¿Por qué fracasan los países...en el fútbol?
¿ Por qué fracasan los países... en el fútbol? PUNTO DE VISTA ¿ Por qué fracasan los países... en el fútbol? países... en el fútbol? --por FRANCISCO GALLEGO -on años de gran preocupación para quienes disfrutamos del fútbol chileno (en micaso, desde la Catedral del fútbol chileno apoyando a la gloriosa Unión Española). Los campeonatos son de bajo nivel (con muy pocos partidos por año), los sueldos son desproporcionados (especialmente en primera división) y las contrataciones de jugadores y técnicos muchas veces resultan difíciles de justificar por motivos estrictamente deportivos. La selección chilena muestra un desempeño paupérrimo, más allá de la bendición que fue contar con una generación dorada acompañada de conducciones técnicas razonables.
Además, enfrentamos un campeonato de cadetes de nivel muy bajo, vínculos poco claros entre clubes, representantes, casas de apuestas y barristas, y una violencia excesiva en los estadios que ni el Estado ni las dirigencias han sabido controlar.
Este desolador panorama puede explicarse, curiosamente, con los resultados de la investigación de los Premios Nobel de Economía de este año (Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson). Estos autores demuestran, tanto a nivel conceptual como empírico, que las sociedades que logran desarrollarse de manera sostenible y a largo plazo cuentan con marcos institucionales que equilibran el poder entre diferentes segmentos dela sociedad y del Estado, respetan las leyes y garantizan igualdad de oportunidades para que las personas y los grupos puedan prosperar. En estas sociedades, los incentivos están alineados con el desarrollo de largo plazo y con la inclusión.
En contraste, los países que no progresan suelen tener lo que los autores llaman "instituciones extractivas": sociedades y gobiernos capturados por grupos de interés, con una concentración excesiva de recursos y poder, incapaces de mirar hacia el futuro y con muy poca generación e igualdad de oportunidades.
Por ejemplo, son justamente estas sociedades, al recibirun boom derecursos, no los aprovechan para su desarrollo, sino que generan conflictos, subdesarrollo y terminan cayendo en lo que se conoce como la "maldición de los recursos naturales". Con este marco conceptual, es evidente que ocurre en el fútbol chileno.
Tenem« un esquema institucional "extractivo", si un gobierno corporativo claro, sin mec: nismos efectivos de control y balance, capturado por grupos con intereses part culares que maximiza el gasto de los recu: sos en el corto plazo.
Por ejemplo, la inver ción del CDF, una genialidad en términ de generación de ingresos para la industri en lugar de convertirse en una bendició para el desarrollo a largo plazo, se transfo: mó en una maldición.
Es tan paradójico aunque nosorprendente desde la perspe: tiva institucional--que la ANFP y los club: declaren que no tienen dinero para finar ciar el fútbol joven (que ya de por sí es muy limitado). Esto se gestiona, ademá con un horizonte anual, donde en pocas st manas se definen campeonatos, reglas « extranjeros y jugadores sub-21. ¿Qué hacer? Como plantean los Premi: Nobel de este año, la solución no es senc lla, ya que quienes ostentan el poder pol tico en el fútbol chileno no tienen incer tivos para cambiar el sistema. Dependemo en parte, de liderazgos extremadamente c: paces (como el gran Abel Alonso) o c aprovechar circunstancias específica como una crisis, que empujen transform: ciones significativas.
A pesar de esto, h: medidas obvias que podrían implementa: se si existiera la voluntad de hacerlo: sep: rar la Federación de la ANFP; establecer u esquema de redistribución de recursos qu fomente la competencia; hacer cumplir l: leyes y regulaciones sobre la propiedad « los clubes y sus vínculos con agentes y C: sas de apuestas; implementar mecanismi de participación de abonados e hinch: en los clubes y en la ANFP); fijar reglas cl: ras de inversión en el fútbol joven, ent otras. Hay probablemente un espacio regt latorio desde el gobierno que, si se hat bien, podría ayudar. Sino actuamos conu: gencia, como ocurre en muchas econc mías con instituciones extractivas, cont nuaremos-salvo excepciones puntuales en una trayectoria de más fracasos qu éxitos en nuestro querido fútbol chilenc * Profesor Titular, PUC-Chile.