COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿Un renacer de la cultura cívica?
COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿ Un renacer de la cultura cívica? os resultados de la Encuesta LongiLs Social de Chile (del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social) revelan un aumento contundente en la valoración que hacemos los chilenos del acto de votar. La proporción de adultos que están de acuerdo con la afirmación de que "votar es mi deber como ciudadano" aumentó desde un 75% en 2016 a un impresionante 91% en 2024.
En la misma línea, el porcentaje de personas que mencionaron estar de acuerdo con "mi voto influye en el resultado de una elección" subió del 73% al 84%. Por último, aquellos que creen que "votar me permite expresar mis ideas" creció del 72% en 2016 al 85% en 2024. Esta tendencia trasciende el género, edad, nivel socioeconómico, u orientación ideológica de las personas encuestadas. Este aumento es un desarrollo crucial en el contexto de la teoría democrática tradicional. El votar se considera a menudo como la piedra angular de la democracia, una visión respaldada por influyentes teóricos políticos como Robert Dahl.
El creciente reconocimiento del voto como un deber, un mecanismo de influencia y de expresión recalca su papel fundamental en el mantenimiento de un sistema detal en el mantenimiento de un sistema detal en el mantenimiento de un sistema detal en el mantenimiento de un sistema democrático receptivo y legítimo.
La experiencia reciente de Chile, con múltiples elecciones presidenciales y constitucionales, nos han mostrado en forma cristalina que los resultados electorales y que quienes están en el poder tiene un impacto sustancial en nuestras vidas cotidianas. Estas elecciones, y los plebiscitos constitucioce apropiado y necesario. Ello refuerza la alineación entre las preferencias virtualmente universales de la sociedad y sus normas constitucionales y legislativas, fomentando una mayor confianza en el sistema político de Chile. El aumento significativo en el apoyo al voto entre la población adulta, como lo revela la encuesnales en forma particu"El aumento ta, es un desarrollo nolarmente aguda, han significativo enel "ble y alentador.
Cierpuesto de relieve los 1 tamente nos entrega marcados contrastes en APOYO al voto entre 120 de alivio y optimislas visiones de sociedad la población adulta mo en medio de un esque subyacen las proes un desarrollo cenario social complejo puestas programáticas notable y y marcado por la crisis que proponen los candi alentador". de seguridad pública, la datos y partidos. En consecuencia, las personas han ido incubando una evaluación positiva del acto de votar, viéndolo no solo como un deber cívico sino también como un medio práctico para efectuar cambios y mejorar sus vidas. El actual debate legislativo sobre la continuidad del voto obligatorio es particularmente relevante a la luz de estas tendencias.
Dada la evidencia aportada por la encuesta del COES, mantener la naturaleza obligatoria del voto nos parenaturaleza obligatoria del voto nos pareerosión de la educación pública, el acceso limitado y desigual a atención médica especializada, y de la eternamente postergada reforma de pensiones. La creciente valoración del acto votar demuestra que aun cuando abundan los problemas, siempre se puede rescatar algo positivo. Matías Bargsted Roberto González Pontificia Universidad Católica de Chile COES COES.