Autor: MARÍA SOLEDAD RAMÍREZ R.

Ropa, trabajo o casa: las peticiones a una primera dama
Ropa, trabajo o casa: las peticiones a una primera dama LIBRO CON CARTAS A ROSA “MITI” MARKMANN“Estimada y recordada Sra. Espero que al recibo esta carta se encuentre bien. Soy un chico y mi madre es viuda y deseo que tenga la bondad de ayudarme ropa y calzado. Sra., este año perdí de clases por falta de calzado y ropa. Sra. yo tengo 10 años... Espero, Sra., mi contestación. Deseo que todo esto me mandara para la Pascua. Lo más que me interesa es el calzado y la ropa.
Mi dirección es.. . ”. Fechada el 29 de noviembre de 1949, Jaime Pérez le escribe esta misiva, con faltas gramaticales, a la primera dama Rosa “Miti” Markmann, ya que su madre, empleada doméstica, no podía comprarle ropa para ir a la escuela.
La carta de este niño describe una de las tantas miserias del Chile de las décadas de los 40 y 50 que Miti Markmann, esposa del presidente Gabriel González Videla (1946-1952), intentaba resolver desde su función de primera dama, rol que asumió con nuevas ideas y con la instalación de un despacho en La Moneda. Esa es parte de la investigac i ó n que la historiadora Cecilia Morán, académica de la U. San Sebastián, ha desarrollado en “Las Primeras Damas en Chile (19381970)” (Editorial Bicentenario, 2022) y que ahora ahonda en “Cartas a una Primera Dama. Epistolario de Rosa Miti Markmann (1946-1952)” (Ediciones USS/Editorial Historia Chilena, $20.000 ), que sale a fines de mes y que publica gracias al Concurso Ediciones U. San Sebastián.
Morán realizó su investigación en el archivo del presidente González Videla en el Archivo Nacional, en el que hay unas 8 mil cartas dirigidas a la primeradama o que referían a temas de los que ella se hacía cargo. También tuvo acceso a la correspondencia que aún permanece en manos de la familia de la ex primera dama. De ese material, la historiadora seleccionó unas 500 cartas que están transcritas en el libro, el que además incluye un estudio preliminar sobre la época y la figura de Markmann. Una gran mayoría de las misivas eran escritas por mujeres, también hay de hombres y niños; manuscritas o a máquina (las menos); con peticiones de trabajo, casa, remedios y ropa. La lectura de las cartas impresionó a Morán. “Yo creo que a cualquier persona le da una emoción tremenda, es decir, de la pobreza, del nivel de carencia”, afirma la historiadora. “Ya teníamos la ley de instrucción primaria obligatoria, pero los niños realmente no iban al colegio. ¿Por qué? Porque notenían zapatos, no tenían camisa, así de pobres. Y eso pasaba mucho, sobre todo en provincia. Además que los papás preferían que los niños trabajaran, porque eran mano de obra que tenían para poder aportar a la economía doméstica.
Era un Chile en el que había muchísimo desempleo y eso está bien reflejado en las cartas que seleccioné; también era un país lleno de enfermedades muy graves, donde la tuberculosis atacaba a ricos y pobres”, explica Morán, quien suma otras realidades reflejadas en las misivas, como la falta de vivienda, los arriendos caros, la alta natalidad y una vida familiar precaria. Miti Markmann creó en La Moneda la Oficina de la Mujer, donde recibía estas peticiones, las que contestaba ella o a través de sus secretarias.
Ese rol más institucional y organizado de primera dama no se abandonó nunca más en la historia política de Chile hasta que a fines de 2022 desapareció de La Moneda.. La historiadora Cecilia Morán investigó en el archivo epistolar de la esposa del presidente Gabriel González Videla, quien utilizó su rol para aliviar las penurias del Chile de su época. LIBRO CON CARTAS A ROSA “MITI” MARKMANN n el despacho de la Oficina de la Mujer en La Moneda, que ella creó.