EDITORIAL: Una pobreza que por fin se ve
EDITORIAL: Una pobreza que por fin se ve EDITORIAL Una pobreza que por fin se ve Miles de personas estaban quedando fuera de las políticas públicas, simplemente porque no se les estaba mirando bien. El gobierno ha tomado una decisión importante: actualizar los indicadores con los que se mide la pobreza multidimensional en Chile.
Esto significa dejar de mirar la pobreza solo como una falta de ingresos, para considerar también otras carencias que afectan la vida diaria de las personas, como el acceso a salud, vivienda adecuada, educación o redes de apoyo. Este cambio no es menor. Gracias a esta nueva forma de medir, ha quedado de manifiesto que más del 20% de los adultos mayores en la Región de Coquimbo, por ejemplo, vive en situación de pobreza. Una cifra muy distinta al 3,1% que mostraban las estadísticas oficiales hasta ahora, basadas únicamente en ingresos. Es decir, miles de personas estaban quedando fuera de las políticas públicas, simplemente porque no se les estaba mirando bien. La pobreza no es solo tener poco dinero: es no tener compañía, no poder acceder a un médico, vivir en una casa sin calefacción o sentirse excluido. Medir estas dimensiones es esencial para diseñar soluciones reales, más humanas y más efectivas. Esta actualización no soluciona todo, pero permite empezar desde una base más honesta. Porque para mejorar la vida de las personas, primero hay que verlas. Y esta vez, se las está viendo.. - -