COLUMNAS DE OPINIÓN: Regreso a clases sin celular
COLUMNAS DE OPINIÓN: Regreso a clases sin celular Una madre nos hace llegar una carta a nuestro medio, pidiendo hacer público las constantes faltas de respeto que su hijo ha recibido durante su primer año como profesor de remplazo en un colegio de Coquimbo. Aparte de muchas veces tener un ambiente hostil, el reclamo hace referencia al uso indiscriminado de celulares por los jóvenes en la sala. Problemática que hemos tocado en este medio una y otra vez. En todo Chile los maestros sufren con la indiferencia de las mismas autoridades del recinto. Rectores, directores, administrativos en deuda. Pero ¿ qué hacer? Mucho se ha discutido últimamente sobre la decisión de algunos establecimientos de prohibir los celulares a los estudiantes. El argumento de quienes se oponen a esta medida se sustenta en la idea de que no hay que prohibir, sino educar, como si educar y prohibir fueran medidas excluyentes entre sí. Lo cierto es que para educar, a veces es necesario prohibir.
No hay proceso educativo que carezca de límites o de normas. ¿Por qué? Porque educar es orientar a los más jóvenes en el camino que los lleva a la autonomía y responsabilidad en la toma de decisiones y, en consecuencia, al desarrollo y ejercicio responsable de su libertad. Mientras la vecina alega por su hijo, nada pasa.
Hace poco una niña grabó un videos en redes sociales y el tema explotó. ¿Es posible educar a un niño en el uso responsable de un teléfono celular? Claro que sí, y es deber de los padres y de los establecimientos educacionales instruir en estas materias. Sin embargo, ¿es necesario que los escolares cuenten con un teléfono celular dentro del establecimiento educacional para poder educarlo en su uso? No.
El motivo radica en que la educación tecnológica no se reduce al uso del aparato, sino principalmente al desarrollo de las condiciones que permiten hacer un uso adecuado de éste, como por ejemplo, autorregulación, autoestima, autocuidado y autonomía. Y aunque recién arrancan las vacaciones de invierno, no es que queramos ponernos pesados, pero se abre el debate de un regreso a clases sin celular..