rojizo, que me parecía muy antiguo y pasado de moda", añade. A la vez, también encontró dos mesas laterales y un macetero. "Las mesas están hermosas y las tengo en mi oficina. Cada una de ellas podría costar $300.000, porque es fierro con vidrio. La señora la estaba regalando porque su nieto ya estaba caminando y consideraba que el vidrio podría ser muy peligroso para él y por eso prefería comprar productos de madera", precisa. También recogió una mesa pequeña y un minivelador, ambos ya los restauró Ha pillado de todo: este piano fue recogido de la calle. y pintó. "La mesa estaba un poco vieja, pero linda. La dejé en la habitación de invitados. Gracias a esa aplicación he conseguido varias cosas gratis. Lo bueno es que muestra dónde está la persona que regala, lo que otorga más seguridad. Nosotros sólo nos movemos 10 minutos a la redonda". ¿Cuánto salen los muebles allá? "Uno igual puede encontrar buenos precios. Pero la calidad no es muy buena. El tema es que uno no consigue precios bajos ni buena calidad como en Chile en los Cyber.
Un comedor en Chile me salió $400.000 y un sillón por Chile me salió $400.000 y un sillón por Chile me salió $400.000 y un sillón por $320.000 (precio normal $500.000 ). Acá un comedor nuevo me costó $1.200.000 y un sillón bonito sale desde los $800.000.
Los precios son casi el doble, pero acá se gana mucho mejor". ¿Cuánto estima que ha ahorrado? "De los US$25.000 que estimábamos en gastos, hemos ahorrado unos US$8.000 ($7.685.920 ). Como son cosas usadas, es difícil determinar un valor específico". El doctor en negocios Santiago Truffa, académico del ESE Business School de la Universidad de Los Andes, señala que generalmente esto ocurre en las ciudades universitarias de Estados Unidos. "Como es una población flotante, gente que va a hacer un máster por un par de años y que arrienda departamentos que tiene que amueblar, prefieren deshacerse de los muebles para sacarse un problema de encima". También podrían venderlas. "Sí, pero les van a dar poco y a muchos no les sale a cuenta. Los norteamericanos son personas que también suelen cambiarse constantemente de ciudades. Uno no siempre viaja con todo lo que tiene y por eso muchos sacan sus sillones, mesas y sillas a las calles. Es como bien de comunidad. Hay aplicaciones donde uno avisa y después las pasan a retirar". En Chile también existen diferentes aplicaciones que permiten regalar muebles en desuso. Una de ellas es Olio. No hay venta de por medio, sino solo la idea de no desperdiciar. Por otro lado, hay grupos de Facebook dedicados a esto, entre ellos, "Te lo regalo Chile". FOTOS CEDIDAS.