Arte chileno hacia el exterior: Las galerías renuevan estrategias
Arte chileno hacia el exterior: Las galerías renuevan estrategias Antonio Echeverría recibió a los coleccionistas mexicanos en Il Posto. Detrás de él, la obra "Miss Chile, Onas", de Juan Pablo Langlois.
PROCHILE S i la montaña no va a Mahoma... Hace un par de semanas ocurrió en Santiago algo excepcional: cinco coleccionistas y periodistas mexicanos vinieron invitados a Chile para sumergirse en la escena de artes visuales. Conocieron galerías, museos, acervos privados y talleres; conversaron con autores, críticos, curadores, coleccionistas.
El abogado Alfonso Castro, uno de los convidados, miembro del Patronato del Museo Tamayo y socio de la feria Material, dijo que volvía a su tierra con "la imagen de un circuito vibrante, en el que están pasando muchas cosas". Él estuvo acompañado, entre otros, por José Noé, también abogado y comprador, y por las divulgadoras Emilya Rendón, de Multipolar, y Eneyda "Baby" Solís, de la plataforma Obras de Arte Comentadas. La visita del grupo había sido planeada hace tiempo, como parte de una estrategia más ambiciosa que busca reconectar la producción nacional con el exterior.
Reactivar movimientos que qued a r o n s u s p e n d i d o s o a l m e n o s ralentizados en tiempos de pospandemia y estrecheces económicas, en los que ha sido más complejo participar en ferias de arte extranjeras, acción crucial para un mercado pequeño como este. "Hay que salir.
Aquí, después del coleccionismo grande privado, que sería el de Juan Yarur, Pedro Montes, Ramón Sauma, Claudio Engel y Carlos Solari, y que es la base de nuestra pirámide, ocupando dos tercios, no tienes a quién venderle obras de artistas maduros. No tienes más.
Aquí, la punta de la pirámide, que debiera ser el coleccionismo institucional, formal y transparente --de museos o fundaciones-no existe", comenta Paul Birke, fundador de Die Ecke y presidente de la Asociación de Galerías de Arte Contemporáneo (Agac). SE BUSCAN EMBAJADORES El grupo gremial organizó la invitación junto con ProChile.
Evidentemente, se buscaba tener menos costos y más réditos --de acuerdo a lo que se gasta para participar en una feria en el exterior--, considerando la cantidad de artistas y agentes que les fueron presentados a los mexicanos. "Cuando se apoya a las galerías para viajar afuera, puedes llevar a una o algunas, y pocos artistas. Pero acá, al traer a compradores, lo que pretendemos es presentarles todo el espectro de lo que ocurre en la escena. Hicimos recorridos por colecciones privadas, galerías grandes y emergentes", comenta Yerko Martínez, coordinador nacional de Artes Visuales y Escénicas, en el departamento de Economía Creativa de ProChile, entidad que contribuyó a costear esta iniciativa.
A ellos no les falta optimismo: ponen sus fichas en la resonancia que los invitados generarán una vez de regreso en su casa. "Queremos formar núcleos para relacionarnos", afirma María Elena Comandari, codirectora de Artespacio, una de las galerías que conforman Agac. Y explica: "La delegación mexicana quería involucrarse, oír, conocer, y de hecho ya nos han escrito. Vino gente seria e interesada que hizo su trabajo perfectamente. Y Chile tiene mucho que mostrar. Debiéramos continuar con estas invitaciones, armar puzles e ir uniendo gente. Si un extranjero viene y le va bien, eso te abre puertas". No es que Chile no esté asistiendo a ferias relevantes. Se apunta a una combinación de ambas líneas. Justamente, en paralelo a estas visitas, nuestro país estuvo presente en la Semana del Arte en Miami. Con la feria Art Basel al centro, la ciudad se volcó a la cultura a través de una decena de ferias satélites, como Art Miami, Pinta, Untlited y Spectrum. Exposiciones y ventas que reunieron a más de 80 mil personas. La Galería Patricia Ready, que integra Arte y Punto --otra asociación gremial chilena--, participó en la Feria Nada (New Art Dealers), con obras de Seba Calfuqueo, Wiki Pirela, Pablo Linsambarth e Ignacio Gatica. Mientras que el Colectivo Confluencia estuvo en Spectrum; Judas Galería, de Valparaíso, en Pinta, e Isabel Aninat, en Untitled. También en el marco de la Semana del Arte, la chilena Mara Faúndez inauguró su primera muestra individual en Mahara+Co, con representación de Galería Isabel Croxatto. Y poco antes, hacia fines de noviembre, 16 jóvenes chilenos fueron a la Tokyo Art Fair. Algunos venden obras, otros no. Pero pareciera que las galerías chilenas asumieron que este es un plan de conquista a largo plazo. "Nunca se sabe si te comprarán todo, nada, una cosa. Sin embargo, lo que importa es que estás mostrando a los artistas, armando diálogo. Eso ya es ganancia. Cuando uno vuelve, se dedica a escribirles a todos los contactos hechos. Las galerías hacen un trabajo que no ha sido bien conocido. No es solo escoger y colgar cuadros. Es un seguimiento y acompañamiento al artista", sostiene Comandari, cuya galería cumplirá tres décadas en 2025.
Desde ProChile, Martínez proyecta el plan: "Ahora fuimos en línea recta hacia Estados Unidos y de vuelta comenzaremos el año con un despliegue en Colombia, y pensamos aterrizar en México y volver a atacar en Miami". Birke, en tanto, no esconde sus altas pretensiones y apunta sobre todo al coleccionismo institucional: "Queremos reestructurar y reorganizar el sistema. Tenemos a muchos artistas buenos que se están perdiendo en Chile. No puede ser que alguien que no migre a los 25 años, porque decidió quedarse aquí, pierda posibilidades de operar a nivel global. Eso es injusto". Arte chileno hacia el exterior: Las galerías renuevan estrategias Buscan volver a activar un despliegue que se ralentizó durante y pospandemia. Pero también se proponen diversificar o aterrizar objetivos, mirando más allá de las ferias internacionales. DANIELA SILVA ASTORGA.