Autor: ROBERTO CAREAGA C.

Rosa Montero: “Las novelas se escriben en la oscuridad”
Rosa Montero: “Las novelas se escriben en la oscuridad” ENTREVISTA Futuro inspirado en el hoyEl peligro, dice Rosa Montero, es real. Más aún, es alarmante porque entre las posibilidades del futuro aparece una terrorífica: la extinción humana. La escritora española habla de los peores pronósticos que se han hecho sobre los avances de la inteligencia artificial. Cita a científicos, estudios recientes e incluso inventos actuales que parecen sacados de la ciencia ficción.
Ha ido tan lejos en su interés en el tema que su nueva novela imagina un futuro donde esa amenaza está a un paso de convertirse en realidad: en el año 2111 la confluencia entre humanos y tecnología avanza hasta que secretamente se está creando una superinteligencia que podría tener un poder absoluto. Es una fantasía, claro, pero Montero insiste que en el fondo es realista.
La novela se llama Animales difíciles (Seix Barral) y es el cierre de la serie de cuatro libros protagonizado por la detective Bruna Husky, una tecnohumana gestada en un tanque de cristal y acero durante 14 meses.
La premisa aún parece algo impropia para Montero, una autora que desde fines de los 70 ha cultivado el realismo en cuentos y novelas para abordar temas como el amor, el rol de la mujer en la sociedad, el duelo y la creatividad. Pero desde el primer libro de Bruna Huskey, Lágrimas en la lluvia, ya han pasado 14 años y hay que acostumbrarse que la ciencia ficción también es un género que cultiva la periodista. “Siempre he dicho que mis novelas de Bruna Husky son las más realistas y esta que acaba de publicarse en concreto es tremendamente realista”, asegura Montero. Seguidora desde niña de la ciencia ficción, fanática de una maestra del género como Ursula K. Leguin, desde su casa en Madrid cuenta que siempre supo que Bruna Husky iba a ser un personaje de más de un libro, pero solo cuando trabajaba en este supo que acá terminaba la serie. “Por un lado, en estas novelas siempre hay una investigación. La investigación de este libro era la más agobiante, intensa y oscura porque el peligro al que se refiere es un peligro real para nuestro mundo. En las otras novelas, los peligros son más imaginarios. Y lo segundo, resulta que le doblé el reto a mi pobre Bruna: era una tecnohumana de combate y ahora es una tecnohumana de cálculo. De pantera pasa a ser una ardilla”, dice.
Y agrega: “Y comprendí que iba a ser una novela muy ambiciosa, la más compleja de las cuatro, y que no iba a ser capaz de escribir otra novela de Bruna Husky de esa altura épica y de esa envergadura”. En Animales difíciles que lleva como subtítulo “La humanidad está en juego, Bruna Husky es contratada como detective para investigar un atentado a Eternal, una gran empresa tecnológica. La primera pista parece conducir al movimiento Todista, que aboga por la liberación total de regulaciones en los experimentos en la IA y la modificación humana con tecnología. El mundo creado por Montero (un eco de obras co-cas?, de Philip K. Dick, y su adaptación fílmica, Blade runner) está completamente dominado por la tecnología, que alcanzan un poder incluso político. Así, los pasos de Husky la llevan hasta Minerva, una corporación dedicada a la IA que entre sus proyectos más secretos desarrolla una superinteligencia con potencial incalculable. Narrada como un policial que bien podría llevarse a una serie de Netflix, se lee como una versión fantástica de las posibilidades del presente.
“En el mundo hispano hay un prejuicio tremendo con la ciencia ficción y la gente se cree que se trata de cosas esotéricas, raras y que no tienen que ver conAELOREIVAJOCSICNARFla vida, muy frías, yo qué sé, marcianitos con las orejas picudas, pero es un error, es falta de conocimiento”, dice la escritora. “Lo que te da la ciencia ficción es una herramienta metafórica muy poderosa para hablar del aquí y el ahora. El mundo de esta novela no es una distopía, no es un mundo peor que el nuestro. Yo te diría que incluso que nuestro mundo es peor que el de Bruna. Es totalmente realista”, añade. De hecho, hay muchas de las referencias en la novela a situaciones del presente, como la petición de científicos de frenar los avances de la IA en 2023. La novela sucede en el año 2111 y yo he intentado hacer un desarrollo posible e incluso probable tanto de la situación actual política, social, tecnológica y científica. Por ejemplo, en el primer capítulo, se habla de una capa de invisibilidad, pues puede parecer Harry Potter pero de hecho la empresa Quantum Stealth. Ahora mismo pones quamtum en internet y te lleva a una empresa que existe y que ha desarrollado una tecnología que produce la invisibilidad. Hay videos maravillosos donde hacen desaparecer un mueble tremendo con su material. Ahora no es flexible, pero dentro de 100 años lo será. Estoy hablando de cosas reales. Para mí es un mundo completamente reconocible. Yo no hago una novela distinta cuando hago las Brunas, para nada. Siempre hablo delos mismos temas con la misma ambición literaria y estilística y emocional.
Y aunque sea en clave de ciencia ficción, ¿cree que todos esos avances tecnológicos efectivamente pueden poner, como dice el subtítulo de la novela, a la “humanidad en juego”?Estamos en una revolución de la humanidad que no conocíamos. Yo he pasado toda la vida luchando contra ese sesgo cognitivo que dice que lo que vives en tu vida es lo más importante. Que nunca antes habíamos vivido en un mundo tan violento Ya, peroANIMALES DIFÍCILESRosa MonteroSeix Barral, 386 páginas, $20.800 NOVELAcomparado con los vikingos, no sé.
