El rol activo del Estado para fomentar la industria naval nacional
El rol activo del Estado para fomentar la industria naval nacional Chile es un país marítimo por excelencia. Alrededor del 95% del comercio comercio internacional del país utiliza la autopista oceánica y el 45% de la economía economía depende de ella, según datos del Ministerio de Defensa.
Su potencial en este ámbito es innegable, lo que plantea una pregunta clave: ¿ qué nos falta para dar el salto hacia el desarrollo tecnológico e industrial de la construcción construcción naval nacional? La respuesta es clara: el rol activo del Estado. Parte de este apoyo lo hemos visto en proyectos recientes, como la Política Política Nacional de Construcción Naval en Chile, que fomenta la colaboración público-privada en el largo plazo.
Sin embargo, es importante también crear un entorno favorable para la construcción de embarcaciones más complejas y tecnológicamente avanzadas, a través del fortalecimiento de infraestructura, infraestructura, desarrollo en innovación y especialmente financiamiento, elementos que son fundamentales para que la industria naval no solo sobreviva, sino que también para que prospere y se adapte a las exigencias del mercado, tanto a nivel nacional como global. No podemos ignorar que otros países han implementado políticas proactivas proactivas para preservar y fortalecer este sector, comprendiendo que la inversión no solo generará empleos directos, sino también un efecto multiplicador en la economía local. Por ejemplo, naciones como como Alemania, Noruega y Francia, han puesto el foco en esta industria mediante fondos de I+D, subsidios subsidios para la descarbonización del transporte, así como encargos militares. Los astilleros desempeñan un rol crucial, fortaleciendo la balanza comercial comercial mediante la construcción y exportación de embarcaciones de alto valor tecnológico y dinamizando el ecosistema de PYMES. Además, son responsable responsable de una significativa generación de empleo, particularmente en áreas clave como la ingeniería y los oficios técnicos, potenciando el desarrollo de capacidades locales.
Por último, aportan a la descentralización de la economía: economía: al generar empleo y dinamizar comunidades costeras alejadas de Santiago, fortalecen la infraestructura productiva en estas zonas con menor inversión y oportunidades, contribuyendo al desarrollo regional. El desafio es grande, pero Chile tiene la oportunidad de seguir este camino camino y convertirse en un referente mundial en la industria.
Para ello, es importante importante que el Estado actúe como aval y ofrezca garantías durante el proceso de construcción de naves, implementando incentivos fiscales y subvenciones subvenciones que fomenten la modernización tecnológica y la capacitación, priorizando priorizando a los astilleros nacionales en contratos de construcción y reparación de buques, asegurando así una demanda y crecimiento continuo. Con un rol estatal activo y el esfuerzo coordinado de todos los actores del ecosistema, podremos garantizar un futuro próspero y sostenible para el sector. El rol activo del Estado para fomentar la industria naval nacional Heinz Pearce Gerente general de ASENAV.