Autor: Por Giorgio Jackson
Columnas de Opinión: Dos vidas en un solo Chile
Columnas de Opinión: Dos vidas en un solo Chile A solo tres semanas del plazo para la inscripción ante el Servel, hay dos candidaturas que, según las encuestas, se perfilan para pasar a segunda vuelta. Al revisar sus trayectorias, se revelan tanto diferencias de origen como en las formas de construir liderazgo para encabezar el Gobierno. Revisemos. José Antonio Kast creció como uno de 9 hermanos, en el seno de una familia que migro tras la Segunda Guerra Mundial, y cursó sus estudios en el Colegio Alemán de Santiago. Jeannette Jara se crio en Conchali, como la mayor de cinco hermanos, hija de un mecánico industrial y una dueña de casa, y estudio en el Liceo Isaura Dinator de Guzmán. En los ochenta, Kast comenzaba la carrera de Derecho en la UC e ingresaba al Movimiento Gremial. En 1988, Kast fue rostro de la franja del Sí en apoyo a Pinochet y perdió la elección para presidir la FEUC. Para entonces, Jara, con 14 años de edad, tomaría la decisión de sumarse a las Juventudes Comunistas. En la década de los noventa sus caminos seguían distanciandose.
Kast se titulaba como abogado, se casaba y se incorporaba como socio al bufete "Kast, Pinochet, De la Cuadra & Cia". Por su parte, Jara trabajaba para costear sus estudios en Administración Pública, donde posteriormente sería electa presidenta de la FEUSACH. Se casó a los 19 años y. solo dos años después, enviudó, con todo lo que aquello significa. A comienzos de siglo, Jara comenzaba su carrera como funcionaria pública en el Servicio de Impuestos Internos y asumía responsabilidades como dirigenta sindical. Por esos años Kast daba el salto al Congreso y se consolidaba dentro de la UDI, llegando a ser jefe de Bancada y secretario general del partido. En paralelo, Jara completaba su segunda carrera, Derecho, y posteriormente un magister en Gerencia Pública. En 2016, durante el segundo gobierno de la Presidenta Bachelet, Kast renunciaba a la UDI apuntando a una "derecha tibia", para competir sin éxito en las presidenciales. En paralelo, Jara asumía como subsecretaria de Previsión Social. En 2021 ambos asumen un desafio electoral. Mientras Kast perdia en segunda vuelta presidencial, Jara, se postulaba como alcaldesa de su comuna de la infancia, Conchali, sin salir electa. En 2022, mientras Kast viajaba por el mundo presidiendo la organización de ultraderecha "Political Network for Values", Jara era nombrada por el Presidente Boric como ministra del Trabajo y Previsión Social.
Desde ahí, lideró complejas negociaciones que culminarian con la aprobación transversal de la jornada de 40 horas y el mayor aumento real del sueldo minimo en los últimos 30 años, En 2023, Kast lideraba la campaña del "A favor", que sería rechazada por más del 56% de los votantes. En paralelo, Jara insistia en el diálogo para lo que parecía imposible: aprobar una reforma al sistema de pensiones que fortaleciera el pilar de ahorro individual y la solidaridad del sistema. Estas historias paralelas ilustran diferencias que superan lo partidario. Una edificó su trayectoria en base a esfuerzo, acumulando experiencia técnica y de gestión que luego aplicó como ministra. Transformó cada obstáculo, como los que enfrentan millones de familias, en una oportunidad, generando puentes de diálogo para avanzar en beneficio de las mayorías, sin perder de vista sus convicciones. En la vereda de enfrente, Kast siguió una carrera impulsada por redes familiares en la elite, una herencia economica familiar, y la ambición de ocupar cargos políticos sin muchos logros atribuibles a su gestión. Y cuando las estructuras partidarias no se alinearon con sus expectativas, optó por crear un partido a su medida, Republicanos, del cual también se han alejado muchos de sus colaboradores iniciales.
A pesar de haber partido desde lugares tan distintos, hoy ambos comparten una misma posibilidad: conducir los destinos del gobierno de Chile. ¿ Qué tipo de liderazgo queremos para el pais que viene? Es el debate que se tomará la escena los próximos meses..