Autor: Roberto Cisternas Contreras
Chile y la energia nuclear
Chile y la energia nuclear Cabe recordar que inicialmente la energía nuclear fue estudiada con fines bélicos, siendo utilizada por primera vez en las bombas nucleares lanzadas a Hiroshima el 6 de agosto de 1945(bomba de Uranio) y Nagasaki el 9 de agosto de 1945 (Bomba de Plutonio) a finales de la Segunda Guerra Mundial.
Pero a fin de prevenir que un acto de destrucción tan masivo volviera a ocurrir apareció la Comisión Interamericana de Energía Nuclear, la cual promueve el uso pacífico de la energía nuclear, asociación a la cual Chile ingresa en 1959, el mismo año en que también firma el Tratado Antártico, y entre varias restricciones, prohibía las explosiones nucleares y eliminación de residuos en el territorio. Pero Chile comenzó el proceso de apropiación tecnológica de la energía nuclear alrededor del año 1955 y luego de que se terminara con la Segunda Guerra Mundial en el año 1945.
Con esto la energía nuclear de Chile entra a la etapa de acceso la cual es motivada por el doctor Eduardo Cruz-Coke Lassabe, quien plantea en el senado la creación de una institución reguladora de asuntos relacionados con energía Nuclear en Chile; y en el proceso presentó el proyecto de una central nucleoeléctrica, a cargo de la Comisión Chilena de la Energía Nuclear y la Empresa Nacional de Electricidad.
Sin embargo, su entusiasmo no es suficiente pues es una idea cara y con beneficios solo a largo plazo lo que provoca que el gobierno opte por evadir un proyecto riesgoso, no significando esto que cesarían las investigaciones y evaluaciones al respecto. Pero su insistencia logró que el gobierno de Carlos Ibañez del Campo, año 1955; enviara a Estados Unidos científicos y oficiales a adquirir los conocimientos nuevos para comenzar a construir el proyecto en Chile. Proyecto que fue aprobado y autorizado por el presidente Dwight Eisenhower para construir bombas atómicas y otras.
Luego, en la década del 60 Chile empieza a explorar el mundo de la Energía nuclear, comenzando en 1960 cuando se integra al Organismo Internacional de Energía Atómica, en la cual es elegido estado representante de Latinoamérica en la Organización Internacional de Energía Atómica, tras firmar el tratado de prohibición parcial de ensayos en la atmósfera en 1963; y el 16 de abril del año 1964 se crea la Comisión Nacional de Energía Nuclear, de la cual Eduardo Cruz-Coke Lassabe Cruz-Coke es el primer presidente, siendo este el primer ladrillo sólido en la construcción del proyecto.
Asimismo, cabe recordar que la energía nuclear en Chile ha sido una alternativa en discusión a formar parte de la matriz energética en el país sudamericano, planteada desde el año 1964 por el político y doctor en medicina Eduardo Cruz-Coke Lassabe.
No obstante que, dicen que el proyecto aún no ha entrado en vigencia y que no existe un compromiso fijo por parte del gobierno sobre este tema desde el año 2011, así como también ha sido rechazado por parte de la población chilena, generalmente por temor a los efectos que pueda producir un terremoto en un país altamente sísmico.
Pero no se podría tapar el sol con un dedo; porque desde el año 1983 a la actualidad se encuentra en una etapa experimental y, el Colegio de Ingenieros de Chile en conjunto con la Comisión Chilena de la Energía Nuclear y otras instituciones competentes al tema han logrado avances importantes del proyecto.
Toda vez que a la fecha existen dos reactores nucleares en Chile, ambos de gran tamaño en funcionamiento: El Centro de Estudios nucleares La Reina (Reactor RECH-1) y el Centro de estudios Nucleares Lo Aguirre (Reactor RECH-2), los cuales están destinados a fines medicinales (radiomedicina) y la investigación, empleándose para la formación, estudio y producción de isótopos radiactivos artificiales: La potencia del RECH-1 de 5 MW térmicos y la del RECH-2 de 10 MW térmicos.
Pero no debemos olvidar que el gobierno de Chile, representado por Eduardo Frei Montalva suscribió el 9 de agosto de 1963, el Convenio de Proscripción de Pruebas firmado en Nucleares, Moscú el día 5 de dicho mes y año.
Constancia de adhesión a los gobiernos de los Estados Unidos de América, del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, y de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, los cuales prohíben las pruebas nucleares en la atmósfera, en el espacio exterior y en el mar. En conclusión, ya no cabría duda razonable que Chile posee las formulas de construcción de bombas atómicas y otras.
Dejando en evidencia que la idea de comprar tanques, aviones y barcos de guerra en esta era nuclear son como regalos para niños. ¿Por qué? Porque las armas nucleares han cambiado el panorama de la guerra, aunque los sistemas convencionales aún tienen un papel importante como los aviones y barcos de guerra que pueden ser útiles para la defensa, el despliegue de tropas, vigilancia, disuasión y; para aplicaciones en operaciones humanitarias y de ayuda en caso de desastres. Aunque Chile nunca ha perdido una guerra..