Las claves para enfrentar el grave rezago lector: Apoyo temprano y formación de profesores
Las claves para enfrentar el grave rezago lector: Apoyo temprano y formación de profesores La Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric, que en materia educacional se enfocó más en la enseñanza superior y no entregó grandes medidas concretas, dejó con "gusto a poco" a los especialistas, que reflotaron la urgente necesidad de atender las necesidades en los primeros niveles, que consideran postergados por la autoridad. En medio de ese contexto, existe variada evidencia sobre el grave rezago lector de los menores en Chile, fenómeno que empeoró sobre todo después de la interrupción de las clases durante la pandemia.
Uno de los últimos estudios que aborda este problema es la "Radiografía de la Lectura", de la red Por Un Chile que Lee, que realizaron investigadores de las universidades de Chile, Católica y de los Andes, publicado a inicios de este año.
Entre sus resultados, arrojó que, al final del primer semestre del año pasado, tres de cada cinco alumnos de 2º básico en la Región Metropolitana estaban bajo el nivel de comprensión lectora esperado a fines de 1º básico. Así, el rezago lector persiste como uno de los focos de preocupación dentro del desarrollo de los niños, sobre todo a edad temprana. Aquello fue abordado la última semana por distintos profesionales en Cartas al Director de "El Mercurio", lo que conllevó a que se vuelva a debatir sobre cuáles son las principales "claves" para enfrentar este problema.
La directora ejecutiva de Fundación Liguria, María José Uauy, apunta que "miles de menores no están aprendiendo a leer en los primeros niveles", y que de la mano de aquello "Chile sufre una catástrofe educacional de proporciones". Fortalecer el desarrollo inicial Especialistas coinciden en que la estimulación temprana para el desarrollo del lenguaje es una de las claves. José Manuel Jaramillo, director ejecutivo de Fundación Choshuenco, observa que "hay un problema serio en cuanto a desarrollo del lenguaje, y que posteriormente eso se traduce en un problema de lectura.
Hay mucha evidencia en que el lenguaje es el principal predictor cognitivo; entonces, con un buen desarrollo en primera infancia, de los 0 a los 3 años, eso va a generar una mayor capacidad cognitiva". También dice que "el lenguaje no es solo un mecanismo para comunicarnos, sino que es aquel a través del cual el cerebro desarrolla su capacidad cognitiva", y que, tras la pandemia, lograron constatar este problema que aún no se supera.
Según Carolina Andueza, presidenta del Comité Ejecutivo de Por un Chile que Lee, se requiere que "todos los actores del sistema educativo le den la urgencia a este aprendizaje, que es basal para los otros aprendizajes, tanto académicos como socioemocionales". A juicio de Susana Claro, profesora de la Escuela de Gobierno UC y cofundadora de Por un Chile que Lee, desde la educación parvularia se necesita apoyar para que los niños lleguen "con las bases necesarias a 1º básico". Esto último, sobre todo, ya que el estudio arrojó que en la mitad de 2º básico aún no se logran consolidar subprocesos básicos como las letras y palabras muy frecuentes. Para Pelusa Orellana, experta del Centro de Investigación e Innovación en Lectura de la U.
Andes, es clave que a temprana edad se desarrollen "habilidades fundantes que constituyen la base para que la lectura esté bien lograda". Ejemplifica con que se requiere que "a fines de 1º básico el niño conozca el alfabeto, lea palabras de uso frecuente con algún nivel de automaticidad y que lea textos breves y sencillos de manera fluida". Catalina Moore, directora ejecutiva de Fundación María José Reyes, añade que dentro de ese apoyo es clave "fortalecer la confianza de los niños en la lectura, sobre todo cuando ya van presentando rezagos, porque creen que no son capaces; entonces, se requiere una intervención desde el área emocional para que vayan sintiendo confianza y se relajen". Importante rol de la familia Moore, además, puntualiza que "es fundamental que para que un niño aprenda a leer se le lea en el hogar. El niño tiene que tener contacto con la lectura previamente, desarrollar vocabulario, conocimiento del mundo, y eso le va a permitir después aprender a leer y que comprenda lo que lee.
Es importante que las familias puedan tener libros en el hogar". En ese sentido, Andueza comenta que "en el tema de la lectura en el hogar, con 10 o 15 minutos que lean los papás con los hijos en la casa, se marca la diferencia". Claro incluso menciona videos de Colombia sobre escolares que llegan a 5º básico sin saber leer, "y nadie se entera, porque nadie nunca los oye leer.
Pueden atravesar todo el sistema escolar escondiéndolo y nadie nunca se da cuenta, aunque los adultos los tenemos en frente". En ese sentido, alerta que "no creo que todos los estudiantes en Chile estén a salvo de esa situación. Simplemente, no lo sabemos, porque no los oímos leer". Que los docentes aprendan a enseñar Otra de las claves que repiten especialistas es que los profesores sepan cómo enseñarles a leer a los estudiantes.
Orellana puntualiza en que para mejorar la lectura se "requiere siempre de enseñanza explícita, con modelamiento de cómo lee un lector competente, con mucha ejercitación sistemática y secuenciada en formatos de práctica grupal, en parejas", por lo que "es importante que el profesor conozca las fortalezas y necesidades específicas de cada uno de sus alumnos, que pueden estar en distintos subprocesos; por ejemplo, un grupo de alumnos puede tener problemas en fluidez, otro en vocabulario, otro en decodificación.
El profesor debe poder atender en todas esas áreas". A su vez, Claro considera que es indispensable que los docentes de 1º básico "tengan acceso a metodologías con evidencia de efectividad", ya que esas técnicas "no se enseñan en las escuelas de educación, porque ahí te formas como `profesor de básica' y eso va de 1º a 8º básico, pero pasa por alto la importancia de que el `profe' de 1º básico sea especializado en metodologías muy específicas y muy especializadas". La académica señala que el profesor de 1º básico se debiera diferenciar del resto de la educación básica: "Ojalá fuera un título diferente, porque requiere una especialización muy específica que no se está entregando en ningún lugar". Andueza añade que "es muy importante lo que ocurre dentro del aula, pero también en lo que influye en esto, como lo es la formación inicial, ya que se requiere formar a profesores que estén especializados en la enseñanza de la lectura, que no es enseñar cualquier otro contenido y tiene metodologías más apropiadas". La mirada de especialistas sobre cómo combatir la crisis de lectura que afecta a menores Las claves para enfrentar el grave rezago lector: Apoyo temprano y formación de profesores DIERK GOTSCHLICH Coinciden en la necesidad de priorizar el tema en las distintas áreas de la sociedad, ya que aseguran que no ha recibido la urgencia que requiere, tampoco en la reciente Cuenta Pública. DESAFÍO. -En la red Por un Chile que Lee aseguran que la meta "es que este tema no esté ausente de la próxima Cuenta Pública". SAN CARLOS DE MAIPO.