Ni siquiera selfies: urgen a turistas a distanciarse de la fauna costera
Ni siquiera selfies: urgen a turistas a distanciarse de la fauna costera L obos marinos descansando en la costanera de Valdivia, Región de Los Ríos; sus parientes en Caleta Angelmó, Región de Los Lagos, disputando territorio con perros sin dueño; o pingüinos --u otras especies-explorando playas de Chiloé generan curiosidad entre los veraneantes que por estos días recorren zonas costeras, principalmente en el sur del país, y que, olvidando muchas veces que se trata de animales silvestres, tratan, riesgosamente, de interactuar con ellos.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) confirma que en el último año hubo cinco casos de mordidas de lobos marinos comunes a personas, tres de ellas funcionarios de las regiones de Valparaíso y Arica y Parinacota, quienes fueron atacados mientras desarrollaban labores de rescate. Hace solo unos días, dos personas fueron mordidas por ejemplares de esa especie en Horcón. Según Sernapesca, habrían sido las víctimas las que, en estado de ebriedad, hostigaban a los lobos.
En Los Lagos, Sernapesca confirma que ha recibido varias alertas de turistas por la presencia de ejemplares de fauna marina, como pingüinos y lobos comunes, en zonas de playa. "Si bien son animales marinos, los roqueríos y playas también son parte de su entorno, por lo que es absolutamente normal que salgan del agua a descansar, a tomar sol o alimentarse", explica Cristian Hudson, director regional de Sernapesca en Los Lagos, quien hizo un llamado a la tranquilidad. Aconseja "observar la fauna marina desde una distancia prudente, y bajo ninguna circunstancia alimentar, tocar o manipular a estas especies.
No acosar, no sacarse selfies y evitar llevar mascotas al borde costero, o hacerlo con arnés, correa y bajo vigilancia para que no perturben ni ataquen a la fauna silvestre". En la Región de Los Ríos, la presencia de lobos marinos es habitual a lo largo de la costanera valdiviana, donde muchas veces los transeúntes deben esquivarlos para no interrumpir las siestas. Pero donde son particularmente peligrosos es en la Feria Fluvial, donde al menos una vez al mes los locatarios lamentan pérdidas producto de las incursiones de hambrientos lobos marinos. De poco ha servido una reja de 1,7 metros de altura que la municipalidad instaló a orillas del río para evitar que entren.
Los lobos rodean la feria por los costados y quedan a solo centímetros de los vendedores que filetean pescado, con el evidente riesgo de ser mordidos. "El lobo marino busca de una y mil maneras sobrepasar cualquier obstáculo que uno le ponga (... ). La última vez arrasó con un puesto de salmones. Ahora, al menos una vez al mes siguen robando, por eso tuvimos que colocar vallas papales.
Con eso se frenó un poco, pero siguen robando", relata Sergio Murat, presidente del Sindicato N2 de Trabajadores de la Feria Fluvial. n SOLEDAD NEIRA y ÓSCAR RIQUELME EN UN AÑO SE REPORTARON CINCO CASOS DE PERSONAS MORDIDAS POR LOBOS MARINOS EN EL PAÍS Aunque su presencia pueda entusiasmar a los veraneantes, expertos y autoridades advierten que no se debe olvidar que se trata de animales silvestres. Los trabajadores de la Feria Fluvial de Valdivia podrían instalar una segunda reja para evitar el acoso de los lobos marinos. ÓSCAR RIQUELME En verano es normal observar crías de pingüinos y de lobos marinos en las costas, pero no se les debe alimentar, molestar, acercárseles o intentar hacer selfies. En la foto, un niño y un pingüino se observan mutuamente en una playa de Lacuy, Ancud, Chiloé. SOLEDAD NEIRA.