La "cortesía digital" tiene un elevado efecto ambiental que se puede controlar
La "cortesía digital" tiene un elevado efecto ambiental que se puede controlar "gracias" en mensajes independientes puede llegar a suponer para la empresa un costo adicional de millones de dólares. Más de allá de conseguir una interacción más placentera y humanizada con estos sistemas (capaces incluso de detectar estados de ánimo en el tono y lenguaje del usuario), ser cortés no necesariamente ofrece mejores resultados. El propio ChatGPT reconoce que no necesita un exceso de cortesía para dar respuestas ajustadas y adecuadas.
Verónica Bolón, ingeniera informática y profesora del Departamento de Ciencias de la Computación y Tecnologías de la Información de la U. de La Coruña (España), sugiere ser amables y claros desde el principio sin fragmentar la conversación para encontrar un equilibrio entre la nera individual, ya que se mide en fracciones o milésimas de segundo, a gran escala, multiplicado por los millones de personas que de forma cotidiana utilizan estos sistemas, el consumo energético "sí es notable" y "muy superior", según la respuesta que entrega al ser consultado sobre el tema ChatGPT, uno de los más populares sistemas de IA.
En general, las personas tienden "a usar demasiados adjetivos o frases al conversar con la máquina; eso genera mucho código, un mayor procesamiento y, por tanto, mayor demanda de energía", precisa Miguel Sanhueza, académico de la Facultad de Ingeniería de la U.
Tecnológica Metropolitana (UTEM). Sam Altman, director ejecutivo de la empresa OpenAI (responsable de ChatGPT), ha dicho que solo decir Cada vez que un usuario utiliza pequeñas palabras o frases de cortesía al interactuar con un chatbot de inteligencia artificial --como "hola", "buenos días", "por favor" o "gracias"--, el sistema activa gigantescos centros de datos que pueden estar situados a miles de kilómetros. Y cuanto más largas sean esas frases y más información se envía a esos servidores, mayor será también el tiempo de procesamiento y, por lo tanto, el consumo energético y de recursos. La llamada "cortesía digital", como saludos y agradecimientos a la hora de dar una instrucción a la IA, tiene como resultado un impacto ambiental que no es menor. Y aunque la diferencia entre ser cortés o ser directo es mínima de ma"cortesía digital" y la sostenibilidad.
La investigadora, cuyo trabajo se centra en promover una IA sostenible --a inicios de mes recibió de manos del rey de España el Premio Nacional de Investigación en el área de Matemáticas y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones--, enfatiza la importancia de concientizar a los usuarios sobre el costo ambiental de cada interacción y así evitar "abusos", como generar decenas de imágenes solo por diversión o pedir múltiples versiones de lo mismo sin necesidad. "Promover un uso más reflexivo y responsable es fundamental si queremos que estos sistemas sean sostenibles". Para ello, Sanhueza sugiere "dar instrucciones de manera correcta y, sobre todo, precisa, sin ambigüedades, con objetivos claros". Piden un uso más reflexivo y responsable: La "cortesía digital" tiene un elevado efecto ambiental que se puede controlar Palabras de saludo y agradecimiento al dar instrucciones a un chatbot implican un mayor consumo energético. Ser claros y concisos con los mensajes es una forma de reducir ese impacto.
C. G. y EFE En vez de enviar diversos mensajes del tipo "hola", "buenos días", "por favor", los expertos sugieren dar una única instrucción directa, como "¿ Me ayudas a redactar una carta, por favor?". PEXELS / MATHEUS BERTELLI.