En los zapatos de un adulto mayor
En los zapatos de un adulto mayor Chilena ideó traje para simular condiciones de una persona de más de 70 años El traje pesa ocho GENTILEZA USACH GABRIEL ARCE GRANIZO www.publimetro.cl/cl/economia Presbicia, dificultad para ponerse de pie, poca flexibilidad en la espalda, interferencia en las articulaciones, cansancio y un pitido en los oídos. Todos, síntomas de la vejez, pero que, salvo contadas excepciones, las personas no sentirán hasta que el reloj fisiológico lleve varias décadas en curso.
Eso es un problema para experimentar empatía, pensó la sicóloga clínica de la Universidad de Santiago, Valeria Jeldres, que por lo mismo creó un traje que va en contra de la norma establecida: en vez de dar súper fuerza o funciones mejoradas, entrega la experiencia de ser una persona mayor de 70 años.
Se trata de un equipo de dos piezas de 8 kilos de peso -un Chaleco y dos prendas que se adosan a las rodillas-, junto a unos lentes que simulan el deterioro de la vista y audífonos que emiten sonidos similares a sufrir de tinnitus, o esos molestos pitidos en el oído. “Fui viendo la necesidad de visibilizar la realidad de las personas mayores desde mis papás, cuando comenzaron a envejecer”, cuenta. Presentó el traje en la Universidad de Talca, una actividad del Parque Bicentenario y en el Festival Cambalache de la Usach. ¿Su idea? Perfeccionarlo y que lo usen en las facultades de medicina del país. La finalidad es que los alumnos trabajen la empatía. “Es una invitación concreta para que la persona joven se ponga en el lugar del adulto mayor. Si haces una charla, todos te encontrarán la razón, pero si intentan subir una escalera con el traje, ahí si comprenderán el problema”, afirma la sicóloga. Su cruzada, además, busca ayudar a los ancianos que sufren de fragilidad. “Es una condición médica. Sufren de sarcopenia -pérdida degenerativa de masa muscular-, pierden peso rápidamente, cansancio crónico. Ese agotamiento fisiológico los hace vulnerables a las caídas”, explica. “Estoy armando una ONG. Me interesa que los ancianos se reúnan en parques por iniciativa propia, no que esperen el taller de la municipalidad”.