Autor: JORGE YARUR BASCUÑÁN
Decir la verdad
Señor Director: Debo desmentir la carta (domingo) de Juan Ignacio Soza, de Reconsa, que refuerza la sensación de que en Chile hay una "élite" que tiene el poder de hacer lo que quiere. Todos los colectores y acueductos involucrados en los socavones 1 y 2 fueron parte directa o indirecta de urbanizaciones de Reconsa, y están gravados en su favor con servidumbres.
Lo anterior consta en la inscripción ante el Conservador de Bienes Raíces de Viña del Mar (foja 2046, N* 2066 de 1998) y en carta enviada a la Contraloría General de la República el 26 de septiembre de 2023 y firmada por el mismo Juan Ignacio Soza. Esto confirma que el MOP está regalando dineros públicos a Reconsa, al hacer obras ¡ legales (sin permiso ambiental) en el mismo campo dunar, zona que es de la empresa de Soza. Debido al eficiente lobby de Soza y Reconsa —y la complicidad de las autoridades— hoy el campo dunar se redujo a solo 30 hectáreas y el resto está lleno de enormes torres y cemento.
Un ejemplo es la calle Cornisa, que Reconsa construyó sin permiso sobre las dunas para urbanizar su proyecto Costa de Montemar VI Etapa, cuyo Estudio de Impacto Ambiental fue rechazado ahora en mayo, entre otras razones por la falta de colectores eficientes del proyecto, y donde quieren construir más de 20 nuevas torres arriba de las dunas. Gracias a un recurso que presentamos, la Corte Suprema paralizó esa obra y la calificó de ilegal.
Esto es relevante, porque todos los recursos judiciales para proteger las dunas han sido presentados por Duna Viva, de la Fundación Yarur Bascuñán, y la Corporación pro Defensa de Viña del Mar, con el sospechoso silencio de las autoridades, pese a estar obligadas por ley a defender el interés público.
Lo que han hecho Juan Ignacio Soza, Virginia Reginato y Macarena Ripamonti, por acción u omisión en las dunas, es una aberración urbana y no se entiende que la alcaldesa actual siga oponiéndose a cumplir los fallos de la Corte Suprema. Insisto en que deben dar la cara a los vecinos que están viendo sus viviendas en peligro al estar en una zona tan riesgosa e inestable como un campo dunar. Ahora fue por unos días de lluvia, no quiero ni pensar lo que pasará con un terremoto.