Autor: Laura Bertolotto Rectora de Santo Tomás en Valdivia.
Columnas de Opinión: Sostenibilidad: un compromiso urgente
Columnas de Opinión: Sostenibilidad: un compromiso urgente ablar de sostenibilidad es hablar del futuro, pero tam[bendel presente. Es reconocer que nuestras decisiones cotidianas como individuos, comunidades o instituciones tienen un impacto directo sobre el entorno que habitamos y el legado que dejaremos. En su sentido másamplio, la sostenibilidad no se reduce únicamente al cuidado del medio ambiente. Es un concepto integral que busca el equilibrio entre tres pilares fundamentales: el crecimiento económico, la equidad social y la protección ambiental. Estos componentes deben coexistir de forma armónica para alcanzar un desarrollo justo, inclusivo y perdurable en el tiempo. Este enfoque integral adquiere una especial relevancia en las ins tituciones de educación superior. No solo son espacios de formación académica, sino también de construcción de ciudadanía. Formana los futuros profesionales que deberán enfrentary liderar losdesafios del desarrollo sostenible en sus diversos ámbitos de acción.
Por ello, es fundamental que estas instituciones cuenten con políticas claras en materia de sostenibilidad, que promuevan buenas prácticas, impulsen procesos formativos conscientes y generen espacios de reflexión y diálogo como seminarios, congresos, actividades de vinculación con el medio y experiencias de aprendizaje en terreno. No basta con mantener el statu quo. Es momento de avanzar desde una visión tradicional hacia un enfoque regenerativo, que no solo evite el daño, sino que busque activamente restaurar ecosistemas, y revitalizar territorios. Esto implica transformar nuestra mirada tradicional sobre el desarrollo. Debemos apuntar también en función del bienestar colectivo, intergeneracional y la resiliencia de los sistemas naturales. Por ello, es importante destacar iniciativas privadas que, desde distintas escalas, han integrado la sostenibilidad en sus modelos de negocio, innovación y gestión, contribuyendo así a un desarrollo territorial más consciente. Este esfuerzo conjunto entre el sector público, privado y académico permite avanzar hacia una gobernanza ambiental más sólida y participativa. Frente a estos avances, el desafio ahora es consolidar una cultura de la sostenibilidad que articule politica pública, acción cludadana y compromiso académico. Formar con perspectiva sostenible, instalar debates relevantes y fomentar prácticas regenerativas debe ser parte de nuestra hoja de ruta institucional y social. Si aspiramos a una formación verdaderamente integral, no podemos marginar la dimensión ética y ambiental. Sembrar conciencia sostenible en nuestros estudiantes es también sembrar esperanza. C Columna.