Editorial: Drogas en las Fuerzas Armadas
Editorial: Drogas en las Fuerzas Armadas os recientes escándalos de narcotráfico L que involucraron a miembros del Ejército y la Fuerza Aérea no pueden considerarse hechos aislados ni anecdóticos. Son señales claras de una amenaza creciente: la infiltración del crimen organizado en las Fuerzas Armadas, una de las instituciones mas sensibles del Estado.
La detención de seis suboficiales del Ejército con casi 200 kilos de cocaína y el uso de un vuelo institucional de la FACh para trasladar ketamina desde Iquique son hechos de extrema gravedad que exigen acción inmediata y de los cuales tampoco puede considerarse libre la Armada. Lo positivo -si cabe el términoes que fueron los propios mecanismos internos los que detectaron y denunciaron los casos. Pero eso no basta. La reflexión del almirante (r) Codina, quien recuerda que los uniformados son también un reflejo de una sociedad consumida por la droga, debe traducirse en reformas profundas. No Aquí hay un desafio basta con la indignación. Urge fortalecer la inteligencia, la contrainteligencia y el control interno. necesario y eliminar El almirante Vergara, por su parte, plantea algo crucial: sin presupuesto, todo será letra muerta. No es posible prevenir ni sancionar si no se cuenta con recursos para realizar test de drogas, rotar a personal de zonas de alto riesgo o robustecer las unidades encargadas de investigar y sancionar internamente. Aquí hay un desafio político de primer orden: asegurar el financiamiento necesario y eliminar cualquier indulgencia con la corrupción. La advertencia de expertos como John Griffiths es clara: si no se actúa ahora, lo excepcional se volverá habitual.
Y entonces habremos perdido no solo una batalla, sino una institución clave para la democracia La lucha contra el narcotráfico no solo se libra en las poblaciones o en las fronteras: también se gana, o se pierde, en los cuarteles. político de primer orden: asegurar el financiamiento cualquier indulgencia con la corrupción de las instituciones.. Casos de narcotráfico en el Ejército y la FACh revelan una más que preocupante infiltración del crimen organizado. E Editorial político de primer orden: asegurar el financiamiento cualquier indulgencia con la corrupción de las instituciones.