Chiloé se apronta a los 200 años de su anexión: historia, identidad y una deuda pendiente de Chile
Chiloé se apronta a los 200 años de su anexión: historia, identidad y una deuda pendiente de Chile historia, identidad y una deuda pendiente de Chile A poco más de siete meses del bicentenario que incorporó a esta provincia a la naciente república, figuras de la historia y la cultura de la región resaltan los aportes del Archipiélago en la configuración del país, aunque lamentan la invisibilización de este legado.
Carolina Ruiz cronicacolaestrellachiloe. cl las puertas de que se A cumplan los 200 años dela anexión de Chiloé ala República de Chile, historiadores e investigadores exigen un reconocimiento profundo y justo del rol esencial quehatenidoeste territorioinsular en la configuración del país. Desde la navegación en rutas australes hasta la colonización dela Patagonia-incluso la Argentina-, pasando por su influencia social, cultural, religiosa y laboral, el aporte de Chiloé ha sido innegable, aunque muchas veces invisibilizado. Poseedor de una de las culturasregionales más distintivas deChile, forjada durante siglos por el aislamiento geográfico, la fusión indígena-hispana y una profunda vida comunitaria, suidentidadse haexpandido aotras zonas a través dela migración chilota. En ciudades como Puerto Montt, Osorno, Punta Arenas, Puerto Natales, Coyhaique y hasta al otro lado delos Andes, muchas familias tienenraíces chilotas y conservan prácticas, apellidos, costumbres y formas de vida que provienen del Archipiélago. Del mismo modo, Chiloé ha desempeñado un papelcrucialen la historia delsur de Chile, siendo un actor clave en la expansión territorial, el desarrollo económico y la preservaciónde una idiosincracia particular. Tras su incorporación nacional en 1826, Chiloé setransformóen una plataforma estratégica para la ocupación del sur austral, participando sus habitantes como navegantes, colonos y trabajadores.
VOCACIÓN MARÍTIMA Ximena Urbina, historiadora de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), rescata la vocación marítima de los chilotes, quienes desde el siglo XVI han sido prácticos remeros y tripulantes en expediciones australes, dominando rutas hacia los archipiélagos magallánicos, de los Chonos y fueguinos. "Con el advenimiento de la república, se embarcaron para todo lo que hiciera falta en las distintas embarcaciones de distintas banderas que precisamente con la república ya empezaban a aparecer libremente y legalmente en todos los puertos de Chile.
Como lo constató en algunos de sus trabajos el profesor Gilberto Harris, de la Universidad de Playa Ancha, loschilotes engrosaron todas las navegaciones de distintas banderas que partieron desde Valparaíso con distintos rumbos, entre ellos el oro de California, porejemplo", explicala académica sobre migraciones que incluso llegaron a Estados Unidos. Urbina también destaca el rolen la colonización de territorios australes, primero en Magallanes y luego en Aysén.
Incluso antes de la independencia, en 1790, los chilotes participaronactivamenteenla refundación de Osorno, mostrando una disposición voluntaria para colonizar y trabajar tierras consideradas propias del antiguo gobierno de Chiloé. "Ellos estaban dispuestosa recuperar aquel territorio que entendían como de su patrimonioterritorial, es decir, dela Gobernación de Chiloé, pero también dispuestos a querer esforzarse en el trabajo de desbrozar y el construir una brozar y el construir una.
Chiloé se apronta a los 200 años de su anexión: historia, identidad y una deuda pendiente de Chile ciudad y dedicarse al bosque y ala ganadería o a lo que haga falta enel territorio", acota la miembro de número dela Academia Chilena dela Historia.
