Autor: Nicolás Pacheco, coach de modelo de negocios y expansión
COLUMNAS DE OPINIÓN: Ley de Insolvencia, una reforma pendiente
COLUMNAS DE OPINIÓN: Ley de Insolvencia, una reforma pendiente Columna Nicolás Pacheco, coach de modelo denegocios y expansión Ley de Insolvencia, una reforma pendiente n2014, la entrada en vigencia de la Ley N* 20.720 de Reorganización y Liquidación de Activos de Empresas y Perso'nasfue vista como un paso importante hacia una economía más ordenada y justa.
Ocho años después, un informe de la Supeintendencia de insolvencia y Reemprendimiento nosinvitaareflexionar sobre el impacto real de esta normativa, especialmente en un contexto marcado por crisis sociales y económicas. ¿Hacumplido su propósito estaley? La respuesta depende dea quiénse le pregunte.
Los sectores de comercio, construcción eindustria manufacturera son los que más han sufrido, y en muchos casos sus dueños se han visto obligados a vender sus activos para pagar deudas y así evitar que el negocio caiga en la insolvencia total. ¿Larazón? El alto costo de acceder a unareorganización formal, lo que hace que, para las mipymes, esta sea una opción poco realista. La disparidad en el acceso ala reorganización es un síntoma del diseño dela ley. Mientras que las grandes empresas cuentan conlos recursos necesarios para renegociar sus deudas, las pequeñas empresassuelen optar por la liquidación directa. Esto dejaa miles de emprendedores enfrentando pérdidas que no sólo afectan su estabilidad económica, sino también su bienestar emocional. Además, el informe destaca que el 40% de las empresas enquiebra son personas que emiten boletas de honorarios, quienesse ven aún más limitados en sus opciones. Se espera que una "Ley 3.0" permita a las mipymes acceder a reorganizaciones simplificadas, reduciendo los efectos negativos enel empleo y en las cadenas de suministro. Un procedimiento menos costoso y más rápido podría darles una oportunidad de reestructurar sus pasivos sin sacrificar su operatividad. Anivel personal, la Ley de Insolvencia también ha tenido impacto.
Más de 22.000 personas han pasado por procesos de liquidación, y otras 6.768 han renegociado sus deudas, con un perfil claro: en su mayoría, entre 30 y 44 años, y con ingresos mensuales entre $250.000 y $500.00. Aquí, las cifras son unrecordatorio de las dificultades que enfrenta una clase media atrapada en deudas, en un país donde el endeudamiento parece la única vía para alcanzar una vida digna. Este balance revela la necesidad de perfeccionar la normativapara que se adaptealarealidad económica actual. La experiencia de estos ocho años debería servir como base para hacer dela Ley de Insolvencia un instrumento inclusivo y eficaz para todos, nosólo paraaquellos con los recursos necesarios para aprovechar sus beneficios. En un país enel que las pequeñas y medianas empresas representan un pilar fundamental dela economía, es hora de quelas políticas de insolvencia reflejen esa realidad.
Aquí les dejo algunas empresas ícono de nuestro país que se han quese hanacogido a esta ley; Automotores Gildemaister, Latam Airlines, Enjoy, Bravissimo Heladerias, Danés Restorán, Multitiendas Corona, Abedin, Supermercados Montserrat, y como no olvidar la solicitud de quiebra de Constructora Cosal, empresa que se había adjudicado la remodelación de la calle Antonio Varasen nuestro querido Puerto Montt. rasen nuestro querido Puerto Montt.. Una de las primeras materias en las que los dos candidatos tendrán que tomar posición esacerca del Caso Convenios a nivel local. Editorial