Autor: Christian Guzmán Verdugo
El problema no es ese
Subdirector nacional de Formación e Identidad Santo TomásA mi entender ese no es problema. Se nos comienza a hacer una costumbre abordar las problemáticas por sus efectos y no por el fundamento de estas.
Considerando esto último, es que me atrevo a proponer un punto de inicio y respondernos: ¿ Cuál es el lugar y el grado de importancia que posee el ser humano en el fondo de estas discusiones? ¿ Cómo hacer para que la dignidad inalienable se encuentre articulando estas y otras discusiones a raíz de la importancia y distinción que esta tiene? El valor inalienable de la dignidad de la persona humana es en la teoría un punto de partida común en todos nuestros ordenamientos, desde allí arrancan miles de iniciativas, normas y legislaciones que van articulando lo que somos y hacemos; es por esto que siempre vendrá bien recordarnos que todo lo que discutamos, decidamos, legislemos, debe tener como norte evidente realzar nuestra dignidad que nos hace ser herederos, y custodios preservadores generacionales de todo lo viviente. Dependerá de nosotros y nosotras la calidad del país, del planeta y la sociedad, en la cual vivimos y que dejaremos a los que vendrán. No tiremos por la borda lo más preciado que tenemos: nuestra dignidad.
Una vez más nuestro acontecer nacional nos ofrece temas en los cuales podemos involucrarnos para aportar reflexiones que, logren junto a otras, pavimentar ciertos caminos de diálogo y articulación ante los distintos y desafiantes escenarios que nos toca vivir. de las distintas Dentro temáticas podemos que reflexionar quiero rescatar dos, una de ellas es el reflote de los temas de aborto y eutanasia que no han dejado de estar presente por sus innumerables impactos: políticos, biológicos, antropológicos, etc. Junto a esto hace unos días se abrió el debate frente a la capacidad los animales, en sintiente de este caso particular de los peces.
Ahora bien, me pregunto ¿ Cuál es el problema?, ¿Qué los animales sientan?, ¿Qué los animales tengan conciencia?, o ¿ Determinar las temáticas de la vida humana por una variable de tiempo cronológico o existencial?la ONU, que el último año ha sido presidido por la embajadora de Chile ante las Naciones Unidas, Paula Narváez, hablé de cómo avanza esa tarea titánica en esta zona del mundo. los El último informe de 17 ODS reporta que la mitad están retrasados y más del 30 por ciento se han estancado o retrocedido. Según el reporte voluntario de Chile de 2023, nuestro país, disminuyó 0,4 puntos en comparación con su desempeño del año anterior, pasando del lugar 30 al 32 del ranking mundial. El país con mejor posición es Finlandia con un puntaje de 86.35 y el peor con números reportados, Sudán, con 40.14. Chile tiene 77.82 puntos.
Nuestro país enfrenta problemas estructurales que se reflejan en una persistente matriz de desigualdades, avance sostenible. el dificultando desarrollo hacia un Esta desigualdad incide en el acceso a oportunidades, sobre todo de los grupos más vulnerables, ya que no se cuenta con políticas integrales que conecten la oferta pública con la privada. Esto es clarísimo en el caso de las personas mayores, las con discapacidad física y mental y las que viven en situación de calle. Vivir en la calle representa una de las expresiones más profundas la visible una constelación de exclusiones, y de la pobreza. Es, además, característica más vulneraciones de de carencias derechos que se retroalimentan entre sí. Suena ingenuo esperar un futuro sin pobreza cuando más de cien millones de personas en el mundo enfrentan la situación de calle. En Chile, esta población aumentó en 37 por ciento en los últimos 5 años. Dentro de las principales causas de este incremento se encuentran la pandemia y sus consecuencias económicas y sanitarias, el masivo fenómeno migratorio y la crisis de vivienda. Una singularidad chilena en esta materia es que tenemos la más alta permanencia de personas en calle del continente: el 31% de ellas pasa en promedio seis años y másen esta situación. La única forma para enfrentar este complejo problema social es a través de políticas públicas innovadoras e integrales. Nosotros como Hogar de Cristo y otras fundaciones, operamos el Programa Vivienda Primero en varias regiones de Chile, el cual ha logrado sacar a 700 personas de la calle. Lo desarrollamos con el financiamiento del Ministerio de Desarrollo Social, desde hace 5 años. Esta iniciativa público-privada favorece a hombres y mujeres mayores de 50 años, y el objetivo es que superen la situación de calle a través del arriendo de una vivienda y de acompañamiento social.
En un lustro, los resultados de Vivienda Primero en el Hogar de Cristo han demostrado que el 99% de los participantes ha mantenido sus viviendas, que el 70% disminuyó el consumo de alcohol y drogas, y que el 30% generó ingresos autónomos.
Además de estos logros notables, estudios del Ministerio de Economía demuestran que el costo por persona anual del programa es inferior a lo que gasta el Estado en atender a una persona en situación de calle. Vivienda Primero es un ejemplo alentador respecto de cómo, ofreciendo soluciones innovadoras y efectivas a los grupos que se están quedando atrás, se puede superar la pobreza. Lo desalentador es que es este sea sólo un ejemplo y no parte de una política integral.
Ahora mismo, el Hogar de Cristo lucha por que se abran más albergues para evitar que la gente muera de frío y, por eso mismo, está en medio de una colecta digital para ampliar albergues, rutas calle, casas de acogida. Esto, porque en lo que va del año, ya hay 13 personas muertas por hipotermia en la calle, cuatro más que todos los fallecidos por esta causa en 2023. Por eso, en la ONU y acá, los insto a pensar y actuar juntos en busca de las mejores sendas para reducir la pobreza y dejar de considerarla parte del paisaje..