Autor: MARIO WAISSBLUTH
CARTAS: Sala Cuna Universal versus FES
Señor Director: El proyecto de ley de Sala Cuna Universal constituye un claro avance, no solo para las madres que trabajan, sino para garantizar a todo infante el acceso a educación inicial, lo que ha demostrado universalmente ser una inversión de altísima rentabilidad social: $7 por peso invertido, comparado con $1 por peso para educación superior (donde nuestro gasto como % del PIB ya duplica el promedio OCDE, aun sin el proyecto FES, que inevitablemente aumentará esta proporción). Sin embargo, el proyecto de Sala Cuna es francamente mezquino, financiera y técnicamente: En primer lugar, asigna un gasto de tan solo la mitad del que hoy tienen recintos como JUNJI o Integra, garantizando así una mediocre calidad y estimulando el surgimiento de dudosas "micropymes pseudo Sala Cuna” para "guardar" a los niños, no para estimularlos.
En segundo lugar, ofrece este apoyo tan solo en el tramo de O a 2 años, con lo cual se dará el absurdo de infantes que asistirían de O a 2 años, para luego perder este beneficio hasta llegar a prekínder. Un simple cálculo indica entonces que el presupuesto de este proyecto debiera ser cuatro veces mayor, llegando así a US$ 200 millones anuales, para corregir estos dos grandes defectos. Es siete veces preferible dedicar estos recursos a primera infancia que a dar gratuidad a alumnos universitarios de clase media entre el 7? y 9? decil de ingresos. Sería un imperdonable error de la actual administración.