Autor: LUIS FELIPE LAGOS M. Economista
La mirada complaciente
Señor Director: La ministra Secretaria General de Gobierno, Camila Vallejo, nos presenta (columna de ayer) una mirada complaciente, alejada de la realidad, del desempeño del Gobierno.
Nos señala que la inflación se ha controlado y que la economía crece; que se ha revertido el "abandono de nuestras policías”; que se han hecho cargo del deterioro de las fronteras; que han aumentado los recursos en salud y que han llevado inversión y desarrollo a todas las regiones. Efectivamente, la inflación se ha reducido, pero gracias a la acertada política monetaria del Banco Central. El Gobierno ha colaborado al reducir el gasto en 2022 en 24%, desde los niveles insostenibles que alcanzó en la pandemia, gracias a un presupuesto elaborado y aprobado en el gobierno anterior. El crecimiento apenas será algo más que 2% este año. No obstante, lo más grave es que nuestra capacidad de crecimiento de mediano plazo se ha reducido a un magro 1,8%. Poco y nada ha hecho el Gobierno para potenciar el crecimiento de tendencia. Los proyectos de inversión se paralizan debido a la permisología o se llevan a cabo en otros países. Estamos perdiendo nuestras ventajas comparativas en sectores como el forestal, debido al terrorismo en La Araucanía y la burocracia.
Las actuales autoridades fueron las que abandonaron a nuestros policías en octubre de 2019 y los siguientes años, al desautorizar su labor de control del orden público, y hacer todo lo posible para desprestigiar la institución; proponían refundar Carabineros. Hoy la delincuencia y narcotráfico solo avanza; no hay calle o barrio seguro; los homicidios se han incrementado a 6,3 por cada 100.000 habitantes, la escalofriante cifra de 1200 al año. La inmigración ilegal sigue siendo un problema sin vías de solución. El principal problema para la población es la seguridad y narcotráfico. En salud, las listas de espera se han agrandado y las autoridades persisten en debilitar a las aseguradoras privadas en vez de propiciar la colaboración público-privada para resolver el problema. Lamentablemente, el presupuesto 2024 no resuelve las dificultades en la gestión y, por consiguiente, no se avanza en la solución de los principales problemas del país.