Autor: Patricio Moraga Vallejos
El fútbol con rostro de mujer
El fútbol con rostro de mujer Patricio Moraga Vallejos El fútbol con rostro de mujer La práctica del balompié femenino es tan antigua como la de los hombres. Sin embargo, el camino hacia la profesionalización del fútbol de las mujeres está dando sus primeros pasos M artina Poblete Inostroza tiene 15 años y atesora un sueño.
No es uno cualquiera. "Mi sueño en el fútbol es poder jugar en el extranjero, representar a mi país y poder dejar mi nombre en lo más alto", comenta vía WhatsApp, mientras viaja desde Talca hacia Santiago para formar parte de un nuevo proceso preparatorio para el torneo sudamericano a disputarse en Colombia el 2025 y que entregará cuatro cupos para la Copa Mundial Femenina a realizarse en Marruecos ese mismo año. "Martina es seleccionada de fútbol femenino sub 17 desde el año pasado y lleva ya 8 microciclos preparatorios", señala con orgullo su madre, Lyly. Desde muy corta edad -4 añosMartina ha estado viviendo el fútbol. "Siempre prefería un balón a otras cosas. Jugaba con mis primos, siempre andaba con zapatos de fútbol y un balón. Luego, empecé a jugar por una escuela de fútbol y poco a poco me di cuenta de que eso era lo que realmente quería hacer.
No era un hobby", confiesa la joven que juega de lateral izquierda en Rangers. "Quiero dedicarme profesionalmente a esto del fútbol ya que por eso estoy trabajando para surgir más y poder llegar lejos", afirma la seleccionada nacional, contando en todo momento con el apoyo de su familia, algo que ella no olvida. Martina no es la primera ni tampoco será la última joven que ve en el fútbol su pasión y opción de vida. Contrario a lo que se pueda creer, el origen del fútbol femenino es de larga data.
Y es que mucho antes que la arquera nacional Christiane Endler atrapara la gloria con sus manos enguantadas, o que Chile pisara suelo francés en 2019 para participar en un Mundial de Fútbol Femenino, y que incluso el país participara en 1991 en el primer campeonato sudamericano de mujeres en Brasil, "ellas" ya practicaban el "deporte rey" en la ciudad de Talca. Antecedentes aportados por el investigador Jorge Valderrama Gutiérrez destacan los equipos del Liceo de Niñas de Talca en 1904 y de la Escuela Normal de Talca en 1909. Mario Urzúa y las universitarias de Las Américas. SIGUE EN LA PÁGINA 4.
El fútbol con rostro de mujer "Conocer una pieza del puzle de las mujeres como el caso de que hayan participado en deportes, en la misma época en que recién se comenzaba a practicar el fútbol en Chile por los hombres, nos muestra una imagen sinérgica de cómo se han ido abriendo paso en las distintas áreas", dice Valderrama, resaltando el aporte femenino en los más diversos ámbitos, entre ellos el deporte, pese a la sociedad y cultura machista imperante y persistiendo aún diferencias que menoscaban o colocan en un segundo plano el quehacer de las mujeres. El fútbol femenino es antiguo, casi tanto como el de los hombres.
Hay antecedentes históricos de que el primer partido oficial de fútbol de mujeres se disputó un lejano 23 de marzo de 1895, en Londres, Inglaterra, entre los equipos North y South, con triunfo para el primero.
