Autor: Redacción /M.M.
“En Santa Olga aún estamos con el velorio, todavía no hacemos el funeral”
“En Santa Olga aún estamos con el velorio, todavía no hacemos el funeral” O ENTREVISTA.
MÓNICA SEPÚLVEDA, presidenta de la junta de vecinos del poblado que se incendió en 2017:mil y 5 mil vecinos, casi la misma cantidad que antes del incendio, y si bien es evidente que hoy tienen mejores condiciones de vida, conalcantarillado, suficiente agua potable, vi-viendas de construcción sóli-da, calles pavimentadas, un nuevo establecimiento educacional, parque y cancha de fútbol, Mónica confiesa que de todos modos se extraña la Santa Olga antigua, la que nació enla década del 60 como unasentamiento especialmente de trabajadores forestales. “Adultos mayores nos quedan pocos, se han ido mucho enel camino. Yo creo que por pena, por un tema de volver a acostumbrarse al lugar donde llegaron, les afectó. Nosotros todavía queríamos ir a Santa Olga antigua. A esa con tierra, con barro, con todo, pero la queríamos. Queríamos esa plaza donde nos juntábamos, a dondese iban los viejitosachacharear un rato. Y ya no está. Hoy día hay cemento y eso cambió, porque nosotros somos de tierra, de poner las patitas en la tierra, de todas esas cosas”, señala con un dejo de nostalgia.
Es más, indica que “están las ganas de seguir, estar ahíel día a día, el haberse quedado en Santa Olga, demuestra que el cariño es más grande por su entorno, por su lugar, que cualquier otra cosa”. Pese atodo Mónica Sepúlveda es una mujer con sentido del humor. Junto a otras integrantes del comité de Santa Olga, perteneciente a la Red de Prevención Comunitaria, hoy es una embajadora de la prevención de incendios.
Es una labor que parte desde la casa, que luego se multiplica casa a casa donde se va concientizando, identificando y mitigando riesgos asociados a la amenaza de un nuevo incendio, y trabajando articuladamente con organismos públicos y empresas privadas, especialmente forestales y eléctricas. La tarea pendiente es terminaruncordón de protección 05 alrededor de Santa Olga. Redacción /M.M. cronicacocronicachillan. cl anoche del 25 de enero de 2017 no se olvida en Santa Olga. Han transcurrido más de 7 años del incendio forestal que pasada la medianochearrasó con este poblado de Constitución, en la región del Maule, y la pesadilla sigue latente. Esuna herida quese mantiene abierta, pese a los avances en materia de reconstrucción. “Estamos aún con el proceso del velorio. El funeral todavía nose ha hecho en Santa Olga.
Nose ha hechoelentierrocompleto, hasta que llegueel último vecino y se termine el último proyecto también”, dice MónicaSepúlveda, histórica dirigente vecinal de Santa Olga, además de una comprometida integrante del comité dela Red de Prevención Comunitaria, entidad que trabaja con más de 5.000 vecinosen la prevención deincendios “Estamos todavía masticando este sabor amargo. Y tenemos que esperar.
Yo creo que cuandoya no quede ningún vecino afuera, cuando ya esté todo como corresponde, saneado, la plaza, calles, veredas, la sede del adulto mayor, ahícreo que vaa ser el funeral”, insiste la vecina también presideelSindicato de Feria Emprendedores Esperanza. En cuestión de minutos de esa terrible madrugada, Santa Olga y los villorrios aledaños Los Aromos y Altos de Morán, quedaron convertidos en cenizas.
Los vecinos habían evacuadolanoche anterior, rumboalaciudad de Constitución -distan-te unos 15 kilómetros-, ante el inminente arribo del fuego en un siniestro conocido como “tormenta de fuego” y que cambió parasiemprela historia del paísen materia de desastres y emergencias. Se empezóa hablar de los incendios de sexta generación. El incendio llamado tam-bién “Las Máquinas” arrasó con185mil hectárde e veagesta ciónnayt biosvquaes producti-pe lo fa LA VECINA JUNTO AL PRESIDENTE GRBRIEL BORIC. vos y terminó con la vida de un vecino, bombero, carabineros. Fiel a suestilo franco y directo, la vecina Mónica sost ne que el proceso postincendiodeSanta Olga y alrededores nohaterminado. “Hemosestadotrabajandoy nos falta harto. Nos damos cuenta que nos falta todavía. Nos falta que lleguen vecinos, nos falta el tema dela plaza, nos falta la vereda, nos falta el trabajo.
Definitivamente es como algo de nunca terminar”, dice, agregando que, por lo mismo, la Mesa de Reconstrucción en la que participan vecinos, autoridades y DESDE LA DESGRACIAS ESTE DIRIGENTE SACA FUERZA Y EMPUJE, representantes de distintas entidades públicas y privadas, ha seguido funcionando durante cado duro, especialmente en estos siete años. el últimotiempo. “Lamento haber perdido los recuerdos. Los recuerdos“Fuimos conocidos mundialmente, jamás habíamos pensado estar enlas pantallas de ningún canal extranjero, pero aparecimos. Mire que justo aparecer por una desgracia, cuando lo ideal sería aparecer por algo bonito, algo bueno”, dice. Fue hace justo un año cuando estuvo con el Presidente Gabriel Boric en el marco del lanzamiento dela temporada 2024. Mónica es una mujer resiliente. De empuje y sobre todo de mucho optimismo. A sus 59 años-y no tiene problema en decir su edadle ha to-de mi madre. Hoy día tambiénperdí a mi papá después delincendio. Perdí a mi otra hermana hace poco. Entonces, uno dice, sino hubiera sido el incendio, a lo mejor ella estaría trabajando, no se habría enfermado, mi papáno se habría enfermado, no se habría perdido muchas cosas. Entonces, yo creo que todo eso te duele. Todo eso todavía afecta”, señala con un dejo detristeza, yalo quesesuma todo lo «viviendas, negociomaterial “a lo material no pero -adara-me aferro, porque todos los días uno va sacando algo nuevo.
Sí me aferro a esto de perder seres queridos”. Cuando se le pregunta cómo se puso de pie luego de la catástrofe, no duda un segundo enresponder que “con la ayuda detodos, de misamigas, de las dirigentas, de la gente que llegaba, de ese apretón de mano, de mi pareja, que hoy es mi esposo. Todo te da fuerza, todo. El saber que está Santa Olga ahí, que está quemado, y que de alguna manera tiene que levantarse también, te da fuerza”. En Santa Olga y alrededores, actualmente residen entre 4. Reconstrucción. La histórica dirigente vecinal sostiene que podrán dejar atrás la pesadilla cuando regrese el último vecino y se terminen las obras comprometidas en la reconstrucción. O ENTREVISTA. MÓNICA SEPÚLVEDA, presidenta de la junta de vecinos del poblado que se incendió en 2017: CEDIDA CEDIDA