Biden defiende su candidatura en conferencia clave, pero vuelve a cometer errores
Biden defiende su candidatura en conferencia clave, pero vuelve a cometer errores E n una conferencia con los medios, considerada por la prensa estadounidense como clave para el futuro de su carrera política, el Presidente de Estados Unidos y candidato del Partido Demócrata para los comicios de noviembre, Joe Biden, aseguró ayer que continuará en la campaña a pesar de los llamados a que abandone la carrera a la reelección, en un encuentro en el que se esperaba que disipara los cuestionamientos que han surgido sobre su capacidad para ejercer un segundo mandato.
Y si bien logró mantener el ritmo de la conferencia durante una hora y responder una a una las diez preguntas hechas por los periodistas, el mandatario no cumplió con las expectativas del todo, dicen los expertos, ya que carraspeó, titubeó e inc l u s o c o n f u n d i ó a s u vicepresidenta Kamala Harris con su rival republicano, el expresidente Donald Trump (20172021). "Lo vencí una vez y lo haré otra vez", dijo ayer Biden en la esperada rueda de prensa a la que el mandatario se enfrentó sin guión ni ayuda de sus asesores, en los márgenes de la cumbre de la OTAN en Washington, tras ser preguntado por los pedidos de los demócratas para que abandone la campaña, y en la que afirmó que todavía le queda un "largo camino" por delante. En la conferencia, el Presidente de 81 años defendió sus logros económicos y en política exterior, como en la guerra en Gaza y en Ucrania.
No obstante, la defensa que hizo de su mandato se vio opacada por algunos errores que cometió como confundir a su vicepresidenta con Trump. "No habría elegido al vicepresidente Trump como vicepresidente", dijo Biden cuando se le preguntó cuánta confianza tenía en Harris.
El error se produjo menos de dos horas después de que Biden llamara "Putin" al Presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en una confusión con el mandatario ruso, tras hablar con la prensa en el marco de la cumbre.
La confusión no tardó en ser destacada por Donald Trump, quien en una publicación en su red social Truth Social se burló de Biden y escribió: "¡ Buen trabajo, Joe!". Los cuestionamientos hacia el líder demócrata y el mayor escrutinio a su desempeño como orador se desencadenaron por su mal actuación en el debate contra Trump de fines de junio, en el que tuvo dificultades para responder preguntas y se trabó al expresar algunas de sus ideas, lo que desató dudas relacionadas con su edad (a sus 81 años es el Presidente con mayor edad en la historia de ese país), su estado físico y su agudeza mental.
Tras esa debacle, el mandatario ha intentado mejorar su actuación, pero una entrevista con ABC News que realizó la semana pasada fue decepcionante, según la prensa estadounidense, y tampoco logró disipar los cuestionamientos hacia su candidatura, por lo que hasta ahora nada de lo que ha intentado parece detener la crisis, con más demócratas que piden que se retire ante la preocupación de que el expresidente republicano pueda devolver la Casa Blanca. "Biden hizo un trabajo decente incluso cuando llamó vicepresidente a Trump (se refería a Harris), y antes había presentado al Presidente de Ucrania como Presidente Putin. Parecía en forma, controlaba los hechos y especialmente la política exterior. También hizo un buen trabajo resumiendo los éxitos en economía y seguridad fronteriza. Se mostró apasionado con las armas y los ataques a la democracia. Pero creo que debería haber terminado antes la rueda de prensa. No estoy seguro de que su actuación haya sido tan monumental como para acallar a sus críticos, especialmente a los demócratas. Siguen preocupados por su edad. Las pruebas cognitivas volvieron a salir a colación y él no dijo que estuviera dispuesto a someterse a ninguna", dice a "El Mercurio" Steffen Schmidt, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Estatal de Iowa. Escasas interacciones con la prensa Hasta ahora, la Casa Blanca había limitado las interacciones informales de Biden con los periodistas. Es más, su última conferencia de prensa en solitario fue hace unos ocho meses, cuando habló con los medios por unos 20 minutos en Woodside (California) tras una reunión con el Presidente chino, Xi Jinping.
En febrero pasado compareció brevemente en la Casa Blanca para responder al informe del fiscal especial que lo describía como "un anciano bienintencionado con mala memoria", pero en esa ocasión también tuvo algunas meteduras de pata, como cuando mencionó al expresidente francés François Mitterrand, fallecido en 1996, en lugar del Presidente Emmanuel Macron, y al también difunto Helmut Kohl en vez de la excanciller alemana Angela Merkel.
Las presiones sobre Biden han aumentado en los últimos días, luego de que más de ocho congresistas demócratas de la Cámara de Representantes y el senador Peter Welch, de Vermont, le pidieran abiertamente que abandone la carrera por la Casa Blanca "por el bien del país". Y muchos más ponen en duda su capacidad para ganar las elecciones y permanecer en el poder durante cuatro años más. "Parece cada vez más probable que es una montaña demasiado alta para escalarla", declaró ayer a CNN el congresista Greg Landsman. "La conferencia de prensa de Biden no fue terrible, pero probablemente hizo poco para cambiar el impulso que se ha ido acumulando en contra de su candidatura", comenta Joseph Campbell, profesor emérito de Comunicación de la American University, quien añade que "Biden ha sido muy pobre en sus intentos desde el debate para demostrar su agudeza mental y su aptitud general para un segundo mandato.
Los pedidos para que se retire de la carrera se han intensificado entre sus compañeros demócratas porque temen que no esté a la altura del cargo y que sea un lastre para la candidatura demócrata". A esas voces se sumó la de la expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, una de las demócratas más influyentes, quien el miércoles dijo a MSNBC que "depende del Presidente decidir si se presentará", y agregó que "todos lo alentamos a tomar esa decisión. Porque el tiempo se acaba". Los cuestionamientos sobre la campaña de Biden no se quedan en el ámbito político, y ya hay muchos votantes que opinan que debería abandonar la carrera.
Según una encuesta de Ipsos, publicada ayer por The Washington Post y ABC News, alrededor del 54% de los votantes demócratas quieren que Biden se haga a un lado, misma opinión que comparten dos tercios de los estadounidenses.
Y si bien, solo el 30 % de los votantes creen que el mandatario debe mantenerse en campaña a sus 81 años, el sondeo sostiene que la intención de voto a nivel nacional está igualada en el 46% tanto para Biden como para Trump.
En ese marco, un hipotético cambio de candidato demócrata podría llevar a la actual vicepresidenta, Kamala Harris, a encabezar la contienda frente a Trump, mientras que otro importante político de California, el gobernador Gavin Newsom, también está en la apuestas para el nuevo liderazgo. Sobre estos nombres, el sondeo de Ipsos sostiene que en un hipotético enfrentamiento entre Harris y Trump, la actual vicepresidenta obtendría un 49% de los votos frente al 47% de Trump. Harris está "cualificada para ser presidenta", aseguró ayer Biden en la conferencia.
Elecciones de noviembre en Estados Unidos: Biden defiende su candidatura en conferencia clave, pero vuelve a cometer errores EVA LUNA GATICA El Presidente, que buscaba apuntalar su campaña ante las voces en su propio partido que le piden que dé un paso al costado, confundió a su vicepresidenta, Kamala Harris, con su rival republicano, el expresidente Donald Trump. BIDEN estuvo durante una hora ayer respondiendo preguntas de periodistas, en el marco de la cumbre de la OTAN en Washington. GETTY IMAGES VÍA AFP.