Pero lo cierto es que ahora estamos en un lugar de la historia de la humanidad que nunca se ha vivido: el Homo sapiens lleva 300 mil años en la tierra, pero solo en los últimos 70 nos hemos logrado poner en riesgo tres veces como especie. Con la energía nuclear, con el calentamiento global y con la IA. Estamos en el precipicio y parece que estamos tentados a dar un paso adelante. Si seguimos intentándolo lo vamos a conseguir, eso no se había logrado antes en la humanidad. Lo siguiente que no se había alcanzado es la velocidad de la duplicación de los conocimientos, el salto tecnológico que estamos viviendo no tiene comparación. Estamos viviendo en un mundo único, que da mucho miedo, pero por otro lado es fascinante que nos haya tocado. La IA es de un poder increíble, nos cambia la vida, la facilita muchísimo, entonces vamos como corderos porque nos ayuda mucho. Habrá grandes cambios en el mundo médico, pero tiene grandes niveles de peligros.
El gran peligro que se aborda en la novela es que la IA pueda ser capaz de reemplazar la inteligencia humana. ¿A eso se refiere?El más básico es la pérdida de empleo, pero no me preocupa, porque todos los cambios tecnológicos significan pérdida de empleos y normalmente también se crean nuevos.
Incluso si en este caso no se crearan suficientes em-pleos nuevos, porque la pérdida va a ser masiva, habrá otro tipo de arreglos, como la renta universal, que llegan a decirlo los híper locos de la IA.
Segundo: la IA no es un telar mecánico, sino que tiene una capacidad de manipulación que ya se está utilizando y ya no está fastidiando: puede comernos la cabeza y convertirnos en absolutos zombis al servicio de esa IA para hacernos comprar lo que quiera, votar lo que quiera. Hay un tercer nivel: la creación de la superinteligencia que ya está en marcha. Ahora mismo la IA se está educando a sí misma y puede llegar antes de 50 años y va a ser una hipermegainteligencia superior a la nuestra e inhumana. Es decir, que no vamos a entenderla. El problema no es esa tontería antropomórfica de las malas películas de ciencia ficción de un robot malvadísimo Se va a crear esta superinteligencia que no vamos a tener idea de qué es. Irá a su ritmo, que no sabemos para qué es, y quizás diga voy a utilizar estos átomos de carbono para no sé qué cosa y esos átomos de carbono somos nosotros.
Y este miedo a la extinción no lo digo yo, lo dice gente tan importante como Geoffrey Hinton, Premio Nobel de Física del año pasado, que el año 2023 se despidió de Google para avisar de los peligros que nos puede traer. En el mundo hispano hay un prejuicio tremendo con la ciencia ficción y la gente se cree que se trata de cosas esotéricas, raras y que no tienen que ver con la vida. Lo que te da el género es una herramienta metafórica muy poderosa para hablar del aquí y el ahora”. No escribes novelas algo o luchar por quieres denunciar en la oscuridad. Si novelas se escriben existencia. Las sentido de la para buscar del Escribes novelas para enseñar nada. tus ideas, utilizas otro género. Periodismo, ensayo; la novela no sirve para eso. La literatura sirve para aprender”. La IA es de un mucho.
Habrá poder increíble, nos cambia la vida, la facilita muchísimo, entonces vamos como corderos porque nos ayuda grandes cambios en el mundo médico, por ejemplo, pero tiene grandes niveles de peligros”. Antes que llegue esa realidad, ¿la novela alude a la entrada del poder económico al área de la política y específicamente al rol de empresarios tecnológicos como Elon Musk hoy en Estados Unidos?Es alucinante porque todos mis libros de Bruna, desde que salieron, la realidad parece que los ha seguido. Este texto lo terminé en julio, entonces no se sabía que Trump volvería a ser Presidente. Y por supuesto que no se tenía ni idea de que Elon Musk diera este giro hacia la política activa. Para mí que Musk es el que está dirigiendo Estados Unidos, no Trump, pero bueno. En mi libro aparece y se habla de una megacorporación que son los dueños del mundo. Y es así. No hay más que mirar alrededor. Hay algunas personas que dicen que mis libros hablan en clave de algunos políticos; para nada, yo lo que intento hacer son prototipos. En mi libro existe los Estados Unidos de la Tierra, una nación nueva que lleva 13 años de vida y la presidenta de la región de España es una imbécil. Pues los lectores dicen que es la presidenta de Madrid, (Isabel) Díaz Ayuso, pero no. Yo no intento describir personajes concretos, intento describir prototipos.
Y más allá de que no aluda a personajes concretos, ¿es su intenc i ó n e n l a s a g a d e Bruna hacer algún tipo de denuncia o advertencia política?Mira, no, tú no escribes novelas para enseñar n a d a. E s c r i b e s n o v e l a s p a r a buscar el sentido de la existencia. Las novelas se escriben en la oscuridad. Si quieres denunciar algo o luchar por tus ideas, utilizas otro género. Periodismo, ensayo; la novela no sirve para eso. La literatura sirve para aprender. Escribes llevada por el desasosiego, para intentar poner un poco de luz en la oscuridad de lo que somos. No quiero advertir de nada a nadie, lo que pasa es que me salen las preocupaciones que llevo conmigo. Las novelas son como sueños que sueñas con los ojos abiertos. Por las noches sueñas cosas que están impregnadas de cosas que te han pasado durante el día, en una novela lo mismo. La escritora española lanza el libro final de la serie de Bruna Husky, una saga de ciencia ficción ambientada en un mundo dominado por la tecnología. En “Animales difíciles” aborda una de sus obsesiones actuales: los beneficios, pero sobre todo los peligros de la inteligencia artificial. “Estamos viviendo en un mundo único, que da mucho miedo, pero por otro lado es fascinante”, asegura.. ñan los androides con ovejas eléctri-