COLUMNAS DE OPINIÓN: La ciudad en las campañas políticas
COLUMNAS DE OPINIÓN: La ciudad en las campañas políticas E ntre las múltiples crisis que enfrenta nuestro país, hay varias que se pueden enfrentar con planificación urbana y territorial. El déficit habitacional, la desigualdad urbana, la escasez de suelos, o los crecientes efectos territoriales del clima, por dar algunos ejemplos, pueden ser perfectamente encarados desde la planificación.
A cuatro meses de las elecciones presidenciales, es urgente que quienes aspiran a conducir nuestro país en los próximos cuatro años den a conocer sus puntos de vista en estas materias, explicitando sus definiciones e ideas respecto de cómo queremos vivir y habitar el territorio. La ciudadanía tiene derecho a saber cuáles son las propuestas para resolver el déficit habitacional. Este es, hoy por hoy, uno de los temas más críticos.
Por eso es necesario saber si los programas consideran la diversificación de los mecanismos de acceso a la vivienda, sus criterios de localización, sus niveles de integración social, o el rol del Estado en la gestión de suelo, por plantear algunos nudos críticos.
De la mano con lo anterior, es imperioso saber si se insistirá en el slogan de la "casa propia". Porque como el acceso a la vivienda en propiedad es un anhelo muy arraigado en nuestra sociedad, prometerlo se ha vuelto un lugar común en los procesos eleccionarios. Ello ha impedido profundizar en otros mecanismos como subsidios de arriendo que permitan revertir el déficit y a la vez facilitar la movilidad de las personas en las distintas etapas de sus vidas. También tenemos derecho a preguntar qué plantean las y los candidatos en relación al crecimiento urbano. Durante décadas este ha estado determinado por la lógica del mercado, con una débil regulación estatal. El resultado son ciudades segregadas, mal conectadas, vulnerables y con una preocupante inequidad en el acceso a servicios básicos. Por ello, urge una visión de Estado sostenida en el tiempo, que articule vivienda, transporte, desarrollo económico, equidad social, sostenibilidad, y criterios ambientales que aseguren un respeto por los entornos naturales.
Quienes aspiran a La Moneda deben también explicitar cómo lograrán que chilenas y chilenos podamos vivir en ciudades justas, con entornos seguros, bien conectados, con acceso a múltiples bienes urbanos de calidad, y planificadas con visión de futuro.
Quien pretenda gobernar Chile debe entender no solo que la vivienda y la ciudad también constituyen derechos humanos, sino también que son temas que inciden, directa y críticamente, en la calidad de vida de las personas. La urgencia es hoy y para ello no necesitamos slogans, sino creatividad, liderazgo, y visión de Estado. La ciudad en las campañas políticas Magdalena Vicuña Del Río Decana Facultad de Arquitectura UC e investigadora Cigiden "También tenemos derecho a preguntar qué plantean las y los candidatos en relación al crecimiento urbano"..