PROYECCIÓN E IDENTIDAD Por otro lado, Dante Montiel, historiador castreño, recalca que el Archipiélago y su gente no sólo han cultivado una culturaúnica, sino que la han proyectado más allá de sus fronteras: "Chiloé diría que es la región con mayor identidad de todo Chile, tiene una cultura con una identidad propia y se reconoce". Uno delos aspectos másrelevantes deestos rasgosha sido su capacidad de esparcir elementos culturales a todo el país. "La arquitectura insular; cultura de madera con expertos carpinteros, el canto, lamúsica de Chiloé, lareligiosidad popular, su especial gastronomía con ingredientes importantes dela zona son elementos que irradian a Chiloé y al país", enfatiza el escritor. Sin embargo, Montiel señala también una realidad dura y persistente: el Archipiélago ha sido históricamente un gran exportador de mano de obra, motivado por la pobreza estructural del territorio.
Esta diáspora laboral no solamente ha nutrido zonas del sur como Magallanes, Osorno, Valdivia y Palena (antiguamente llamada Chiloé Continental), sino tambiénel Norte Grande enciudadescomo Iquique y Antofagasta. "Chiloé ha sido siempre un exportador de mano de obra humilde, sacrificada y de mucho esfuerzo", describe.
Pero junto a ello, el también secretario municipal de Castro llama la atención sobre la deuda histórica que el Estado de Chile mantiene con esta provincia que antes abarcaba mucha mayor superficie. "Desde1826, Chiloé nunca ha sido comprendido en su realidad histórica, social, cultural y económica. Todos los gobiernos han tenido un tremendo ninguneo con Chiloé.
En 1926, cuando se celebró el centenario, ¿qué hizo Chile por Chiloé? Nada, apenas un monolito abandonado", acusa el profesor, A poco más de siete meses del bicentenario, Montiel teme que vuelva a ocurrir lo mismo, sin acciones concretas o incluso monumentos que enaltezcanel valor y la trayectoria de la provincia. "Me imaginaba que los gobiernos podrían haber hecho obras potentísimas para Chiloé, pero ya es tarde", pronostica sobre el escenario quesevivirá enenero de2026. quesevivirá enenero de2026.
AUTOGESTIÓN COMUNITARIA En tanto, Armando Bahamonde, presidente de la Red de Cultura Chiloé, destaca con orgullola gastronomía chilota, que ha ganado reconocimiento másallá de su territorio por su sabor auténtico, su raíz ancestral y su capacidad de uniralas comunidades. "El curanto, la cazuela degallina, elmilcao, la empanada de luche ola tortilla de rescoldo también cuentan historias. Son platos que nacen de nuestras tradiciones, dela tierra y el mar, y que hoy se preparan en restaurantes y ferias", enumera. En palabras del también docente, desde tiempos coloniales, Chiloé ha vivido al margen del reconocimiento nacional, no por incapacidad, sino por una profunda tradición de autogestión comunitaria, solidaridad y trabajo colectivo.
Prueba de ello son las mingas, una prácticaancestral dondela comunidad se une para construir o transportar casas, surcar caminos, cosechar oresolver necesidades sin apoyo externo, solo con lacolaboración vecinal y sin pago de dinero. "Nunca salimos a pedir mosnani auxilio. Sobrevivimos gracias a nuestra cultura y a lo que nos enseñaron nuestros abuelos y padres. Hemos dado todo: hombres, cultura, trabajo y ni siquiera se ha reconocido cómo se debe. Ni una calle ni una escuela lleva el nombre de quienes levantaron las iglesias, los caminos o las casas en este país", reclama el cultor. Como ya viene criticando por años la Red de Cultura, el investigador lamenta que no exista un plan nacional para conmemorar a su altura los 200 años de la anexión. "No queremos salir a protestar. Esperábamos que fuerael Estado quien reconociera este momento, por respeto a nuestra historia y por conciencia de lo que Chiloé ha entregado a Chile", finaliza el ex encargado de Cultura de la Municipalidad de Dalcahue. Dalcahue. PUERTO MONTT "CHILOTA" En la provincia de Llanquihue, Pablo Fábrega, historiador puertomontino, recalca que Puerto Montt fue una ciudad prácticamente chilota, con casiun100% de población deorigen en estas islas. Nombres, costumbres, saberes y oficios son prueba viva de esta inMuencia. "Puerto Montt era una ciudad chilota. La mayoría de sus habitantes venían del Archipiélago, compartían apellidos, cultura y modos de vida. Aún cultura y modos de vida. Aún EIA EL CURANTO ES SOLAMENTE UNA DE TANTAS PREPARACIONES GASTI EABREGA EABREGA LA FIESTA EN HUELMO, CON JAIME BARRIA DE BORDEMAR. después dela llegada delos colonos alemanes, la identidad chilotasiguió siendo dominante. Hasta 1939 el Obispado de Ancud era también determinante acá, no existía el Obispado de Puerto Montt (hoy arzobispado), recién se creó en esa época, que era relativamente reciente", releva el autor. Es así como Chiloé no sólo aportó población y trabajo, también dejó instituciones culturales y religiosas de profundo arraigo. Una de ellas es la fi gura del fiscal, surgida con la evangelización jesuita y considerada por el historiador Gabriel Guarda como la institución católica más antigua aún vigente. Hoy, estos fiscales se mantienenactivos en localidades como Maullín, Calbuco, Carelmapu y en la Carretera Austral, además de las comunas chilotas, como herederos directos del cristianismo popular desiglos. "Chiloé no pide favores, pidejusticia. Reconocer aloschilotes en la historia nacional es una deuda pendiente del Estado de Chile", comenta Fábrega. LEGADO EN OSORNO Desde Osorno, el historiador Gabriel Peralta recuerda que cuando la ciudad fue destruida y despoblada a inicios del siglo XVII debido al asedio mapuche, muchos de los sobrevivientes huyeron hacia el sur.
En ese proceso, se radicaron en lugares como Carelmapu y Maullín, y varios continuaron hacia el archipiélago chilote, donde seresguardaron. "Más adelante, durante la recolonización de Osorno en 1792 por Ambrosio O'Higgins (entonces gobernador de Chi1e), fueron justamente los chilotes quienes llegaron como colonos a comienzos del siglo XIX, asentándose en los campos y más tarde en la ciudad. Estos chilotes trabajaron prinEstos chilotes trabajaron prinPATRICIO ZURTA/NUMICIPALIDAD DE QUINCHAO PATRICIO ZURTA/NUMICIPALIDAD DE QUINCHAO RONÓMICAS QUE LA COCINA CHILOTA HA APORTADO A LA CHILENA. PABLO FÁBREGA PABLO FÁBREGA UN PASACALLES REALIZADO EN PUNTILLA TENGLO. cipalmente en las cosechas de trigo y muchas familias se establecieronen zonasrurales, formando parte esencial de la estructura social y cultural de Osorno. Apellidos como Barrientos, Mansilla, Vargas y Ojeda, de origen chilote, son muy comunes en la región", cuenta. Peralta repasa que más del 50% de la población de Osorno enelsiglo XIX provenía de Chi106, lo que demuestra una fuerte huella cultural en la formación dela identidad osornina.
A pesar de las difíciles condiciones de viaje, hecho pormar en chalupas o botes deriberay luego por tierra sin caminos adecuados, estos migrantes isleños jugaron un rol clave enel crecimiento dela ciudad y la provincia del norte de Los Lagos.
En elámbito cultural y religioso, las festividades rurales osorninas siguen muy influenciadas por las tradiciones de Chiloé: "Por el tema de lasmisiones que se instalaron acá, hay fuerte influencia de las festividad de incluso hasta pasacalles, las oraciones, todotiene un arraigo de origen chilote que se mantiene hoy en día", detalla. La visión compartida por estos estudiosos es clara: Chiloé ha sido un actor central en laexpansión territorial, económica y cultural de Chile, pero rara vez ha recibido el mérito correspondiente. Se critica la mirada centralista, la historia oficial que minimiza su aporte yla falta de inversión e infraestructura acorde con su importancia.
En vísperas del bicentenario desu anexión, se exige una conmemoración significativa, políticas públicas con pertinenciacultural, educación con enfoque local y un reconocimiento explícito del rol que han jugado los chilotes en la construcción de Chile. 3 construcción de Chile. 3 construcción de Chile. 3 construcción de Chile. 3.