El domo de hierro
El domo de hierro Rodrigo Ojeda __Profesor de historia Las Las sirenas se activan, la normalidad se interrumpe, los estruendos se amplifican amplifican y el cielo es testigo de la defensa tecnológica. Los refugios disponibles son parte de su cultura tras los ataques históricos históricos del terrorismo del medio oriente. Israel se encuentra bajo ataque y se defiende de sus enemigos fronterizos día a día. Los misiles están dirigidos a zonas pobladas indiscriminadamente indiscriminadamente con daños evidentes, que no son mayores sólo por la existencia del escudo en el cielo. Defenderse del terrorismo y cuidar a su población son deberes irrenunciables. El domo o cúpula de hierro de Israel, es un sistema de defensa aérea móvil compuesto de un radar, un control y misiles interceptores. Es decir, detecta un ataque y lo intercepta. Este escudo escudo antimisiles protege a las ciudades y a la población de Israel, con un alto nivel de éxito y minimizando los daños físicos. La llamada cúpula defiende a todos los habitantes, sin distinción distinción étnica, política, religiosa, cultural ni de ningún tipo. La defensa es permanente ante el constante ataque del terrorismo religioso por parte de Hamás y Hezbolá. Israel informa informa a través de alertas a sus habitantes de la amenaza y del eventual impacto, los ataques son incesantes y arbitrarios, con un objetivo conocido y declarado al mundo: acabar con Israel. La amenaza es latente y real.
El mundo ha normalizado con hipocresía hipocresía la existencia de agrupaciones terroristas y dictaduras del oriente medio, las mismas que atacan a la única democracia que realmente realmente vela por la seguridad y dignidad de todos sus ciudadanos y migrantes. Se han relativizado relativizado las motivaciones y consecuencias del terrorismo, y se culpa mediáticamente de todos los males de la humanidad a Israel. Es una extraña moda y paradoja que recorre al mundo libre y pone en peligro a la propia cultura occidental y sus pilares ganados a fuego y sangre. El terrorismo no es tolerante, ni inclusivo, no cree en la dignidad humana ni en las libertades nacidas en occidente. No hay defensa ni comprensión al terrorismo, venga venga de donde venga. El Estado de Israel, no es precisamente el que pone en riesgo las libertades, el estado de derecho y los derechos humanos. El interseccionalismo que algunos proponen y defienden, encubre odio y resentimiento, y llama directamente a eliminar eliminar a Israel. Las marchas intolerantes en favor del “mundo palestino” poco entienden de libertades, libertades, más allá de su metro cuadro y privilegios.
El mundo actual enfrenta un sinnúmero de dilemas, dilemas, es real que la sociedad libre cada vez es menos libre y segura (parafraseando a Bukele). También es real que Israel se enfrenta día a día a dos agrupaciones terroristas, y no existe una condena unánime frente a las motivaciones de Hamás y Hezbolá, organizaciones que cuentan con extrañas simpatías desde el mundo libre y con logísticas desde dictaduras. Dejemos que Israel se defienda y enfrente al terrorismo, no es una tarea fácil ni breve, el domo no es suficiente. Es urgente levantar otro domo de hierro ante la desinformación y la animadversión que existe en contra de Israel en Chile y el mundo. mundo. Frecuentemente nuestras autoridades están viendo sólo una cara de la moneda, olvidaron desde el sesgo de moda que fue Israel el violentado violentado salvajemente por Hamás, el 7 de octubre de 2023. Fue un atentado planificado con muertos, muertos, vejaciones, torturas y secuestrados, no hay que olvidar a los 101 secuestrados en manos del salvajismo, los cuales son utilizados como trofeos trofeos y monedas de intercambio. A Hamás no le sirve el cese del fuego. Israel no comenzó la guerra. guerra. Hay que informarle al presidente Boric que la moneda tiene dos caras: la masacre la realizó Hamás y la democracia está en Israel.
Hay que recordarle al universitario Boric que tiene graves graves problemas en casa, ya es hora que pase a las acciones frente a las urgencias sociales locales, tiene que priorizar la seguridad e integridad de los chilenos y cumplir con el mandato constitucional. constitucional. Mientras tanto, las lecciones al mundo del presidente desde el palco de las Naciones Unidas no son creíbles..