Autor: Fernando Lues Dueño delibrería Arcaluz
Librerías independientes mantienen sus puertas abiertas para los lectores
Librerías independientes mantienen sus puertas abiertas para los lectores Valeria Vilches ciudadesQmercuriovalpo. dl esdela pandemia, Valparaíso hasufrido estragos económicos, debidoalcierredevarioslocales comerciales que resultaron impactados por la crisis sanitaria.
A pesar de este desalentador panorama, varias de las tradicionales librerías porteñas se hanresistidoa estedecliveyalgunas han vuelto a resurgir en losúltimosaños, pesealosriesgos de cierre, como es el caso delahistórica Crisis, que existe frenteal Congreso Nacional, en avenida Pedro Montt.
Mailén Llancaqueo, actual dueñadel establecimiento, explica que “con la muerte de mi papá (Mario Llancaqueo), en 2021, la propietaria del edificio nos pidió desocupar el lugar. (Pero) como hija decidí seguir conel proyecto, asumiendo la responsabilidad de mantener un espacio que fomenta el encuentro de la ciudadanía y el pensamiento crítico”. LIBRERÍAS CLÁSICAS La librería se trasladó a calle Prat659 y se encuentra rodeada de locales, cafeterías y restaurantes. “Nos llena de felicidadestarubicadosenel centro de Valparaíso, que estuvo abandonado durante años, y poder reactivar su economía comercial. Me gusta que nuestro emprendimiento esté en un segundo piso, ya que permite a los clientes entrar a edificios emblemáticos y no quedarse solamente con sus fachadas”, indica Llancaqueo.
Enesamismalínea, la dueña sostiene que contarán con panoramas culturales cada mes, entre los cuales ya tienen planificado un club de lectura y exposiciones de diferentestemáticas, donde la comunidad podrá solicitar espacio, mediante un formulario en su página web, para poder realizar sus propias actividades. “Somos mujeres quienes60años, aproximadamente, ha funcionado la librería Ateneo, la cual es conocida por sus libros escolares.
“Me llena de orgullo que estemos generando un entorno seguro para las chicas interesadas en la lectura”. Mailén Llancaqueo Dueñadelibrería Cri“La pandemia no nos afectó porque invertimos en publicidad digital para llegar a más público”estamos administrando este proyecto y me llena de orgullo que estemos generando un entornoseguro para las chicas teresadasenlalectura. He visto colegialas que entran a librería y sesienten acogidas”, agrega. A pesar de este renacimiento, hay otros locatarios que ya quieren cerrar sus puertas, comoesel caso dela librería Ateneo, que ha funcionado porcasi60 añoscon la venta de libros educativos.
El propietario, Juan Benavente, explica que “ya no me da el cuero para continuar, muy bien”. DESAFÍOS Esta reactivación no ha estado exenta de desafíos, como los costosos arriendos y la piratería, quese han convertido en frandes adversarios para el fortalecimiento de estos negocios. “Estaes lasegunda vezque tenemos que trasladar la tienda. Elaño pasado tuvimos que cambiarnos y fue dificil encontrar un lugar porque losarriendotenían cifras que eranimposible de costear para un emprendimiento familiar”, apunta Llancaqueo. En esta misma línea, Lues señala que “es complicado poder establecerse, ya que es muy costoso, sin mencionar al comercio informal. Incluso, al gunos compañeros han tenido problema con personas quese han puesto a vender libro delante de sus negocios”. “Pese a esto, es un rubro encantador. Si alguien está pensando en levantar un emprendimiento de este calibre, lo invito a que se atreva porque, sibiennosevaa hacer millonario, tampoco va a morir de hambre. Les recomiendo a los primerizos hacer publicidad en redes sociales y estar abiertosa escuchar asus clientes”, finaliza ellibrero. 68EL DUEÑO DELA LIBRERÍA ATENEO PROYECTA SU CIERRE. más público. Además, realizá87 años y vivo en Quilpué, por lo que viajo ese meencanta trabajar aquí y silo quiera continuar en este rupuesya tengo trayecto todos los días.
A mí vendo, será a una persona que bro”. ERA TECNOLÓGICA Algunos libreros han indicado queeste resurgimiento se debe alaadaptación a la nueva época, con la tecnología jugando unpapel claveen la promoción de sus negocios y la captación de nuevos clientes.
Fernando Lues, responsa: ble dela librería Arcaluz, afirma que “la pandemia no nos afectó porque invertimos en publicidad digital para llegara bamos delivery deibros, cuando seempezó a utilizar los salvoconductos”. Otros locatarios destacan quelasnuevas generaciones de lectores han sido una audiencia relevante en los últimos años, siendo un target que suele comprar libros de manera recurrente. Patricio Araya, dueño de Mar delibros, asegura que “actualmentelos adolescentes leen bastante, especialmente novelas juveniles y filosofía. Tengo una estantería de libros para ellos, algunos de los cuales están basados en series de Netílx, y obtengo ganancias todos los días porque se vende. CULTURA. El renovado interés de los jóvenes, la apuesta por difundir novedades en redes sociales y la inclaudicable voluntad de sus dueños mantienen esta tradición de Valparaíso en pie. cimiento de Barrios Comerciales