Autor: ÁNGELES GUZMÁN
Jaime Vadell: “Chile se volvió grave y soberbio... le hace falta reírse”
Jaime Vadell: “Chile se volvió grave y soberbio... le hace falta reírse” Palma, y Onofre Jarpa le dijo “no se meta usted, que esta es pelea de perros grandes, no de quiltros”. Usted fue alumno del Instituto Nacional. ¿Qué le parece el fenómeno de la violencia en el colegio con los overoles blancos y la baja en su calidad académica? Es una situación absolutamente irrisible. Porque ya pasó de castaño a oscuro. En el INBA le tiraron bencina a un profesor, con el afán me imagino de tirarle después un fósforo. Eso es un problema nacional. No es un problema de la educación. No lo puede resolver el ministro de Educación. Lo tiene que resolver la ciudadanía entera. Tiene que ponerse a pensar verdaderamente qué se está haciendo con nuestros jóvenes. Si tuviera que describir la situación del Instituto Nacional actual en una palabra, ¿cómo lo describiría? Trágica. Conduce a la desaparición de ese colegio. ¿Qué es lo que más gozó de compartir con Tomás Vidiella y Coco Legrand en la obra “Viejos de Mierda”? Eso fue un elenco muy amable y divertido. Y, además, fue una obra que tuvo un éxito abrumador. (Hay) cosas que escuché que me dejaron bastante inquieto.
Dos o tres veces, que es harto digamos, alguien del público nos esperaba para saludarnos y decían “hacía tiempo que no me reía tanto”. Y yo decía, ¿pero cómo? ¿ No se reía? “No tenía ningún motivo para reírme”. Eso da cuenta de un país muy enfermo. ¿Cree que a Chile le falta reírse más? Sí, le falta. Y además le falta reírse de la gravedad que se ha tomado todo aquí. ¡Como que fuera un país importante en el mundo! Se volvió grave y soberbio. Protagonizó una de las teleseries más recordadas de la historia chilena, “La Madrastra” Fue de las cosas más notables que han pasado en la televisión chilena. Porque del 73 al 81, los actores chilenos estábamos prohibidos, por razones políticas, de aparecer en la televisión.
Y “La Madrastra” tuvo la capacidad por su éxito de obligar a abrir esa puerta, que estúpidamente tenía la censura, y permitir que los actores chilenos A dos meses de cumplir 90 años (el 6 de octubre), el actor Jaime Vadell sigue activo en las tablas con la obra “Aquí me bajo yo”. Ha estado en más de 100 piezas teatrales, en teleseries y películas y dice que a Chile le falta risa porque se ha vuelto muy “grave y soberbio”. ¿Cuál es su principal cábala antes de actuar? No, no tengo ninguna cábala. Muchos colegas tienen incluso colores favoritos. O si no, pulseras o anillos, qué sé yo. No se me ha ocurrido. Usted ha dicho que la política es muy aburrida. ¿Qué falta para que algo de la política lo entretenga hoy? Muy aburrida. Hoy día mucho menos que cualquier otro día. Es lo más aburrido que he visto.
Tanto que leo religiosamente el diario y nunca me he sorprendido, desde hace bastante tiempo. ¿Y eso es bueno o malo para usted? Pésimo, además andan todos a los mordiscos, se muerden mutuamente las canillas, los tobillos, todo eso. Son como perros chicos. Me acuerdo de (una discusión entre) Sergio Onofre Jarpa y Orlando Millas, se metió Aníbal CUEN TAN CÓMO trabajaran en la televisión. Y no solo en el Canal 13, sino que en el canal nacional (actual TVN). ¿Tuvo que aguantarse mucho tiempo para decir quién había matado a Patricia? ¡ Ja, ja, ja! Sí, claro. Ese final hizo toda una historia con Arturo (Moya Grau) que puso un concurso, y armó un lío con un diario de quién era la asesina. Yo creo que hizo un poco de trampa Arturo en eso, yo pensaba que el asesino era otro. Que yo había matado a Patricia. ¿Cuál ha sido la mejor decisión que ha tomado en su vida? Dedicarme a lo que me dedico. Porque he sido muy feliz haciendo esto y me ha permitido, mal que mal, financiar mi vida, la educación de mis hijos.
Agradecido, de seguir trabajando hasta estas alturas, siendo entrevistado por los diarios. ¿Y cómo le gustaría seguir trabajando en el teatro? A mí me gustaría hacer galanes románticos, ese sería el próximo rol. ¿Qué le parece que personas de más de 80 estén teniendo tanto éxito en sus respectivos rubros y sigan activos? ¡ Magnífico! Porque uno está en ese segmento y no hay vuelta atrás. Lo único que nos queda es seguir haciendo viejos y viejos y viejos hasta que ya pasemos para el otro lado. Espero que sea muy lejano ese pasar por el otro lado. n ATEUGLEEPILEF. “No tengo ninguna cábala. Muchos colegas tienen incluso colores favoritos. O sino, pulseras o anillos, qué sé yo. No se me ha ocurrido”. El reconocido actor 89 años: