La ciencia en Chile
La ciencia en Chile COMENTARIOSIniciado este año 2025, con grata sorpresa, he lefdo una necesaria polémica sobre la situación actual de las ciencias en Chile.
Esta polémica la inició el presidente de la Academia Chilena de Ciencias, Sergio Lavanderos, en una carta enviada al diario La Tercera, donde expone tres factores que estarían generando una crisis en las ciencias en Chile, y que 1. La podríamos resumir: manifiesta debilidad e inestabilidad del gobierno en su papel de creador de conocimiento con mirada de Estado; 2.
La falta de una gestión administrativa efectiva y moderna en la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) que administra los principales fondos para los proyectos científicos; 3) La baja participación de académicos en las decisiones sobre el desarrollo de la ciencia, tecnología, conocimiento e innovación (CTCI) en Chile. A los factores anteriores agrega dos críticas: 1. la demanda no cumplida de este Gobierno respecto del espera: do aumento del presupuesto para CTCI, hasta alcanzar el 1% del PIB. 2. La ineficiencia en la gestión del Ministerio de Ciencia, porque, supuestamente, solo habría alcanzado el 66% ejecución presupuestaria acumulada hasta octubre de 2024.
La respuesta del Subsecretario Cristián Cuevas no se hizo esperar, indicando que el presupuesto ha crecido 12.68 % desde el 2020 a la fecha, y que la ejecución presupuestaria de esa Subsecretaria habría alcanzado el 99.8% a diciembre de 2024. Anota además los grandes logros en temas como el Hidrógeno Verde y valora la gestión de ANID. No se puede desconocer la importancia de la ciencia nacional en análisis comparativo con los países latinoamericanos, pero estamos lejos de los países de la OCDE. Considero que el problema es más profundo que los tres ejes señalados y las dos críticas adicionales.
LoquesePedir una mirada de Estado al Gobierno en ejercicio es válido, no obstante esa mirada es responsabilidad de todos los actores”. Sergio González Miranda, Premio Nacional de Historia 2014 carece es de una estrategia nacional de ciencia.
No tienesentido haber organizado un Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (que debería dar respuesta a cada uno de esos conceptos y no solamente al primero), dejando atrás a CONICYT, solo con un incremento de un 12.68 % del presupuesto. Como vemos en la cartadela Academia, pareciera que todo el problema radica en el Gobierno, pero sabemos que los gobiernos solo duran cuatro años y priorizan lo urgente por sobre loimportante. Pedir una mirada de Estado al Gobierno en ejercicio es válido, no obstante, esa mirada es responsabilidad de todos los actores, desde las universidades hasta las empresas, pasando por las organizaciones científicas. Los proyectos relevantes en ciencias y la formación especializada de los futuros científicos debe planificarsea largo plazo. Mientras el quehacer científico en Chile se decida año a año sin una política nacional, no avanzaremos demasiado.. COMENTARIOS