Autor: Eric Latorre Director del Magíster en Gobierno y Administración Pública, Universidad Autónoma
Decisión tardía
El Gobierno de Chile pusotérmino ala misióndel embajador en Venezuela, ar“la evolución delos hechos a partir delas elecciones presidenciales del 28 de 2024”, traslas cuales Nicolás Maduro asumió un tercer periodo como mandatario de ese país, Este polémico proceso electoral hasido calificadounánimemente como fraudulento. A priori la decisión es correcta, pero extemporánea y sin fuerza simbólica, ya que la evolución de los hechos desde el fraude electoral de julio no han cambiado sustantivamente en nada.
A saber, el gobierno de Maduro viola sistemáticamente los derechos humanos (como ha denunciado Naciones Unidas Otros organismos independientes), el sistema político es de facto una dictadura, Venezuela expulsa a diplomáticos chilenos en agosto de 2024, Maduro insulta a Chile y sus autoridades no prestan ninguna colaboración en materia de crimen organizado, existen sospechas fundadas de operaciones de inteligencia que derivan enla muerte del teniente Ojeda y un Todo lo expuesto ameritaba hace muchos meses no sólo el retiro del embajador, sino que el término de las relaciones diplomáticas con Venezuela, lasque en la práctica no existen, por lo que su mantención simbólica sólo muestra la debilidad de nuestras autoridades y su política exterior, como quedó demostrado en los acuerdos firmados por el exsubsecretario Monsalve que, en la práctica, son totalmente inútiles.