Belén Peña cambió un estudio en Santiago Centro por una casa en la Carretera Austral
Belén Peña cambió un estudio en Santiago Centro por una casa en la Carretera Austral Belén La joven cuenta que, a veces, caballos se acercan a su antejardín Peña cambió un estudio en Santiago Centro por una casa en la Carretera Austral En el sur, dice, las cosas van más lento. Por eso le costó un tiempo encontrar un grupo de amigos con quien compartir. WiLHeLM KRAUSE elén Peña estaba cansada.
Bos»: de seis años en un departamento tipo estudio en el centro de Santiago, específicamente en Santa Isabel con Fray Camilo Henríquez, la llegada del Covid 19 significó para ella una sentencia: su única escapatoria en días de cuarentenas era un diminuto balcón con vista parcial a la cordillera. Suficiente para un respiro, pero insuficiente para vivir. "La pandemia fue decisiva. Antes quizás nunca me había incomodado estar en un estudio porque era un lugar donde llegaba después del trabajo, pero estar encerrada ahí fue otra cosa. Además, estaba súper descontenta con mi trabajo. Empecé a pensar mucho en el tema del espacio, en tener un lugar más grande donde vivir, con patio, más naturaleza, algo que me diera mejor calidad de vida", recuerda. Le vino un cuadro depresivo. Cree que no fue solo producto del encierro por el Covid-19, sino de un cúmulo de cosas que la pandemia intensificó. "Todo se me desarmó, por decirlo de alguna manera. Empecé a pensar: ¿ por qué vivo acá?", continúa. En 2022 se fue a Dublín. Quiso experimentar un cambio drástico: dejar de lado temporalmente el trabajo en oficina, aprender inglés y dedicarse a cosas más informales. "Dublín fue un poco hacer una pausa en mi vida de Santiago. Era una experiencia que siempre había querido vivir, pero la idea de vivir en el sur siempre estuvo ahí", explica. Por eso se asentó en la Carretera Austral, en las cercanías de Puerto Montt. Cuenta que sabía que quería irse al sur, sin un destino en específico, hasta que dio con el anuncio del arriendo que tiene actualmente. "Encontrar esta casa fue prácticamente una casualidad.
Apareció un anuncio navegando en internet, justo lo que queríamos con mi pareja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roja: cerca de una ciudad grande, roBelén (Obelenpuntoycoma) cuenta que cuando conoció a su pareja, él también tenía el anhelo de vivir en el sur. deados de naturaleza y con las condiciones que buscábamos", relata. El traslado fue sencillo.
Arrendaron un camión pequeño para llevar sus escasas pertenencias: plantas, ropa y algunos muebles desarmados, eso porque ella vivía en ese espacio pequeño y él arrendaba una propiedad amoblada. "Fue fácil, entre comillas, porque vendimos casi todo antes. No teníamos cama, veladores ni refrigerador", señala. Actualmente están instalados en una casa con diseño minimalista y techo plano. De repente van caballos al antejardín. Peña dice que es lo que soñó. "Aquí podemos poner música fuerte sin que nadie reclame, algo que en un departamento sí pasa y es una cuestión que entiendo. Acá hay espacio suficiente y, sobre todo, mucha tranquilidad". ¿Ha extrañado algo concreto de vivir en Santiago? "Lo que más extraño son mis amigos. El cambio más drástico fue dejar de verlos frecuentemente. Ahora solo los veo cuando viajo o cuando ellos vienen, pero no es como antes, cuando podíamos juntarnos los jueves O los sábados con facilidad. También extraño cosas puntuales, como un bar favorito que tenía allá. Acá no he podido encontrar uno.
Pero, en realidad, no es algo que me afecte tanto como para considerar volver a la ciudad". ¿Cómo ha sido hacer vida social en el sur? "Al principio llegué muy ansiosa, con muchas ganas de formar rápidamente un grupo de amigos, pero entendí que acá todo se da de forma más lenta y natural. Hemos ido conociendo gente paulatinamente, principalmente personas que también llegaron buscando comenzar una nueva vida.
Ahora sí tenemos algunas personas con quienes compartir, pero sigue siendo un proceso que toma tiempo". ¿Le ha costado acceder a algún tipo de servicio? "La verdad, no, porque estamos bastante cerca de Puerto Montt, donde hay todos los servicios esenciales como urgencias médicas, supermercados grandes y centros comerciales. Además, tenemos cerca un pequeño strip center con farmacia, almacén y verdulería.
Eso sí, tener auto facilita muchísimo la vida porque el transporte público no tiene los mejores horarios ni frecuencias". ¿Es más barato vivir en el sur comparado con Santiago? "En realidad, no siento que sea mucho más barato, pero sí obtienes mucha mejor calidad de vida por un costo similar. Por lo que pagaba por mi estudio en Santiago, acá vivo en una casa amplia, con más espacio y sin gastos comunes, rodeada de naturaleza. Sería imposible encontrar esto en Santiago por el mismo precio". ¿Han podido viajar y recorrer la Carretera Austral? "Todavía no hemos hecho un recorrido grande por la Carretera Austral, lo tenemos pendiente. Por ahora, aprovechamos mucho lugares cercanos como Hornopirén, Metri o caleta La Arena. Llegar a estos sitios en apenas un par de horas y regresar a casa el mismo día es algo que valoro muchísimo. Es una suerte vivir tan cerca de lugares así, que antes solo veía como destinos lejanos para vacaciones". (AJOSETOMUNOSILVA (AJOSETOMUNOSILVA.