Autor: SEBASTIÁN ARRAU Guionista de televisión
CARTAS: Padre gracias a la gestación subrogada
Señor Director: El miércoles, la "Asociación nuevas familias”, representada por nuestro presidente, estuvo en el Congreso exponiendo sobre la necesidad de que se legisle a favor de la gestación subrogada en Chile.
En la presentación se derribaron mitos como los que un decano y una psiquiatra de la Universidad de los Andes plantearon en una carta a este medio para detener un proyecto de ley que ayudaría a tantas parejas chilenas que por motivos de infertilidad no pueden ver crecer sus familias, en un país con natalidad a la baja. Soy padre de dos hijas que nacieron gracias a la solidaridad de Jessie, una gestante canadiense que nos dio a mi marido y a mí el regalo más importante de nuestras vidas.
Ella no tiene alteraciones psiquiátricas, ni es portadora de un trauma infantil como estos doctores aseguran, A cada gestante, cuando hay una legislación seria que las respalda, les hacen un test psicológico que si tuviesen enfermedades mentales no pasarían.
En el caso de la gestante que tuvo a mis dos hijas, está casada, tiene hijos y vivió embarazos propios que disfrutó y que la hacían sentirse plena, Tras tener a su tercer hijo, decidió que no quería criar más, pero sintió que por su facilidad para gestar y el placer que le generaba traer vida, podía ayudar a otros a cumplir el sueño de tener familia. Jessie ama ser madre y por eso pudo empatizar con aquellas personas que no tenían su suerte, de la manera en que muchas mujeres chilenas podrían hacerlo con familias con problemas de fortilidad. Jessie, de manera gratuita y bajo una legislación parecida a la que propone el doctor Zegers para Chile, ayudó también a otra pareja. La mujer tenía un problema en su útero, pero terminó recibiendo mellizos, que son biológicamente de ella y su esposo. Además del embarazo, Jessie nos entregó leche materna para alimentar a nuestras hijas los dos primeros meses. No por problemas mentales, no por necesidad económica, ni por razones oscuras. Por simple generosidad y amor a la vida.