Todo sobre el niño del cerro El Plomo en un volumen
Todo sobre el niño del cerro El Plomo en un volumen E l 1 febrero de 1954 fue descubierta la momia del cerro El Plomo, a unos 5.400 metros de altura en el macizo cordillerano metropolitano, en un hoyo cavado en la tierra.
Cuando los arrieros que la encontraron fueron a ofrecerla al Museo Nacional de Historia Natural (MNHN) --sin llevarla--, la arqueóloga Grete Mostny, en aquel momento jefa de la sección de Antropología de la entidad, supo rápidamente que este hallazgo era importante. En marzo, partió a verla con otros investigadores y no dudaron de que el MNHN debía comprarla, costara lo que costara.
Así, el niño del cerro El Plomo llegó al MNHN y se convirtió en uno de los hallazgos arqueológicos más importantes que se han hecho en Chile y en el mundo, por su increíble estado de conservación y por todo lo que ha enseñado sobre su tiempo y cultura. MÚLTIPLES ENFOQUES El MNHN la ha resguardado durante siete décadas y ahora publica, junto a la Corporación Cultural Lo Barnechea y la U. Católica a través de Ediciones UC, "El niño del cerro el Plomo.
A 70 años de su hallazgo", un libro que reúne 22 artículos, escritos desde 1954 en adelante sobre esta preciosa momia de un niño de 8 o 9 años, que yace encorvado en posición fetal, como si estuviera dormido, vestido con un ajuar inca. Los textos abordan la momia desde múltiples enfoques: arqueológico, antropológico, paleontológico, biológico, histórico y de conservación, y sus autores son importantes científicos que lo han estudiado a lo largo de los años.
Compilado por el director del MNHN, Mario Castro, con la colaboración de Eliana Durán, Verónica Silva-Pinto y Francisco Garrido, el libro busca ser un homenaje tanto al niño como a los investigadores que han trabajado en su historia y la de las poblaciones ancestrales. "Gracias al avance de la tecnología, hemos podido desentrañar secretos sobre su vida, la alimentación y las circunstancias que rodeaban su sacrificio, incluida la causa de su muerte", señala Castro en el texto introductorio del volumen.
Agrega el arqueólogo que "métodos modernos de análisis, como la datación por radiocarbono y el análisis de isótopos estables, han proporcionado valiosa información sobre su dieta y el entorno en el que vivió, revelando así detalles de su vida cotidiana que antes eran completamente desconocidos". UN RITUAL EN LAS ALTURAS El libro tiene 531 páginas, se divide en dos grandes capítulos, "Descubrimiento, registro y conservación" y "Biología del niño de El Plomo", e incluye imágenes inéditas de la momia y de las investigaciones científicas, entre otros materiales.
La arqueóloga Eliana Durán, quien llegó al museo como ayudante de Grete Mostny y cuidó a la momia durante muchos años, la llamó Cauri Pacssa, nombre que tomó de una publicación del siglo XVII escrita por el visitador Rodrigo Hernández Príncipe, que menciona un sacrificio de un niño en Chile.
Así, Cauri Pacssa habría recorrido, durante ocho meses, unos dos mil kilómetros desde Cusco hasta la actual comuna de Lo Barnechea, en una procesión ritual, vestido con finos textiles y adornado con joyas, para ser parte de la Capacocha, el sacrificio a los dioses realizado en las alturas.
Su muerte habría sido producto de un traumatismo craneal y su cuerpo fue cuidadosamente colocado en una tumba excavada en el suelo rocoso, junto con ofrendas de gran valor, como estatuillas de oro y plata, textiles finos y otros objetos personales. En un estudio publicado en 1984 por el químico farmacéutico Marco Poduje, se establece la posible liofilización (deshidratación) natural del cuerpo en lugar de solo la congelación para explicar su estado de conservación. El libro no se vende, pero puede ser consultado en la biblioteca del MNHN, en bibliotecas especializadas de la UC y en el Centro Lector de Lo Barnechea. Todo sobre el niño del cerro El Plomo en un volumen El libro recoge 22 investigaciones realizadas en las últimas siete décadas en torno a la momia que conserva el Museo Nacional de Historia Natural. A 71 AÑOS DE SU HALLAZGO: MARÍA SOLEDAD RAMÍREZ R. FRANS STOPPELMAN Grete Mostny y el niño del cerro El Plomo, en 1954.. - - -