Se cuenta que hubo 10 mil espectadores presenciando el evento donde destacó la figura de Nettie Honeyball, una activista de los derechos de la mujer y que un año antes había fundado el primer club deportivo: British Ladies Football Club. Otros sostienen que en 1892, en la ciudad de Glasgow, Escocia, se registró el primer partido de fútbol entre mujeres. Es más, se dice que las primeras evidencias del fútbol femenino datan de los tiempos de la dinastía Han, con el juego de la pelota llamado Tsu Chu. Sin embargo, hubo que esperar hasta 1966 para dar pasos concretos en el camino del fútbol femenino, primero en Inglaterra a través de la FA y luego en Europa por medio de la UEFA. Eso, en el viejo continente, porque en Latinoamérica el caminar ha sido más lento aún. Brasil parece ser una excepción, desarrollando fuertes ligas femeninas de fútbol. También está Argentina y otras naciones como Chile y Perú que han buscado abrirse camino. que han buscado abrirse camino. En Chile En los años 50, ya asomaban en Santiago los primeros clubes de fútbol femenino y en la década del 70, Colo Colo comenzaba a desarrollar una rama femenina de fútbol.
Veinte años más tarde, la -en ese entoncesAsociación Central de Fútbol se daba la tarea de conformar la primera selección nacional para las eliminatorias sudamericanas, a realizarse en Brasil, con miras a la primera Copa Mundial Femenina que se efectuaría en China en 1991. Hubo que recurrir a pruebas masivas de jugadoras pues no existía ningún campeonato femenino unificado de Primera División que permitiera elegir deportistas. El periodista Rodrigo Retamal, en su libro La batalla de las pioneras (2018), explora precisamente el nacimiento de la primera selección nacional femenina que disputó esas clasificatorias. En esa ocasión, solo participaron tres selecciones sudamericanas (Brasil, Venezuela y Chile), donde la Roja Femenina perdió 1 a 6 frente a los locales y derrotó por la cuenta mínima a Venezuela. No se logró llegar al Mundial, pero la "revolución femenina" en el fútbol criollo había comenzado.
Mario Urzúa Guazzoni, Profesor de Educación Física, hoy Coordinador de Organizaciones Estudiantiles de la Universidad Católica del Maule (UCM), vivió de cerca la evolución del fútbol femenino, y su testimonio es un ejemplo del paso a paso que se ha dado en este ámbito en las últimas décadas.
Su primera aventura fue en 1998, en el colegio Campvs College en Santiago, organizando el primer torneo de futbolito para las alumnas. "En ese entonces aún no existían competencias oficiales en colegios, por lo que los partidos amistosos con otras instituciones eran el plato fuerte", rememora.
Luego, en el 2011 participó en la Copa Fox Kids, en la ciudad deportiva de Iván Zamorano. "Ya para esos años, existía un interés real de parte de las alumnas -al menos en Santiagoen jugar al fútbol; no en igualdad de condiciones, costaba que los directores de los colegios nos dieran el vamos para las actividades, sin embargo, esas 30 o 40 niñas que corrían tras un balón metían presión, utilizando la implementación heredada de las selecciones de varones o el aporte de algunos apoderados para apoyar a sus hijas, la mayoría de 5 básico", afirma.
Más adelante, Mario volcó su experiencia y entusiasmo en la Universidad de Las Américas, en el 2003, en competencias inter sedes y con la creación de la selección de ese plantel. "Como olvidar nuestro primer partido, contra USACH y de visita, el resultado un 11 a 0 en contra; a nivel universitario U. de Chile, PUC, USACH y la UNAB eran potencia", confiesa. Pero el fútbol ofrece revanchas.
Y es así como con mayor organización y apoyo dirigencial, "en pocos años pasamos a ser un equipo competitivo, con grandes actuaciones a nivel regional y nacional", dice. "Esos inicios del fútbol femenino, al menos a nivel escolar y universitario, fueron a puro pulso, con mucho esfuerzo de todos los que trabajábamos en las distintas instituciones educativas, hoy la realidad es otra y hay que cuidarla, no olvidar nunca que es un Yocelin Berrios. Team Santiago de la Escuela Normal de Talca, 5 de junio de 1909. Archivo patrimonial de Jorge Valderrama. Team Talca de la Escuela Normal local, 5 de junio de 1909. Archivo patrimonial de Jorge Valderrama. VIENE DE LA PÁGINA 2.